1. Ambientación-Recepción-Animación
   Los encargados, anfitriones y guía tendrán que tener preparada la primera estrella de papel u otro material adecuado con su nombre: «Maravillosa». Hay que recibir a todos amablemente y en especial a los que no estuvieron en la primera sesión. El lugar donde se vaya a orar que esté limpio, arreglado y con flores, y el cuadro o imagen de la Virgen en el mejor sitio. Recíbanlos con
   mucho cariño y alegría. Si se puede sería bueno tener un CD con cantos a la Virgen que vaya ambientando muy bien la sesión que para algunos será la primera pues es el día en que desde hace siglos se inician estos rosarios.
2. Ubicación.-Oración inicial , ofrecimiento y canto

Nota: Los promotores variarán algunas frases si la Pascua es cada 8 días. Guía: Vamos a iniciar juntos nuestra sesión de hoy. Contempláremos a María según nos lo relatan las primeras frases del Nican Mopohua. Agradezcamos a Dios que podamos comenzar estos tradicionales rosarios Guadalupanos que se realizan en tantas partes del país a partir de este día. Nos unimos en comunión con todos los que oren estos días como nosotros y pedimos especialmente por nuestro país y América Latina, Nos encomendamos a los santos apóstoles Simón y Judas Tadeo a quienes hoy celebramos. Lógicamente también a Juan Diego y otros santos de nuestra devoción. Iniciamos en el nombre del Padre... (Ofrecimiento y oración inicial pág. 15). Puede hacerse todo o recortarlo según les parezca conveniente.

III. Hechos y consideraciones para hoy

Guía: Vamos a escuchar el relato de este día, que corresponde al primer párrafo del relato original y que no está numerado
Lector: «Aquí se cuenta, se ordena cómo hace poco milagrosamente se apareció la perfecta Virgen Santa María, Madre de Dios, Nuestra Reina, allí en el Tepeyac de renombre-GuadaIupe. Primero se hizo ver de un indito; su nombre: Juan Diego; y después se apareció su preciosa imagen delante del recién Obispo Don Fray Juan de Zumárraga».

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

«María se apareció milagrosamente,»»
Gracias a Dios que hace maravillas, al Creador y Señor, el Autor de todo bien, María viene a visitar a sus hijos de parte suya, a las tierras hoy llamadas México y América. Alegrémonos por este amor, providencia y plan de Dios.

Segunda consideración

María es la «perfecta Virgen Madre de Dios...»

Es hechura de El, la más maravillosa y la más digna de los hijos del Padre isu Hija predilecta! Es Madre del Dador de vida, de Jesús, Hijo del Nuestro Salvador. Es Templo glorioso del Espíritu Santo; es la Inmaculada, la perfecta creación de Dios. Gocemos contemplándolas,

Tercera consideración

María es «Nuestra Reina»

Dios la ha hecho Señora Universal, Reina de la creación y de todos nosotross Es la que nos preside en el camino del seguimiento de Jesús. Ejerce su realeza y poder amoroso sobre nosotros, su familia, su pueblo, para servirnos y encaminarnos hacia Dios nuestro fin último. Dios la puso como amparo y Señora Nuestra, Pongámonos bajo su mirada amorosa y ofrezcámosle nuestro amor.

Cuarta consideración

María se manifiesta «en el Tepeyac, llamado Guadalupe

Dios siempre es concreto al manifestarse; revela algo a alguien en lugares geográficos determinados. Jesús nació en Belén; murió y resucitó en Jerusalén. María se presenta en este cerrito bendito, elegido por Dios, donde El la da a conocer de manera privilegiada como Madre Universal. El nombre de Guadalupe se lo da Dios en una historia concreta y con un significado concreto de salvación adecuada a las circunstancias: Río de Amor, Río de Luz, Río Escondido, Vencedora de los que acaban con nosotros, la que aplasta el poder de la Serpiente, la que
viene del oriente como águila... Tantas traducciones de su nombre como son
tantas sus acciones en favor de todos.

Quinta consideración

La Santísima Virgen «se hizo ver de Juan Diego: luego apareció su imagen ante el señor Obispo Fray Juan de Zumárraga».

DIOS, a través de María, revela, manifiesta a su Hijo para que todos nos salvemos por El, Y es el pueblo, y Juan Diego, y el Obispo que preside en la fe al pueblo quienes son los receptores del don y de la salvación de Dios. Agradezcamos este plan maravilloso de Dios.

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy Guía: Ayuda a que la gente participe para sacar provecho, para ver cómo vivir lo leído, lo que nos enseñan Dios y María. Haz algunas preguntas como éstas:

Guía: ¿Qué nos parecieron estos hechos? ¿Cómo nos sentimos ante Dios, que nos ha dado a María como Madre? (Comentarios...)

Dinámica de la estrella
Guía: Hoy su título es: Maravillosa. ¿Por qué decimos que María es maravillosa? (Deja que se expresen. A lo mejor brota para después una letanía a María, la Maravillosa, Siempre harán preguntas relacionadas con la estrella de cada día y con María para que haya más claridad de cómo es Ella Nuestra Estrella para evangelizarnos.

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua
   Lectura base: Apocalipsis 12, 1-2 Salmo: 147

Guía: Al terminar la lectura pregúntales si ven la relación de estas lecturas con lo leído hoy del Nican Mopohua y a qué los llaman la Palabra de Dios y este acontecimiento preparado por El. ¿Qué podemos hacer para ayudarle a María, Nuestra Madre, para que Dios sea conocido? (Comentarios)
Frase del Evangelio: «Tanto amó Dios al mundo que le mandó a su Unigénito para que tenga vida» Jn. 3, 16 (Momento de silencio para reflexionar y sentir esta palabra de Dios). Indícales que hay
que recordar esta frase durante la noche y el día o los días siguientes si se hace la Pascua cada ocho días — para no perder el fruto de hoy.

VII. Oraciones complementarias del rosario
Padre Nuestro, 3 Ave Marías, Salve.

Guía: Te sugiero el primer modelo de las letanías que están en la página siguiente. Indícales que son especiales, que constan de 3 partes con distintas respuestas; que las vayan contestando según se les indique.

VIII, Oración final-Canto-Acuerdos-Despedida

Guía: Decir la oración final: pág. 16. Que escojan quién leerá mañana. La estrella llevará el nombre de: Alegre.

 Letanías Guadalupanas (1)
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Madre del Verdadero Dios por quien se vive
Madre del que está siempre cercano a todos
Madre del Creador de los rostros y los corazones.
Madre del Dueño del cielo y de la tierra
Madre que nos manifiestas al Unico Dios y Señor
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Ruega por nosotros
Madre que nos das a conocer el plan de Dios para que se realice
Madre que traes la salvación de Cristo, el Salvador
Madre verdaderamente admirable
Madre de mirada compasiva y misericordiosa
Madre que nos despiertas infinita confianza
Madre que levantas a los indígenas de su postración
Madre que nos llamas a seguir los pasos de Jesús
Tú, la perfecta y siempre Virgen, Santa María
Enséñanos a amar
Tú, que nos amas con amor delicado y materno a cada uno
Tú, que te preocupas de todas nuestras necesidades
Tú, que escuchas nuestros llantos y remedias nuestras tristezas
Tú, que curas nuestras penas, miserias y dolores
Tú, que nos das todo tu amor, compasión, auxilio y defensa
Tú, que nos envías a vivir el amor a Dios y a nuestros hermanos
Reina del universo y de toda su armonía
Enséñanos a servir
Reina de todas las maravillas de Dios
Reina de la alegría, de los cantos, la belleza y toda la creación.
Reina de todas las veredas y caminos que llevan a Dios.
Reina de todas las variadas razas de hombres de la tierra.
Reina de todos los que buscan a Dios.
Reina de la Iglesia, servidora de Dios y de todos los pueblos.
Reina de los Angeles...Reina de los Profetas...(Siguen como siempre).
Cordero de Dios..

1. Ambientación-Recepción-Animación
   Guía y anfitriones: Tener todo preparado para la sesión de hoy.
2. Ubicación.- Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Haz un pequeño resumen de lo leído y meditado ayer —sesión anterior—  y presenta la estrella de hoy: Alegre, porque lo que leeremos y meditaremos llenó de alegría a Juan Diego y a nosotros; y también porque en la anunciación el Angel Gabriel le dijo a María: «Alégrate, llena de Gracia».

III. Lectura del Nican Mopohua (1-13)

Guía: Escuchemos cómo Juan Diego se dirigía a Tlatelolco el Sábado 9 de Diciembre para ir al catecismo cuando le salió al paso la Santísima Virgen.
Lector
1.«Diez años después de conquistada la ciudad de México, cuando ya estaban depuestas las  flechas, los escudos, cuando por todas partes había paz en los pueblos,
2. así como brotó, ya verdece, ya abre su corola la fe, el conocimiento de Aquél por quien se vive: el verdadero Dios.
3. En aquella sazón, el año 1531, a los pocos días del mes de Diciembre, sucedió que había un indito, un pobre hombre del pueblo,
4. su nombre era Juan Diego, según se dice, vecino de Cuauhtitlán,
5. y en las cosas de Dios, en todo pertenecía a Tlatelolco.
6. Era sábado, muy de madrugada, venía en pos de Dios y de sus mandatos.
7. Y al llegar cerca del cerrito llamado Tepeyac ya amanecía.
8. Oyó cantar sobre el cerrito, como el canto de muchos pájaros finos: al cesar sus voces, sobremanera suaves, como que les respondía el cerro; sus cantos deleitosos, sobrepujaban al del coyotototl y del tzinitzcan y al de otros pájaros finos.
9. Se detuvo a ver Juan Diego. Se dijo: ¿Por ventura soy digno, soy merecedor  de lo que oigo? ¿Quizá nomás lo estoy soñando? ¿Quizá solamente lo veo como entre sueños?
10. ¿Dónde estoy? ¿Dónde me veo? ¿Acaso allá donde dejaron dicho los antiguos, nuestros antepasados, nuestros abuelos: en la tierra de las flores, en la tierra del maíz, de nuestra carne, de nuestro sustento; acaso en la tierra celestial?. Hacia allá estaba viendo, arriba del cerrillo, del lado de donde sale el sol, de donde procedía el precioso canto celestial.
12. Y cuando cesó de pronto el canto, cuando dejó de oírse, entonces oyó que lo llamaban, de arriba del cerrillo, le decían: «JUANITO, JUAN DIEGUITO».
13. Luego se atrevió a ir a donde lo llamaban; ninguna turbación pasaba en su corazón ni ninguna cosa lo alteraba, antes bien se sentía alegre y contento por todo extremo; fué a subir al cerrillo para ir a ver de dónde lo llamaban».

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Dios actúa en la historia de México de una manera especialísima 10 años  después de la conquista. (1).

Dios actuaba de muchas maneras en esa precaria paz que había después  de la conquista de México. El, en la paz, va a suscitar el acontecimiento Mariano en el Tepeyac para que el pueblo viva y comience a tener una paz especial regalada por El. Dios de la Paz: haznos vivir en tu armonía. (Padre Nuestro...)

Segunda consideración

Se inicia en México de una manera más palpable, la fe en «el Dios por quien se vive». (2)
La gracia de la evangelización dió inicio a las conversiones de algunos indígenas, como Juan Diego, que aceptaron al Dios de la vida gracias a la predicación evangélica de los Frailes recién llegados al antiguo Anáhuac-Tenochtitlán y a estas tierras mesoamericanas. Pidamos que la Fe siga profundizando en nuestros países.

Tercera consideración

Juan Diego recibió la visita de María al amanecer del 9 de Diciembre de 1531 en el Tepeyac al ir a la catequesis a Tlatelolco. (3-7)

Dios escoge el cerro del Tepeyac como el lugar adecuado para hacer la alianza con nosotros; y la fecha precisa, para que María se presente puntualmente allá. Juan Diego nos enseña a poner a Dios en primer lugar en nuestras vidas y a tomar parte en la vida eclesial del lugar y tiempo en que vivimos. ¿De veras Dios ocupa el primer lugar en nuestra vida? ¿Tomamos parte en los aconte-
cimientos eclesiales de nuestra Diócesis o parroquia? ¿Nos seguimos preparando continuamente para vivir la verdad y el amor de Dios?

Cuarta consideración

Juan Diego, al oír cantar a los pájaros tan armoniosamente, se siente como si estuviera en el paraíso. (8-11)
Dios le hizo sentir esta alegría y armonía para que se dispusiera a oír la voz más bella y deleitable: la de María. Aprendamos de Juan Diego a saber descubrir a Dios, a saber detenernos y a interiorizar los hermosos acontecimientos especiales, y también los sencillos, de cada día. ¿Cómo usamos nuestros sentidos? ¿Damos gracias a Dios por ellos?

 Quinta consideración

Juan Diego oye que lo llaman y se acerca para ver quién lo hace. (12-13).

La presencia de Dios y de María siempre consuelan, animan, promueven, llevan a la paz y al gozo profundo. Aprendamos a escuchar a Dios y a María en las diversas situaciones que vamos viviendo para tener esta alegría y esta paz. Imaginemos la alegría de Juan Diego al oír pronunciar su nombre por la voz dulce y piadosa de Nuestra Madre.

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Encauza los comentarios para que saquen provecho.

Guía: ¿Qué nos parecieron estos hechos? ¿Qué nos hacen reflexionar? ¿Cómo nos hemos de disponer para escuchar a Dios y a María? ¿Qué tal Nuestra Estrella? (Comentarios).

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y meditado en el Nican Mopohua
   Lectura base: Rom 8,15-21

Guía: Procura que se dé un momento de silencio y luego invítalos a que den sus opiniones.Dispónlos para que participen en el salmo.
Salmo: 148
Frase del Evangelio: «Yo he venido para que tengan vida y la tengan en plenitud». Jn 10, IOB

VII. Oraciones complementarias del rosario
Padre Nuestro, 3 Ave Marías...

Guía: Puedes escoger alguna de las letanías Guadalupanas que están en el libro, por ejemplo las de la sesión anterior. Si prefieres, puedes orientarlos para que digan frases bonitas a María relacionadas con el nombre de la estrella de este día a manera de letanías. Esto lo puedes hacer en
todas las sesiones si el grupo es capaz.

VIII. Oración final-Canto-Acuerdos-Despedida

Guía: La oración final está en la pág. 16. Ya no lo señalaré en adelante. Procura traer a la mano varios cantos para que escojan alguno que refuerce lo vivido este día. Pónganse de acuerdo sobre quien leerá y quién llevará la estrella de mañana que se llamará: Bella..

I Ambientación-Recepción-Animación

II Ubicación.- Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Ayuda a recordar algo importante del día anterior —sesión anterior— y  presenta la estrella de hoy: Bella, porque María aparece así en el Nican Mopohua y es la mujer perfecta de Dios.

III. Lectura del Nican Mopohua (14-23)

Guía: Este día leeremos cómo Juan Diego se encuentra por primera vez con la Santísima Virgen; queda sorprendidísimo ante su belleza y la transformación que se da del cosmos; María le pregunta a dónde se dirige.
Lector
14. «Y cuando llegó a la cumbre del cerrillo, cuando lo vió una Doncella que allá estaba de pie,
15. lo llamó para que fuera cerca de Ella.
16. Y cuando llegó frente a Ella mucho admiró en qué, manera sobre toda ponderación aventajaba su perfecta grandeza:
17. su vestido relucía como el sol, como que reverberaba,
18. y la piedra, el risco en el que estaba de pie, como que lanzaba rayos;
19. el resplandor de Ella como preciosas piedras, como ajorca (todo lo más be110) parecía;
20. la tierra como que relumbraba con los resplandores del arcoiris en la niebla,
21. Y los mezquites y nopales y las demás hierbecillas que allá se suelen dar, parecían como esmeraldas. Como turquesa aparecía su follaje. Y su tronco, sus espinas, sus aguates, relucían como el oro.
22. A) En su presencia se postró. B) Escuchó su aliento, su palabra, que era
extremadamente glorificadora, sumamente afable, como de quien lo atraía y esti-
maba mucho.
23. Le dijo: —»Escucha, hijo mio el menor, Juanito, ¿A dónde te diriges?»

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego vió a la Virgen quien lo llamó para que se acercara a Ella, (14-15)

María vino de mensajera de Dios, es portadora del Reino de su Hijo para todos; Ella se nos sigue acercando primero, pero también quiere que nosotros nos acerquemos a ese amor, a ese cariño y vivamos en su presencia. Pidámosle que permanezca con nosotros y que no nos separemos de Ella.

Segunda consideración

Juan Diego se queda extasiado ante la belleza de María. (16-21)

La misma creación es transformada ante la presencia de María. iCómo se habrá sentido Juan Diego en ese momento como si estuviera ya en el cielo!

Dejémonos fascinar por la belleza corporal y espiritual de Nuestra Madre y Reinar que Ella sea fuente de nuestra alegría y transformación. Pidámosle que este mundo hermoso nos ayude a glorificar a Dios y que todos cuidemos las maravillas que El nos ha regalado.

Tercera consideración

Juan Diego se postró ante la Santísima Virgen. (22A)
Al hombre, al reconocer el mundo de lo divino, no le queda más que postrarse. Estos sentimientos y estas actitudes religiosas tan profundas engrandecen al hombre, Gocemos la presencia de María; aprendamos de Juan Diego la humildad, la reverencia y piedad con que la trata y caminemos siempre por la vida en la presencia de Dios.

Cuarta consideración

Juan Diego escuchó la palabra de María que era extraordinariamente agradable, como de quien quiere mucho. (22B)
¿Cómo se habrá sentido Juan Diego ante la voz dulce y tierna de María? ¿Qué habrá sentido en lo más profundo de su ser ante esta manifestación de Ella?Dejemos que las palabras y la actitud de María nos penetren. Y si a Ella así la escuchamos ¿cómo deberemos escuchar siempre la Palabra del mismo Dios?

Quinta consideración

María le pregunta a Juan Diego a dónde se dirige, (23)
María está al pendiente de lo que hacemos, de lo que nos pasa, porque le interesamos. Gocemos esta pregunta y sintamos que en este momento nos la expresa a nosotros. ¿Qué le diríamos? ¿A dónde dirigimos nuestra vida? ¿La tenemos bien encauzada? ¿Nos daría pena decirle que nuestra vida no está bien dirigida? Sintamos su cariño cercano por nosotros y dejémonos tocar por su amor que nos manifiesta en tantos cuidados y atenciones.

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: ¿Qué sacamos hoy de este Rosario? ¿Qué aprendimos? ¿A qué, nos impulsa Dios con lo que hoy vivimos? ¿Qué aprendimos de María, Nuestra Estrella Bella y de Juan Diego? (Comentarios...)

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

    

Lectura base: Exodo 3, 1-6

Salmo: 45 (44)

Frase del Evangelio: Dijo María: «Alaba todo mi ser la grandeza del Señor; en verdad el Todopoderoso ha hecho grandes cosas por mí». (LC* 1, 46)
Guía: Invítalos a que mediten en silencio y luego comparten un rato. (Comentarios..)

VII. Oraciones complementarias del rosario
Guía: Escoge las letanías adecuadas. Antes, en medio o después de ellas pueden decirle a María frases bonitas relacionadas con el nombre de la estrella de hoy.

VIII. Oración final-Canto-Acuerdos-Despedida
Guía: Inicia la oración final. A lo mejor añaden algo. Pónganse de acuerdo sobre quién leerá y quien llevará la estrella de mañana, que se llamará: Siempre Virgen.

I  Ambientación-Recepción-Animación

II Ubicación-Oración inicial,

ofrecimiento y canto Vamos a iniciar una parte muy importante del relato de las apariciones. Después de que la Virgen llama a Juan Diego, poco a poco hace la presentación de Sí misma, de Dios, del plan de Dios y de Ella, y de la misión de Juan Diego y
Fray Juan de Zumárraga Hoy reflexionaremos sobre esta presentación, Por lo
que Ella dice en esta parte del relato la estrella de hoy es: «Siempre Virgen».

III. Lectura del Nican Mopohua (24-26B)

Guía: Vamos a escuchar la lectura que hoy meditaremos. Juan Diego le responde a la Virgen con mucha espontaneidad y sentido cristiano a dónde voy por qué, y Ella se presenta a sí misma con gran humildad..

Lector:
24, Y él le contestó: —»Mi Señora, Reina, Muchachita mía, allá voy a llegar, a tu casita de México Tlatilolco, a seguir las cosas de Dios que nos dan, que nos enseñan quienes son las imágenes de Nuestro Señor: nuestros sacerdotes».
25. En seguida, con esto dialoga con El, le descubre su preciosa voluntad;
26. Le dice: «Sábelo, ten por cierto, hijo mío el más pequeño, que yo soy la Perfecta siempre Virgen Santa María(a),Madre del Verdaderisimo Dios

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego le dice a la Virgen que va a Tlatelolco a seguir las cosas de Dios, (24-A)

Imaginemos este diálogo entre María y Juan Diego. iQué bello que un indígena con tan poco tiempo de evangelización se empeñe en las cosas de Dios! El expresa que quiere darle su lugar a Dios en su vida, quiere estar en las cosas de Dios para robustecerse en la fe, esperanza y amor y lo hará en el templo y casa de Dios y de María. ¿Nos interesamos y nos comprometemos por las cosas de Dios como Juan Diego?

Segunda consideración

Juan Diego dice que las cosas de Dios se las enseñan los sacerdotes. (24- B)
En ese tiempo era lógico que los sacerdotes fueran los únicos que lo hicieran pues no había más evangelizadores; se ve además el respeto de Juan Diego por ellos. Ahora que se nos inculca que todos somos evangelizadores ¿de veras procuramos vivir el Evangelio? ¿Intentamos ser evangelizadores y testigos preparados? PidamoS por los sacerdotes para que ejerzan bien su ministerios

Tercera consideración

María dialoga con Juan Diego. (25)
Dios es diálogo amoroso eterno entre el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Ellos son y viven relaciones perfectas y amorosas entre Sí y con nosotros. María, la primera redimida y la colaboradora máxima de Dios en la obra de salvación, también dialoga con Dios, con Juan Diego, con nosotros, Nos hace conocer, apreciar y vivir la voluntad divina. Dejemos que Ella nos enseñe hoy a dialogar con Dios y entre nosotros...

Cuarta consideración

María se le presenta a Juan Diego como la «perfecta siempre Virgen Santa María». (26-A)
María manifiesta algo importantísimo: que es Perfecta Virgen. Sí, Ella es íntegra, corazón fiel, entrega total sin doblez... Modelo de toda la Iglesia que ha de ser Virgen también... Tenemos una Madre Santa que nos puede y quiere enseñar la fidelidad, la entrega perfecta, total, incondicional, a Dios y a los demás. ¿Queremos aprender de Ella a vivir esto para Gloria de Dios y bien de muchos.,?

Quinta consideración

María se presenta como Madre del verdadero Dios. (26B)
La maternidad divina es el título máximo de María, lo que hace que todos ya veneremos y queramos como a nadie después que a Dios. iDios la escogió como la máxima criatura colaboradora suya en la obra de salvación! ¿La tenemos en el mejor lugar después de Dios en nuestra vida? Ella nos puede dar a conocer a Dios como a Juan Diego.

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: ¿ Qué sacamos en este día? ¿Qué aprendemos hoy de Juan' Diego? ¿Qué María, La Siempre Virgen? ¿ Con qué sentimiento y afecto nos quedamos hoy Después de estas consideraciones?

VI Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el  Nican Mopohua
Cántico de María: Lc. 1, 46-55; Is. 40, 1-5 y 9-11

Frase del Evangelio: «María: vas a quedar en cinta; tendrás un hijo y le pondrás por nombre Jesús...» LC 1 , 31
Guía: Ayúdalos a que puedan comparar los textos de la Sagrada Escritura con el texto del Nican Mopohua y que perciban cómo Dios ha hecho una alianza especial con todos desde el Tepeyac a partir de la intercesión de Nuestra Madre.

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Antes o después de las letanías, que coloquen la estrella de hoy en un sitio especial. A ver si algunos dicen algunas frases bonitas a manera de letanía, a María por ser siempre Virgen.

VIII. Oración final-Canto-Acuerdos-Despedida

Guía: Pónganse de acuerdo para ver quién llevará la estrella del día siguiente  que se llamará: Evangelizadora.

Nota para los que hacen la Pascua contínua.— Por ser mañana la fiesta  de Todos Santos vean la posibilidad de llevar al lugar de reunión nombres de Santos patrones o de los que sean muy devotos o algunas imágenes de ellos para que sirvan de fuente de inspiración durante la celebración Mariana.

Nota para los que siguen la Pascua semanal.— Ustedes seguirán la sesión sin mencionar que ese día de Todos los Santos

Ambientación - Recepción - Animación

Nota: Antes de comenzar recuerden la nota de ayer -la sesión pasada
Ubicación - Oración inicial , ofrecimiento y canto

Guía: Para iniciar ubícalos sobre el sentido de la fiesta de hoy; invítalos a que quieran vivir su vocación a la santidad. Este día lo dedicamos a María como la máxima evangelizadora como aparece en el relato de este día. Es la que asimiló y vivió mejor el Evangelio entre todos los humanos. Ella nos ayude a vivir como santos al estilo de Jesús.

Nota para los de la Pascua semanal: Guía: ¿Qué entendemos por Evangelio? ¿ Qué significa evangelizar? (Comentarios) Vamos a ver hoy cómo María evangeliza

III. Lectura del Nican Mopohua (26 b-f)

Síntesis: Vimos la vez pasada cómo la Santísima Virgen se presenta a Sí misma a Juan Diego; hoy veremos cómo le presenta a Dios; Ella es la que nos da a conocer a Dios, la que nos lo revela, la Evangelizadora, la que nos trae a Dios a este Continente americano. Al presentarle a Juan Diego quién es Dios, emplea los nombres que usaban los pueblos antiguos del Anáhuac para nombrar a Dios, pero Ella añade algo muy importante: que El es el Verdadero Dios...
Lector:
26. La Virgen le dice a Juan Diego: yo soy la «Madre del Verdaderísimo Dios (b) quien se vive (c) , el Creador de las personas(d), el Dueño de la cercanía y de a inmediación (e), el Dueño del cielo, el Dueño de la tierra(f)»

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

María manifiesta que es Madre del Verdaderísimo Dios. (26-b)
Ella pone delicadamente este acento en la presentación de Dios, del Veredero y único Dios Trinidad que existe, ante lo que expresaban -de el en las antiguas religiones mesoamericanas.

¿Conocemos así, como Ella, al Verdadero Dios, o nos andamos inventan- do un Dios que satisfaga nuestros deseos, caprichos, ideologías,.? ¿Buscamos conocerlo en verdad o creemos que ya lo conocemos y no profundizamos más?

Segunda consideración

María le dice a Juan Diego que Dios es «Aquél por quien se vive, el Dador de vida». (26-c)
Esta definición de Dios como el Dador de vida era muy familiar y muy estimada por los pueblos indígenas del altiplano. Dios, el Dador de vida, quiere que el hombre viva, que tenga perfecta vida; quiere que todo y todos tengamos y ofrezcamos vida. María misma viene como testigo de esta verdad de Dios al dar vida al pueblo que estaba postrado en la desesperación y abatimiento y lo levanta a una vida en el amor y la esperanza. ¿cómo vivimos nuestra vida? ¿Damos feli-
cidad, amor, verdad, pan, vida a los que nos rodean?

Tercera consideración

María le dice a Juan Diego «que Dios es el Creador de las personas» (26- d).
La suprema creación de Dios somos las personas. El nos hace libres, capaces de amar, de servir, de construirnos nosotros mismos cada quien y de hacer nuestra historia colectiva responsablemente con su ayuda. El es el que favorece que cada quien tenga un rostro firme y un corazón generoso como postulaba la mística indígena de entonces como ideal de la educación de los jóvenes, de las
personas. ¿Vivimos como verdaderas personas dignas de todo respeto? ¿Respetamos la dignidad y grandiosidad de cada persona? ¿Luchamos por los derechos humanos para que la gloria de Dios sea el hombre libre y perfecto? ¿Trabajamos porque cada rostro y corazón sean el reflejo de Cristo?

Cuarta consideración

María presenta a Dios como el más cercano y próximo a nosotros. (26-e).
Dios es el que se nos acerca, el que quiere ser íntimo a nosotros, el que nos ofrece su intimidad... iqué alegría saber y tener la experiencia de este Dios vivo que nos rodea con todo su amor misericordioso, con su fidelidad eterna! María lo conoce y lo ha experimentado así como nadie en la tierra y así nos lo comunica ¿Cómo vivimos la cercanía, proximidad, amistad, intimidad con Dios, con María, con los santos? ¿Cómo presentamos a Dios a los demás? Dependerá de la amistad, conocimiento e intimidad que tengamos con El... Ella nos enseña a amarlo y a intimar profundamente con El.

Quinta consideración

María nos presenta a Dios como el Dueño y Señor del cielo y de la tierra. (264).
Dios ha realizado toda la creación, es el Todopoderoso. El Dios de la armonía, de los maravillosos ecosistemas, que ha hecho todo bien para que todo tenga orden, equilibrio, belleza. El hace que todo el cosmos contribuya para nuestro bien. ¿Le agradecemos esta creación maravillosa a nuestro Dios? ¿Nos esforzamos por conservar bien la naturaleza que nos rodea, alimenta y descansa? ¿Colaboramos con otros en campañas ecológicas?

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Revisemos este día: ¿qué sacamos hoy de provecho? ¿En qué avanzamos? ¿Conocemos más a Dios, a María? ¿Nos conocemos más a nosotros mismos en algo; en qué? ¿Apreciamos más a la Estrella Evangelizadora?

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua
   Lectura base: 1 Jn. 1, 1-7
   Salmo: 138 (139)

Frase del Evangelio: «Yo soy la luz, el que me siga no caminará en tinieblas...» Jn 8, 12
Guía: Ayuda a que hagan la relación y a que saquen provecho. ¿Cómo puede san Juan haber escrito ese inicio de su carta? ¿Qué tanto habrá convivido con Jesús? ¿Cómo lo habrá amado para que escriba esto? ¿Cómo vivirá María esta sublime intimidad con Dios? ¿Qué nos podrá enseñar
Ella de esto? ¿A qué, nos invita lo leído y orado hoy? (Comentarios...)

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Te sugiero las mismas letanías de la sesión anterior,

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

La estrella de mañana será: Compasiva

Nota para el guía: para mañana —la sesión siguiente- hay que haber preparado bien la sesión porque los que hacen la Pascua semanalmente no tienen que hacer mención de los difuntos, En cambio, el guía de la Pascua contínua puede aprovechar hasta la tradición de los altares familiares a los difuntos y las idas a los panteones de tantos devotos.

1. Ambientación - Recepción - Animación

Nota para el guía de la Pascua continua: Quizá fuera bueno hoy, por ser día de Difuntos, hacer una memoria especial de algunos familiares o amigos más cercanos de los que participan en esta celebración.

1. Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Procura animar la celebración de este día con una motivación que ayude a fijar la mirada en la misericordia de Dios y de María. Ella se presenta como la llena de amor y compasión.
III. Lectura del Nican Mopohua (26g-29)
Guía: María, después de haberse presentado, le da a conocer a Juan Diego por qué ha venido y qué quiere. Escuchemos esta lectura:

Lector:
26g. «Mucho quiero, mucho deseo que aquí me levanten mi casita sagrada
27. En donde lo mostraré, lo ensalzaré al ponerlo de manifiesto:
28. Lo daré a las gentes en todo mi amor personal, en mi mirada compasiva, en mi auxilio, en mi salvación:
29. Porque yo en verdad soy su Madre compasiva.»

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

La Santísima Virgen le dice a Juan Diego que quiere su casita sagrada, su templo. (26-g)
El templo ha sido algo muy importante para todos los hombres religiosos  como expresión de una necesidad de vivencia de comunión, en un lugar, con Dios y con otras personas que profesan la misma fe. Pero como en este caso María pide el templo como el inicio de un encuentro y de una permanencia está significando- según la tradición indígena- que viene a levantar una ciudad, una realidad nueva. Con un templo los indígenas iniciaban una ciudad, un nuevo estado de cosas. Dios manda a María al Tepeyac para que desde allí se inicie una nueva realidad para América y para el mundo después de una conquista tan dolorosa...

¿Queremos iniciar una nueva vida con María Pidámosle que nos ayude a realizar este deseo junto con todos los hombres de buena voluntad.

Segunda consideración

María le dijo a Juan Diego: «quiero que aquí me levanten mi templo...»  (26-g)
El lugar, en el contexto simbólico del hombre, es muy importante: aquí nací, aquí me enamoré, aquí viví, Aquí, es signo de que se queda algo de nosotros en ese lugar. María, al decir, aquí —se sobreentiende e/ Tepeyac- está señalando un lugar de encuentro cordial con la humanidad para siempre. Dios escogió en su plan providencial este sitio como un lugar privilegiado, especial, para residencia de María con una presencia tan original y tan real de Ella que todavía no acabamos de vislumbrar. ¿Somos agradecidos con Dios por este privilegio de su estrategia divina, de su plan de salvación para todos nosotros? Agradezcámosle las experiencias vividas en los lugares que han sido o son actualmente importantes en nuestra vida.

Tercera consideración

Nuestra Madre le dice a Juan Diego que, en el Tepeyac, Ella mostrará a Dios y lo ensalzará al ponerlo de manifiesto, (27)
Ella es la gran reveladora -manifestadora- de Dios; es a el a quien nos viene a dar, a manifestar... Qué alegría que la propia Madre de Jesucristo, el Señor, nos lo venga a entregar aquí a nuestra Patria y para todos los hombres de la tierra. ¿Qué hacemos para manifestar y dar a Jesucristo a los demás? Pidámosle a Ella que nos enseñe a conocerlo, amarlo y darlo a otros.

Cuarta consideración

María nos dice cómo nos da a Dios (28).
Ella no puede darse ni darnos a Dios sino con todo su amor personal, con su compasión, con su auxilio y defendiéndonos... Esta sí es verdadera pedagogía para mostrarnos y darnos a Dios personal e íntimamente; por eso su visita al Tepeyac es verdadero Evangelio; es una perfecta catequesis creativa. Ella se nos manifiesta como maestra de esta nueva evangelización... ¿Cómo hacemos a otros la presentación de Dios; ponemos todo nuestro ser en esta entrega? ¿Nos damos
a los demás como lo hace María: con amor y compasión, auxiliando, defendían

Quinta consideración

María nos dice: «Yo en verdad, soy su Madre compasiva». (29)
¡Qué declaración amorosa y qué presentación de esperanza para todos nosotros! Ella es nuestra Madre compasiva. Gocemos y sintamos esta verdad que nos hace vivir alegres y esperanzados, Y démosle gracias a Dios porque nos ha tenido a María en el Tepeyac tantos años demostrándonos su amor con tantos hechos..

1. Reflexiones y comentarios

sobre lo meditado hoy
Guía: Ayuda a sacar el máximo provecho con algunas preguntas,vgr: ¿alguno ha experimentado cómo María nos da a Dios, o cómo María ha sido compasiva con nosotros? ¿Nos quieren compartir alguna experiencias?

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído en el Nican Mopohua.

Texto base: Is. 46, 3-13 y 49, 13-23
Salmo: 107 (106)
Frase del Evangelio: «Dijo Jesús: «He ahí a tu Madre» (Jn. 19, 27a).
Guía: ¿Qué nos parecen estos textos? ¿Cómo quedamos después de escucharlos y compararlos con lo que hemos leído? ¿Encontramos alguna relación? (Comentarios...)

VII. Oraciones complementarias del rosario
Guía: Te sugiero las mismas letanías. Motívalos para que añadan algo sobre la compasión de María. Antes de iniciarlas podrían decir los nombres de algunas personas difuntas por las que quisieran orar. Podrían contestar a las invocaciones: ruega por ellos, en favor de los fieles difuntos. (los de la Pascua semanal pueden pedir la compasión de María sobre niños de la calle, enfermos, alcohólicos, drogadictos, ancianos...)

VIII Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Ve quién se hará cargo de la estrella de mañana; se llamará: Madre Nuestra

1. Ambientación - Recepción - Animación
2. Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Hoy vamos a contemplar a María, Madre nuestra, diciéndonos cómo Ella es Madre de todos y cómo nos va a atender, a servir en todas nuestras necesidades de una manera especial en el Tepeyac.

III. Lectura del Nican Mopohua (30 - 32)

Guía: María, como vimos la sesión pasada, le dice a Juan Diego a qué vino; hoy escucharemos su proclamación de Madre universal de todos. Escuchemos sus palabras.

Lector:
María le dijo a Juan Diego:
33. «Yo soy Madre tuya y de todos los hombres que en esta tierra están en uno.
31. Y de las demás variadas estirpes de hombres, mis amadores, los que a mi clamen, los que me busquen, los que confíen en mi, 

32Porque allí les escuchare su llanto, su tristeza; para remediar, para curar "zdas sus diferentes penas, sus miserias, sus dolores».

1. Hechos o consideraciones para este día.

Primera consideración

María le dice a Juan Diego: «Soy Madre tuya y de todos los hombres que esta tierra están como siendo uno...»  (30)
Aquí, en esta tierra que hoy es la ciudad de México y México mismo, Ella inicia su manifestación - en América - como Madre de todos. íQué orgullo para todos nosotros tenerla aquí! iQué alegría saber que Dios mismo ha escogido para de María el cerrito del Tepeyac en donde antes veneraban los indígenas a la Tonantzin! Es el sitio desde donde Dios proclamará todo el mundo La maternidad
zszitual de María sobre todas las gentes como ya antes lo había hecho Cristo desde la cruz al dejarle a María el encargo de cuidar de san Juan. iGocemos esta  mararavillosa, espléndida noticia!

Segunda consideración

María le declara a Juan Diego su maternidad espiritual universal. (31)
María es Madre de todos por el amor de Dios y el plan que tiene en favor nosotros Ella quiere ejercer esta misión y cuidado con todos los humanos.
Para toda América eEla iniciará de una manera especialísima su atención a todo este Continente de la esperanza desde el Tepeyac.
¿Podríamos tener mejor noticia en México? ¿Qué podemos hacer para sentirnos y vivir como hijos de María? ¿Cómo llevar a otros esta alegre noticia? ¿Qué hacer para sentirnos todos hijos de la misma Madre y amarnos como hermanos que somos según Dios lo ha querido?

Tercera consideración

María se mostrará como buena Madre de los que la aman y la buscan con confianza. (31 )
Reconocer a María como Madre y vivir como verdaderos hijos de Ella es un don del Padre. Vivir amando a María es darle gloria a Dios porque María ocupa un lugar especialísimo en su plan de salvación universal* ¿Agradecemos a Dios este don de María como Madre? ¿La amamos como Dios quiere que la amemos? ¿Buscamos estar con ella, le damos tiempo, la invocamos y confiamos en su cariño maternal?

Cuarta consideración
María le dice a Juan Diego que allí, en el Tepeyac, escuchará nuestros llantos y tristezas. (32 a)
Tenemos en el Tepeyac a nuestra Madre por disposición de Dios para servirnos. Ella está dispuesta a oírnos siempre, está a nuestro servicio. Después de Dios es La que mejor nos puede escuchar; ihoy es tan difícil encontrar a alguien que quiera escuchar gratis a otros..) Ella es la persona indicada para escucharnos, es nuestra Madre. Abrámosle el corazón. Tengámosle infinita confianza. Dese ahoguemos ante Ella todas nuestras tristezas, preocupaciones, angustiases

Quinta consideración

María se compromete con Juan Diego y con nosotros al decirle que curará y remediará todas nuestras penas, miserias y dolores. (32 b)
Ella nos quiere consolar pero no sólo eso. Nos apoyará, para remediar nuestros males. Ella es capaz, por voluntad de Dios, de hacerlo. Ante su Hijo, Ella es -como ha dicho alguien- la omnipotencia suplicantes Jesús nos la dejó por Madre y así, es don y dulzura de Dios para nosotros. Siempre, de manera especial, cuando nuestras penas nos agobien, nuestras miserias nos abrumen y nuestros dolores nos tengan oprimidos recurramos con toda confianza a Ella pues se ha
comprometido como Madre a escucharnos, curarnos y remediar todes nuestros males; así lo hace y lo seguirá haciendo; dio su palabra en el Tepeyac. Encomendémosle de manera especial en este momento a los que estén ahora con más sufrimiento en México, América latina y en todo el mundos

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: ¿Cómo nos sentimos ante el ofrecimiento de nuestra Madre de atendernos y consolarnos? ¿ Tenemos la experiencia de que en verdad Ella nos escucha, ayuda y remedia nuestros males? ¿Alguien quiere compartir su experiencia sobre esto? (Comentarios..,)

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado, en el Nican Mopohua.

Lectura base: San Juan 2,1-11
Salmo: 27 (26)
Frase del Evangelio: «Jerusalén... cuántas veces quise juntar a tus hijos como la gallina junta sus pollitos bajo sus alas..!
Guía: Una vez escuchadas estas lecturas compartamos qué, encontramos de parecido con lo meditado hoy. Y veamos cómo vivir el Evangelio nosotros mismos como lo vivió y vive María...

VII. Oraciones complementarias del rosario
Guía: Que inventen ,a manera de letanía, algunas frases bonitas que expresen cómo María se muestra Madre nuestra. Si no se animan te sugiero las mismas letanías.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida
Guía: Te sugiero el canto: Señora del Tepeyac, de Chano Montes. Pónganse de acuerdo para ver quién lleva para mañana la estrella que se llamará: Señora Nuestra.

I Ambientación - Recepción - Animación

II Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Una vez que la Virgen se ha presentado como Madre universal, cariñosa, y capaz de remediar nuestras penas, vamos a ver cómo se presenta como Señora, capaz de dar a alguien encargos y misión de primera importancia porque así lo ha querido Dios. Ella envía a Juan Diego a la misión que le va a encomendar. Por esta razón la estrella de este día es: Señora Nuestra
III. Lectura del Nican Mopohua (33 - 37)

Guía: La Santísima Virgen le dice a Juan Diego que para lograr lo que pretende es necesario que vaya con el Sr. Obispo y le diga que Ella lo envía para que le haga su casita sagrada. Escuchemos,
Lector:

33 «Y para realizar lo que pretende mi compasiva mirada misericordiosa, anda al palacio del obispo de México, y le dirás como yo te envío, para que le descubras como mucho deseo que aquí me provea de una casa, me erija en el llano mi templo (a); todo le contarás, cuanto has visto y admirado, y lo que has oído(b).
34. Y ten por seguro que mucho te agradeceré y lo pagaré,
35. Que por ello te enriqueceré, te glorificaré;
36. y mucho de allí merecerás con que yo retribuya tu cansancio, tu servicio con que vas a solicitar el asunto al que te envío.
37 Ya has oído, hijo mío el menor, mi aliento mi palabra; anda, haz lo que esté de tu parte».

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

María le dice a Juan Diego lo que pretende «su compasiva mirada misericordiosa» (33-a)
El deseo de que María tenga su templo, su casita sagrada, brota del amor de Dios y de la compasiva mirada misericorDiosa de Marías Ella quiere realizar eficazmente en el Tepeyac el signo de su presencia bondadosa Ella nos ve con compasión -como decimos en la recitación y canto del Bendita sea tu pureza como Dios miró la situación del pueblo de Israel cuando estaba oprimido por los egipcios. Esforcémonos por tener actitudes y sentimientos verdaderos de cariño, amor y compasión por nuestros hermanos, como nos enseña nuestra Madre.

Segunda consideración

María le pide a Juan Diego que vaya con el señor obispo.(33-b) La Virgen le indica a Juan Diego su misión; es necesario que vaya con el obispo, el encargado por Dios de la comunidad. Así se establece con seguridad el lazo entre Dios, su pueblo y los encargados de parte de Dios para guiar al pueblo. Aprendamos de María, Nuestra Gran Maestra, a saber comunicarnos con los pastores que el Padre ha puesto a favor de su pueblo. Pidamos, especialmente, por todos los obispos para que realicen bien su misión.

Tercera consideración

María instruye a Juan Diego sobre cómo ha de contarle todo al obispo. (33-c) María quiere eficiencia en el asunto y prepara a Juan Diego para que sea testigo presencial de un acontecimiento de salvación que va a requerir toda la capacidad personal del testigo para que, bien dispuesto, pueda dar el testimonio adecuado. Ella le dice: «le contarás lo que has admirado y lo que has oído...» El mensajero de Dios y de María debe ser testigo experiencial de los hechos y signos para poderlos trasmitir. A Dios y a María sólo se les puede captar a fondo desde una oración profunda y reposada, desde un encuentro personal y fuerte con ellos. ¿Qué tal son nuestros encuentros con Dios y con María? ¿Oramos a fondo? ¿Nos dejan marcados los ratos específicos de encuentro con Ellos?

Cuarta consideración

María le promete a Juan Diego que le pagará su servicio.(34-36) María se siente muy agradecida con Juan Diego por anticipado y le promete que todo el servicio que haga le hará merecer mucho, por lo cual Ella lo glorificará. El corazón de María es agradecido como el corazón de Dios. Ella es, por esto, la gran manifestadora de Dios, su máxima mensajera. Por eso, nos la mandó. ¿Qué tan agradecidos somos con los que nos hacen favores y servicios? Pidamos por todos los que nos hacen servicios actualmente; tanto a nivel doméstico como servidores públicos: barrenderos, carteros, choferes, repartidores y tantísimos más,

Quinta consideración

María le pide a Juan Diego que ponga en el asunto todo lo que esté de su parte. (37) Para terminar esta primera entrevista y para enviar a Juan Diego María le dice: «haz todo lo que esté de tu parte». Cada uno de nosotros es responsable de sí mismo y de lo que Dios, María y los demás le solicitarán y necesitarán. El verdadero cristiano se esfuerza, en cada cosa, en poner todo lo que está de su parte para que las cosas salgan bien. Demos gloria a nuestro Dios que nos tiene confianza para llenar de vida a otros. Pidámosle a María que nos enseñe a hacer bien todo lo que hacemos.

 V- Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: ¿Hemos sentido en nuestra vida algún encargo que nos hayan hecho Dios o María? ¿ Podríamos compartir alguna experiencia nuestra ? ¿ Hemos sentido que se nos manifiesta como Señora Nuestra, que con autoridad nos pida algo? ¿ Cómo hemos respondido a sus peticiones? (Compartamos...)

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado, en el Nican Mopohua

Lectura base: 1 Re. 5, 1-6 y 6,1-4 y 14-22
Salmo: 87 (86)
Frase del Evangelio: « Vayan a presentarse a los sacerdotes...»  LC. 17,14

VII. Oraciones complementarias del rosario
Guía: Te sugiero las letanías comunes conocidas de todos. Añadan algo que tenga que ver con la Virgen como quien tiene autoridad para mandarnos, como quien es maestra de la comunicación y la más agradecida de las criaturas con Dios.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida
Guía: Vean quién se encargará de la estrella de mañana que llevará por nombre: Mensajera.

Ambientación - Recepción - Animación

Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Para ayudar a que se ubiquen respecto a qué momento de la historia vamos considerando, diles que hagan un resumen del día anterior. Si  hay que completar algo puede servir lo siguiente: Juan Diego deja a la Santísima Virgen y va en busca del Señor obispo; lo espera y le presenta
el recado de la Señora del cielo. Vamos a oír la narración.

III. Lectura del Nican Mopohua (38 - 43)

Lector:
Juan Diego, recibido el mensaje, se despide:
38. «E inmediatamente en su presencia se postró; le dijo: «Señora mía, Niña, ya voy a realizar tu venerable aliento, tu venerable palabra; por ahora de Ti me aparto yo, tu pobre indito».
39. Luego vino a bajar para poner en obra su encomienda: vino a encontrar la calzada, viene derecho a México.
40. Cuando vino a llegar al interior de la ciudad, luego fue derecho al palacio del obispo, que muy recientemente había llegado, gobernante sacerdote; su nombre era don fray Juan de Zumárraga, sacerdote de San Francisco.
41. Y en cuanto llegó, luego hace el intento de verlo, les ruega a sus servidores, a sus ayudantes, que vayan a decírselo;
42. Después de pasado largo rato vinieron a llamarlo, cuando mandó el señor obispo que entrara.
43. Y en cuanto entró, luego ante él se arrodilló, se postró; (a) luego ya le descubre, le cuenta el precioso aliento, la preciosa palabra de la Reina del cielo, su mensaje, y también le dice todo lo que admiró, lo que vio, lo que oyó (b),
IV. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego acepta la misión de María y se retira de Ella. (38)
Juan Diego recibe con mucha reverencia la voluntad de Dios y de la Virgen y se despide de Ella para ir a realizarla con prontitud. Quiere poner todo lo que está de su parte para que todo salga bien. ¿Cómo procedemos cuando entendemos que Dios quiere algo de nosotros? ¿Nos parecemos a Juan Diego en la prontitud y buen ánimo?

Segunda consideración

Juan Diego se va a México a buscar al obispo. (39-40)
Juan Diego toma de inmediato la calzada del norte para ir hacia el sur, hacia el centro de Tenochtitlán. Llega a la casa del Sr. Obispo. Pensemos y sintamos toda la alegría y fortaleza que él habrá sentido durante el trayecto. cómo se habría alegrado del mensaje que llevaba! ¡Con qué fortaleza realizaría el encargo de María! Dichoso él que tuvo esta encomienda, ¿Qué tanto nos gozamos nosotros con el Evangelio? ¿Cómo sentimos y vivimos esta buena noticia -este Evangelio- que Dios ha hecho en México a través de María?

Tercera consideración

Juan Diego tiene que esperar a que el Señor obispo lo reciba. (41-42)
Sintamos el deseo que tenía Juan Diego de ser atendido. Y más cuando sabía el tipo de mensaje que llevaba. ¿Cómo nos imaginamos que fue su espera? ¿Cómo esperamos que otros nos atiendan o nos resuelvan algún asunto? ¿Qué actitud mostramos y vivimos en circunstancias en las que tenemos que esperar?

Cuarta consideración

Juan Diego le da el mensaje de la Virgen al obispo Don Fray Juan de Zumárraga. (43-a)
Juan Diego narra con emoción y alegría al obispo Zumárraga el mensaje de la Santísima Virgen. Imaginémonos el gozo, las pausas que haría para que le tradujeran al obispo lo que él iba diciéndole. ¿Cómo estaría su corazón al narrar y revivir todo esto? ¡Dejémonos penetrar de esta santa emoción de Juan Diego por tan alegre y maravillosa noticia y misión!

Quinta consideración

Juan Diego le cuenta con detalle al señor obispo lo que vio y oyó (43-b)
La Señora del cielo le había encomendado a Juan Diego que fuera testigo integral del acontecimiento que había vivido; le había dicho: «le contarás cuanto has visto, admirado y oído». Y así lo hizo, puso todo lo que estuvo de su parte para ser buen testigo de María.
Nosotros, ¿sabemos dar testimonio completo de nuestra fe? ¿Ponemos todo nuestro corazón, todo nuestro ser, para ser testigos de Dios y de María? (Comentarios... )

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: ¿Qué nos parecieron las actitudes de disponibilidad y rapidez que tuvo Juan Diego para hacer el encargo de María? ¿Qué cualidades se necesitan para ser testigo de Dios y de María?

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base: Mt 10, 1-16
Cántico: Is. 26, 1-6
Frase síntesis del Evangelio: «Lo que tengan que hablar se lo comunicarán en ese momento... El Espíritu de su Padre es el que hablará en ustedes». Mt. 10, 19-20.

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Después de la Salve yantes de las letanías pregúntales porqué la estrella de hoy se llama: Mensajera. (María es la gran mensajera de Dios y Juan Diego lleva el mensaje de Dios y de María al Sr. obispo). Que integren con las letanías algunas frases sobre María, mensajera de Dios. Pueden usar las letanías que quieran.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos Despedida

Guía: Te sugiero el canto: «Proclamar tu Palabra» que se canta en las celebraciones eucarísticas como salmo. Ver quién llevará la estrella de mañana que se llamará: Paciente.

Ambientación - Recepción - Animación

Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Juan Diego fue con el señor Obispo como vimos ayer— la sesión anteriorHoy vamos a ver el resultado de su misión. La respuesta que le da el obispo no es la esperada. Después regresa y se encuentra con la Virgen quien lo está esperando.

III. Lectura del Nican Mopohua (44-48)

Lector:
44. Y habiendo escuchado -el obispo- toda su narración, su mensaje, como que no mucho lo tuvo por cierto,
45. Le respondió, le dijo: «Hijo mío, otra vez vendrás, aún con calma te oiré, bien aun desde el principio miraré, consideraré la razón por la que has venido, tu voluntad, tu deseo».
46. Salió, venía triste porque no se realizó de inmediato su encargo.
47. Luego se volvió, al terminar el día, luego de allá se vino derecho a la cumbre
del cerrillo,
48. Y tuvo la dicha de encontrar a la Reina del cielo; allá cabalmente donde la primera vez se le apareció; lo estaba esperando.

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

El obispo no cree lo que le dice Juan Diego. (44-45)
Una vez que escuchó toda la narración el obispo no quedó convencido y le dijo a Juan Diego que consideraría todo eso, que ojalá volviera para oírlo otra vez. ¿Cómo se habría sentido Juan Diego? ¿Qué habría pensado? El..que traía la mejor noticia no es escuchado; pero tampoco María...Consideremos estos dolores,esta paciencia... Cuando alguien quiere contarnos algo, ¿qué caso le hacemos, lo tomamos en serio; procuramos entenderlo?

Segunda consideración

El señor obispo le dice a Juan Diego que considerará lo que le ha dicho. (45)
No era fácil para el obispo creerle a un indígena pues tenían culturas y valores muy distintos. Además, en esa época de la Inquisición estaba prohibido hablar de apariciones o cosas fabulosas respecto a la fe. Pero Juan Diego no está 56 en ese contexto, no conoce cómo se va desarrollando la historia del cristianismo y de los grandes problemas nacidos en el seno de la Iglesia por soñadores o supuestos iluminados que trajeron graves errores al pueblo de Dios. Si es difícil
entendernos a veces en las cosas cotidianas, en los terrenos de la fe las dificultaron mayores y más cuando se trata de manifestaciones aparentemente más trascendentes o que supuestamente vienen de Dios. En esos casos las autoridades eclesiásticas deben estar al pendiente de que los feligreses no se dejen llevar únicamente por las propias experiencias o las ideologías en boga. Pidamos por siempre haya diálogo entre el pueblo y la jerarquía y estemos abiertos para
escucharnos

Tercera consideración

Juan Diego salió triste después de la entrevista con el Obispo. (46)
Imaginemos la tristeza que sintió nuestro mensajero, el fracaso de sentir no pudo lograr que se llevara a cabo el encargo de la Virgen. Sintamos con él a tristeza de todos aquellos que no son oídos, que son marginados por prejuicios, ideologías o cualquier otra razón. Pidamos por los que oprimen, los que no respeten la dignidad de las personas, los que no escuchan a sus prójimos con el corazón.

Cuarta consideración

Juan Diego se regresa a su casa (47)
Al terminar la entrevista con el obispo, Juan Diego probablemente pudo aprovechar el tiempo en la ciudad de México para hacer algunos mandados, comer o atender algún otro asunto. Al principio de la tarde regresa con rumbo hacia su casa. ¿Cómo habrá ido lleno de tristeza y contrariedad..? ¿Qué iría a decir la virgen al recibir la mala noticia de que el obispo no le había creído ni a él ni a -Ella-..? Acompañemos a Juan Diego en su regreso hacia su casa... Y pidamos,
mientras rezamos, por los que hoy se sienten fracasados en la vida.

Quinta consideración

Juan Diego se encuentra con la Virgen por segunda vez. (48)
La Santísima Virgen le sale al paso a Juan Diego. Lo estuvo esperando sabía que iba a regresar muy dolido y afligido. Ella lo espera en el Tepeyac para levantarlo y consolarlo, Pidámosle a Nuestra Madre que nos enseñe a esperar a consolar, como Ella, para poder levantar a otros con nuestro apoyo solidario,

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Anímalos a que expresen su sentir sobre lo leído y orado. Procura hacerles ver cómo Dios nos ha tenido gran paciencia a los humanos; cómo María aguardó con paciencia a Jesús y fue paciente toda su vida, y cómo Juan Diego tuvo que vivir también con paciencia las calamidades que se le fueron presentando mientras lograba que se hiciera la voluntad de
Dios tanto los primeros días de este gran acontecimiento como los demás de su vida.

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base: Hechos 9, 10-16
Salmo: 70 (69)
Frase del Evangelio: «... Ustedes están tristes ahora, pero volveré a verlos y se alegrará su corazón y su alegría nadie se la podrá quitar». (Jn 16, 22)

VII Oraciones complementarias del rosario

Guía: Te sugiero las Letanías no. 2; están a continuación. Pueden añadir a ellas algunas frases sobre la virtud de la paciencia que vivió la Virgen.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Ve quién se encarga de la estrella de mañana, se llamará: Humilde.

Letanías Guadalupanas (2)

Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Madre de los que transitan tristes por el camino de la vida Ruega por nosotros
Madre de los que ya no se estiman a sí mismos ni confían en sí
Madre de los que se sienten fuera de lugar en todas partes
Madre de los desestimados, relegados y humillados por los poderosos
Madre que nos levantas de la fatiga de buscar y esperar
Madre de los considerados ilusos por causa del Evangelio
Madre de los que sufren desprecios por servir al Señor
Madre de los que ponen todas sus ganas en favor de la causa de tu Hijo
Madre que pides a tus hijos que hagan sus servicios conperfección
Madre que pides con autoridad que hagamos lo que tu Hijo nos manda
Madre de los que hacen la voluntad del Padre
Madre que apoyas a los que se convierten para que tengan vida nueva
Enséñanos a amar
Tú, que personalmente velas por el bien de todos
Tú, que nos escuchas y atiendes en nuestras necesidades.
Tú, que animas a todos a vivir la perfección del Evangelio
Tú, que das al indígena la confianza en su propio valor
Tú, que valoras y haces valorar la cultura indígena
Tú, que no te dejas doblegar por ninguna manipulación
Tú, que ayudas a que el hombre se levante de su postración
Tú, que nos ayudas a reconciliarnos unos con otros
Reina de las relaciones fraternas y amistosas de los hombres
Reina de nuestros descansos y alegrías.
Reina de todos los gozos sanos de tus hijos.
Reina de todas las palabras y mensajes bellos de la tierra.
Rina de todas las piedras vivas de la iglesia.
Reina de todos los que viven con amabilidad hacia todos.
Reina de los Angeles...Reina de los Profetas...(Siguen como Siempre).
Cardero de Dios...

I Ambientación - Recepción - Animación

II Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Ayúdalos a que hagan una síntesis del día —de la sesión- anterior. Completa tú y remarca cómo Juan Diego le dice a la Virgen cómo le fue mal con el obispo y le pide que mande a otra persona más importante a este asunto porque él es poca cosa y no le hacen caso. Vamos a escuchar el relato de hoy.

III. Lectura del Nican Mopohua (49-56)

Lector:

49. «Y en cuanto la vio, ante Ella se postró, se arrojó por tierra, le dijo:
    50. «Patroncita, señora, Reina, Hija mía la más pequeña, mi Muchachita, ya fui a donde me mandaste a cumplir tu amable aliento, tu amable palabra; aunque difícilmente entré a donde es el lugar del gobernante sacerdote, lo vi, ante él expuse tu aliento, tu palabra, como me lo mandaste.
    51. Me recibió amablemente y lo escuchó perfectamente, pero por lo que me respondió, como que no lo entendió, no lo tiene por cierto.
    52. Me dijo: «otra vez vendrás; aún con calma te escucharé, desde el principio veré por lo que has venido, tu deseo, tu voluntad».
    53. Bien en ello miré, según me respondió, que piensa que tu casa que quieres que te hagan aquí, tal vez yo nada más lo invento, o que tal vez no es de tus labios;
    54. Mucho te suplico, Señora mía, Reina, Muchachita mía, que a alguno de los nobles, estimados que sen conocidos, respetado, honrado, le encargues que conduzca, que lleve tu amable aliento, tu amable palabra para que lo crean.
    55. Porque en verdad yo soy un hombre del campo, soy mecapal, soy parihuela, soy cola, soy ala; yo mismo necesito ser conducido, llevado a cuestas, no es lugar de mi andar ni de mi detenerme allá a donde me envías, Virgencita mía, Hija mía menor, Señora, Niña;
    56. Por favor dispénsame: afligiré, con pena tu rostro, tu corazón; iré a caer en tu enojo, en tu disgusto, Señora, Dueña mía».
50. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego se postra ante la Virgen. (49)
¡Cómo se habrá sentido Juan Diego de mal, de turbado y triste ante María al traerle la triste noticia de que el Sr. Obispo no le había hecho caso! Si bien la presencia y el testimonio de María de haberlo esperado lo hacen sentir en paz, sin embargo, el hecho de que María sea rechazada también, le duele en el corazón. Acompañemos en este momento a todos aquellos que hoy están abatidos y humillados por las circunstancias difíciles que estén pasando por ser rechazados. Pi-
damos por ellos para que sean fortalecidos como Juan Diego.

Segunda consideración

Juan Diego le cuenta a la Virgen cómo le fue con el obispo. (50)
Juan Diego le comienza a contar muy en concreto cómo estuvo la entrevista y la atención que le puso el Sr. Obispo. Ella le había encomendado la misión y él da cuentas del encargo muy bien. Revisemos cómo hacemos los encargos, si ponemos todo lo que está de nuestra parte para que salgan bien y si damos cuenta de ello a quienes nos los solicitan.

Tercera consideración

Juan Diego le dice a la Virgen que el obispo no le creyó. (51-53)
Si algo nos ofende es que alguien no crea en nosotros. Dios mismo siente muchísimo este agravio como lo vemos en la Biblia y como le dijo el corazón de Jesús a Santa Margarita María de Alacoque. Por el contrario, qué gran honor le damos a Dios, a María, cuando les creemos. Pensemos y sintamos cómo habrá estado atenta la Virgen para escuchar el dolor de Juan Diego. Pidamos por el fortalecimiento de nuestra fe aunque otros no nos crean, y para que el Espíritu Santo avive nuestro amor para atender mejor a las personas.

Cuarta consideración

Juan Diego le pide a la Virgen que mande a otro en su lugar para que le crean. (54)
Pensemos y sintamos cómo se habrá sentido Juan Diego para decirle esto a la Virgen; ¡cómo se habrá sentido María ante lo que le dice Juan Diego! ¡imaginemos la reacción de Ella al verlo tan ofendido! Pensemos cómo nos sentimos cuando nos sabemos y sentimos incapaces de algo y más cuando otros nos disminuyen... Hemos de aprender a llevar los fracasos con dignidad, paciencia y
esperanza, y con una actitud de perdón para quienes nos ponen tropiezos en la vida. Dios y María nos levantarán. Pidamos por los que nos han hecho algún mal.

Quinta consideración

Juan Diego le dice a la Virgen que él es poquísima cosa... (55-56)
Juan Diego expresa lo que siente de sí mismo con muchísimo realismo, con ternura, al estilo indígena. Según el simbolismo gramatical del pueblo nahua usa 5 frases disminutorias para decir que no sirve ni vale nada: se siente culpable del fracaso y le pide perdón a la Virgen por echarse para atrás ante Ella, su Dueña y Señora. ¡Qué profundamente expresa Juan Diego nuestra pequeñez! ¡imaginémonos cómo nos sentiríamos ante un fracaso sonado ante alguien que tanto nos quiere y tanto nos ama como es el caso de Nuestra Reina y Madre! Sepamos hablar desde nuestro corazón como Juan Diego; de seguro Ella nos escuchará, tendrá compasión y nos levantará como lo hizo con él,

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy.

Guía: ayúdalos con preguntas a que valoren la actitud de Juan Diego ante la Virgen, amable y buena. Pero que caigan en la cuenta de que a Dios no le gusta que nos hagamos menos, ni uno a sí mismo, ni uno a los demás o los demás a uno. Una cosa es la humildad y otra aceptar ser
ninguneados...

VII Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base: Ex. 4, 1 y 10-17
Como salmo, el cántico de Ana: 1 Sam. 2, 1-10
Frase del Evangelio: «Apártate de mí, Señor, que soy pecador». Lc. 5, 8

VIII Oraciones complementarias del rosario

Guía: Ayúdalos a que descubran que María es la Reina de la humildad. Que también Ella , aunque es la Madre de Jesús, vive humildemente y que como Juan Diego también fue humillada muchas veces en su vida. Además, Dios es el más humilde de todos, según lo aprendemos de Jesús
en el Evangelio. Por eso la estrella de este día se llama humilde: porque así son Dios, María, Juan Diego.. Te sugiero la Letanía Guadalupana No. 2, pág. 59

Oración final Canto Acuerdos Despedida
(El canto puede ser: Ave María de Juan Diego, de Chano Montes pág. 26 del libro: Semana Guadalupana).
Guía: La estrella de mañana será: Promotora.

III. Lectura del Nican Mopohua. (57-62)

Lector:
57. Le respondió la Perfecta Virgen, digna de honra y veneración:
58. «Escucha, el más pequeño de mis hijos: ten por cierto que no son escasos mis servidores, mis mensajeros, a quienes encargue que lleven mi aliento, mi palabra, para que efectúen mi voluntad;
59. pero es muy necesario que tú, personalmente, vayas, ruegues, que por tu intercesión se realice, se lleve a efecto mi querer, mi voluntad.
60. Y mucho te ruego, hijo mío el menor, y con rigor te mando, que otra vez vayas
mañana a ver al obispo.
61. Y de mi parte hazle saber, hazle oír mi querer, mi voluntad, para que realice,
haga mi templo que le pido.
62. Y bien, de nuevo dile de que modo yo, personalmente, la siempre Virgen
Santa María, yo, que soy la Madre de Dios, te mando».

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

María le dice a Juan Diego que Ella tiene muchos mensajeros... (57-58)
La Santísima Virgen, después de que Juan Diego le ha contado cómo le fue con el Sr. Obispo, de lo mal que se sintió ante el fracaso de su misión, y de la petición que le hace de que mande a otro más preparado que él, le dice que, efectivamente, tiene otros servidores que podrían llevar su mensaje. iClaro que Ella tiene muchos servidores... Es la Reina del cielo y de la tierra..! Ella acepta
que tiene poder y que hay gente que está a sus órdenes... Pero Dios y Ella quieren que él vaya. Al confirmar la misión Ella usa su poder sólo para servir, al estilo de Dios. ¿Cómo usamos el poder que tenemos ante otros; procedemos como Ella, como Jesús?

 Segunda consideración

María le confirma la misión a Juan Diego. (59)
Escuchemos las palabras de María: «Es muy necesario que tú personalmente vayas, que por tu intercesión se realice mi voluntad...» Imaginémonos cómo se habrá sentido Juan Diego. El, que había dicho que no valía, que era nada, y ahora la Señora del cielo le reafirma su confianza. ¿Qué tal se habrá sentido? Esto mismo nos dice hoy a cada uno la Virgen: yo confío en ti... ¿Cómo nos sentimos? Oigamos a' María, nuestra Madre y Reina, que nos dice a cada uno personalmente: confío en ti...

Tercera consideración

María vuelve a mandar a Juan Diego con el obispo Zumárraga. (60)
¡Ella le dice que vaya de inmediato qué importante es el deseo de Ella y el plan de Dios para que se realice, para que nada se interponga ni lo dilate! El Reino de Dios debía venir más evidentemente y eso no permitía retraso. ¿Qué tan en serio tomamos el plan de Dios, el mensaje de María? Le podemos decir a Él o a Ella: ¿Qué quieres que haga?

Cuarta consideración

María le pide a Juan Diego que le haga entender y oír su voluntad al Señor obispo. (61)
qué responsabilidad para Juan Diego! ¡qué confianza de María y de Dios en él! Él debe hacer lo imposible para que el templo, la casita de María, sea construida; ¿Cómo se habrá sentido Juan Diego ante esta misión? ¿Cómo nos prepararíamos para realizarla si nosotros fuéramos los enviados? ¿A quién nos mandará hoy el Dios de la vida a darle el Evangelio de Jesús?

Quinta consideración

María le dice a Juan Diego que le diga al obispo que Ella personalmente es quien lo envía. (62)
La Madre de Dios, la siempre Virgen Santa María, la Reina y Señora del mundo, nada menos, es la que envía al macehual con el obispo para que el plan de Dios se realice... La carta de presentación de Juan Diego es fuerte: va de parte de María. El se siente y se sabe enviado por Ella. !Qué confianza habrá sentido Juan Diego para realizar la encomienda de la Virgen!
¿Alguna vez nos hemos sentido en verdad seguros de que Dios o María estén de nuestra parte? ¿Qué ha significado esto para nosotros? Pidamos por todos los que no conocen a Dios, por los que no le tienen la confianza que El merece o porque no saben que Dios sí confía en ellos,

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Anímalos a que compartan alguna experiencia en que hayan sentido que Dios los envió a otra persona en alguna ocasión.

VI Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base: Hechos. 26, 12-18
Salmo: 22 (21), 24-31
Frase del Evangelio: «...pero yo he rogado por ti para que tu fe no se venga abajo; y tú, entonces, cuando hayas vuelto, tendrás que fortalecer a tus hermanos» LC 22,32

VII Oraciones complementarias del rosario

Guía: Ayúdalos a que comprendan más cómo María es promotora de todos;  cómo Ella levantó de su humillación a Juan Diego y cómo gracias a este apoyo de María él pudo cumplir su misión. Anímalos a que digan en las letanías alguna frase corta sobre María como promotora de nuestra realización humana y divina...

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Podrían cantar hoy algún magnificat o recitarlo juntos, Pueden usar el magnificat de Juan Diego que sigue:
Magnificat de Juan Diego
Proclama todo mi ser
la grandeza del Dios de la vida.
Canto la alegría de nuestra salvación
porque El se fijó en nuestras razas
y en todo el sufrimiento de siglos
que hemos heredado y sobrellevado con dolor.
Todos dirán conmigo
que el que es Fuente de vida,
El que siempre está presente con nosotros,
ha hecho maravillas con todos nuestros pueblos.
Reconocemos, por eso,
que El es el Único Santo,
el Dios de la cercanía y la presencia consoladora
el Dios de toda alianza buena.
Siempre nos ha hecho bienes innumerables,
porque El es el amor,
el Dios de la unidad,
el Dios del cerca y junto,
el Sol y Flor de la gran verdad. El, mediante la preciosa siempre Virgen,
Santa María de Guadalupe,
nos ha levantado y todavía nos levanta
de nuestra profunda postración y lágrimas,
y por Ella se dignó manifestarnos a Su Querido Hijo.
Nos trajo con El, a estas tierras americanas,
una presencia más suave, fuerte y dinámica
de Su Santo Espíritu, Glorificador Amable.
Por eso, los poderosos tiemblan
y también los que se han enriquecido
a costa y lomo de nuestra gran pobreza,
porque El es nuestro amparo y escudo,
porque nos ha dejado, a nosotros, sus pequeñitos,
a Nuestra Dulce Madre,
en su casita santa del Tepeyac.
Canten conmigo, toquen sus atabales y flautas,
sus teponaxtles; y dancen,
dancen al Dios Bueno que nos lleva de la mano
y nos seguirá llevando,
porque siempre cumple sus promesas.
El mismo nos llevará a vivir
lo que nos ha prometido;
y seremos amigos y hermanos siempre,
en esta tierra del frijol y del maíz...
Y después eternamente... Y ya desde ahora,
en un mundo de justicia, amor y vida nueva. Amén.

La estrella de mañana será llamada: Comprometida.

I Ambientación - Recepción - Animación Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

 Guía: Que hagan un resumen del día -de la sesión - anterior. Diles que hoy consideramos a María como la estrella que más glorifica a Dios sobre todo al dignificar a las personas y al ayudarlas a que vivan su misión con plenitud como Él quiere. Ayúdalos a que se dispongan a escuchar con gusto el relato de hoy; que pongan atención para que vean cómo Juan Diego le dice a la Virgen que irá con todo gusto a buscar al Sr. Obispo para darle su recado a pesar de que se da cuenta de que no será nada fácil convencerlo... Vamos a escuchar la lectura que hoy nos va a inspirar.

III. Lectura del Nican Mopohua (63-67)

Lector:

Después de escuchar a la Reina del Tepeyac:

63. «Juan Diego, por su parte, le respondió, le dijo: -»Señora mía, Reina, Mucha- chita mía, que no angustie yo con pena tu rostro, tu corazón; con todo gusto iré a poner por obra tu aliento, tu palabra; de ninguna manera lo dejaré de hacer, ni estimo por molesto el camino.
64. Iré a poner en obra tu voluntad, pero tal vez no seré oído, y si fuere oído quizás no seré creído. 65. Mañana en la tarde, cuando se meta el sol, vendré a devolver a tu palabra, a tu aliento, lo que me responda el gobernante sacerdote.
65. Ya me despido de Ti respetuosamente, Hija mía la más pequeña, Jovencita, Señora, Niña mía, descansa otro poquito.
66. Y luego se fue él a su casa a descansar».
67. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego le dice a la Virgen que irá con todo gusto a hacer su voluntad. (63). Contemplemos la escena: Juan Diego, levantado por María de su postración, de sentirse nada, pasa a la esperanza, a la vida nueva y a trabajar para que se haga la voluntad de Dios y de María. ¿Qué tan bien dispuestos estamos para hacer la voluntad de Dios por difícil que parezca? Pidamos a nuestra Madre que sepamos buscar y hallar la voluntad de Dios y la realicemos para Su mayor gloria y servicio.

Segunda consideración

Juan Diego le afirma a la Virgen que hará su voluntad, aunque haya dificultades. (64)

Sigamos contemplando la escena: Juan Diego se siente más firme ante María. Juan Diego ha creído; se siente fortalecido por María y por eso se levanta; se convierte; se siente un hombre nuevo que no se paraliza ante nada. Le dice que ni el camino ni las dificultades lo detendrán. ¿Cómo anda nuestra fortaleza? ¿Qué tan capaces seríamos de hacer obras difíciles por Jesús y por María?

Tercera consideración

Juan Diego le promete a la Virgen volver al día siguiente con la respuesta del Sr. Obispo. (65) Sigamos contemplando la misma escena, ya para terminar el diálogo entre María y Juan Diego. El es un hombre adulto que sabe prever el tiempo, que sabe a qué hora puede hacer las cosas y puede comprometerse con precisión y responsabilidad. Aprendamos de Juan Diego las virtudes de saber comprometerse y de hacer bien las cosas y a su debido tiempo.

Cuarta consideración

 Juan Diego se despide con mucho cariño y cortesía de la Virgen. (66) Es el final de esta escena. Imaginemos cómo estaría de contenta la Virgen ante el cambio de Juan Diego. Aprendamos de él su trato tierno, sencillo, cercano y cortés con María y con nuestros hermanos. Que no seamos de esos muy persignados y bien portados con Dios y con nuestra Madre y luego nada de eso con nuestro prójimo. Cualquier buen cristiano ha de ser respetuoso, cortés, amable..

Quinta consideración

Juan Diego, después de despedirse de la Reina del cielo, se va a descansar. (67)

qué día había pasado Juan Diego: ¡dos encuentros ese día con la Virgen! Fueron encuentros definitivos para su vida personal... Primero el sentirse en la gloria, luego humillado y herido, y por fin exaltado. Encuentros definitivos también para la historia de México y del mundo... Juan Diego nos puede ayudar en verdad porque ha vivido como nosotros; ha sufrido y gozado quizá hasta más

 iEl, tan humilde y sencillo, es ahora patrono de los indígenas y catequistas de América! Dios lo ha glorificado en verdad. Con razón lo celebramos el día 9 de diciembre día en que tuvo la dicha de ver por primera vez, y dos veces el mismo día, a la Reina celestial. Descansemos con paz, con alegría, como Juan Diego... Pidamos por los que hoy no tienen paz.

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: ¿Qué nos parecieron las actitudes que aprendimos hoy de Juan Diego y que vivieron Jesús y María con tanta plenitud: compromiso, amabilidad, decisión, superación de dificultades? ¿Cómo podríamos practicarlas personalmente, y cómo ayudarnos unos a otros para no caer en las tentaciones del desaliento?

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua.

Texto base: Jr. 1, 4-10

Salmo: 131 (130)

Frase del Evangelio: «Su brazo llevó a cabo hechos heroicos... Levantó a los humildes...» LC 1, 51-52

VII Oraciones complementarias del rosario

Guía: Ayúdalos a que en las letanías -las número 2- añadan el título de: Comprometida, Amable, Decidida, Glorificadora... a María. (pág. 59)

Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: La estrella de mañana se llamará: Fiel

Como canto sugiero: Señora del Tepeyac.

I Ambientación - Recepción - Animación

II Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Ayúdalos a sacar provecho del día anterior —de la sesión anterior-; pídeles que hagan una síntesis. Procura que estén atentos para comprender lo importante que es la fidelidad; Dios es el siempre fiel, y María espejo de esa fidelidad. Juan Diego vive esa fidelidad a las cosas de Dios y del
cristianismo. Por eso la estrella de hoy se llama fiel. Hoy vamos a ver cómo Juan Diego va el día 10, Domingo, a las cosas de Dios a Tlatelolco. Allí participa en la misa y es contado en la lista de asistentes. Después se va en busca del señor obispo y logra verlo aunque con dificultad. Allí le vuelve a exponer la voluntad de la Santísima Virgen. Escuchemos la lectura.

III. Lectura del Nican Mopohua (68-73)

Lector:
68. «Al día siguiente, Domingo, bien todavía en la nochecilla, todo aún estaba oscuro; de allá salió, de su casa, se vino derecho a Tlatelolco, vino a saber lo que pertenece a Dios y a ser contado en lista; luego para ver al señor obispo.
69. Y a eso de las diez fue cuando ya estuvo preparado: se había oído misa y se había nombrado lista y se había dispersado la multitud.
70. Y Juan Diego luego fue al palacio del señor obispo.
71. Y en cuanto llegó hizo toda la lucha por verlo, y con mucho trabajo otra vez lo vio;
72. a sus pies se hincó, lloró, se puso triste al hablarle, al descubrirle la palabra, el aliento de la Reina del cielo,
73. que ojalá fuera creída la embajada, la voluntad de la Perfecta Virgen, de hacerle, de erigirle su casita sagrada, en donde había dicho, en donde la quería».

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego va a misa a Tlatelolco el Domingo 10. (68)
Imaginemos el camino por el que fue el profeta de María y cómo se iba preparando para la celebración. ¡cómo habrá dado las gracias por las visitas de María del día anterior, por sus palabras de tanto consuelo! Aprendamos de él a participar en las cosas de Dios. ¿Cómo participamos en la Eucaristía de los domingos? ¿Qué tanto nos preparamos para este encuentro con el Dios de la vida?   ¿Comulgamos con frecuencia? Pidámosle a María, toda fiel, que nos enseñe a ser fieles a Dios, a Ella misma, a nuestra vocación y misión, a nosotros mismos...

Segunda consideración

Los indígenas son contados por los frailes franciscanos al terminar la Misa. (69)
Era costumbre de los franciscanos hacer el recuento de los asistentes a la misa para irlos educando en la formalidad con Dios y con los demás. Imaginemos a Juan Diego formado, diciendo su nombre, conversando con los demás indígenas y sacerdotes, de las cosas de Dios. ¿Qué tan capaces somos de hacernos pueblo, de tener parte en la vida y tradiciones de nuestro país y de la Iglesia?

Tercera consideración

Juan Diego se dirige por segunda vez a la casa del Sr. Obispo. (70)
Hagamos el recorrido con él: de Tlatelolco al corazón de Tenochtitlán. ¿Cómo se iría preparando para ese encuentro tan importante con el Sr. Obispo? De seguro iría muy confiado por las palabras y envío de la Virgen, también porque acababa de comulgar y llevaba la fuerza del Señor. Había recibido a Cristo, fuerza y poder pacífico, pero eficaz, del Padre Dios. ¿Cómo nos preparamos para las citas importantes? ¿Somos responsables y preparamos bien lo que hemos de
decir y hacer? ¿Ponemos toda nuestra confianza en Dios como si todo dependiera de su poder, amor y sabiduría?

Cuarta consideración

Juan Diego hace toda la lucha por ver al obispo Zumárraga. (71)
Juan Diego procura cumplir con lo prometido a la Virgen. Ella le había Scho: «pon todo lo que esté de tu parte». Ella nos invita a la eficacia, y Juan Diego ros enseña a cómo proceder ante los retos y acontecimientos que se nos presentan por difíciles que sean. Aprendamos de él a ser eficaces y a no desalentarnos ante las dificultades.

Quinta consideración

Juan Diego le presenta al Obispo el deseo de la Virgen con convicción, fuerza, lágrimas y humildad, (72-73)

Nuestro profeta siente que tiene una gran responsabilidad, pero también sabe débil. Necesita hacer oír con autoridad la voluntad de la Virgen respecto a templo. ! ¡Qué impresión tan fuerte debe haber tenido el obispo al ver a un hombre ya mayor llorar por impotencia, por amor y fidelidad! Aprendernos de Juan Diego a saber presentar nuestros deseos y sentimientos para que los otros nos entiendan y escuchen, sobre todo si se trata de las cosas de Dios, de María y del
:bien de nuestros prójimos.

1. 
   Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a que descubran la fidelidad de Juan Diego a Dios y a María; la de María con Dios y con nosotros y la de Dios con María y con nosotros.

VI Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base: 1 Re. 8, 54-61;
Salmo. 26 (25)
Frase del Evangelio: «Su señor le dijo: "bien, criado bueno y fiel; como fuiste fiel en lo poco, te pondré al frente de mucho: comparte la felicidad de tu señod'» Mt 25,21

VII Oraciones complementarias del rosario

Guía: Te sugiero la letanía Guadalupana #3, que está enseguida. Procura que añadan algo referente a la fidelidad de María hacia Dios y hacia nosotros.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Te sugiero que hagan una pequeña evaluación para ver cómo van, si siguen igual, si hay que modificar algo al terminar esta 2a. Semana o etapa, según el modelo de Pascua que hayan elegido. Valdría la pena que otros se fueran responsabilizando para promover más líderes, incluso que otro sea el guí...

 
Letanías guadalupanas (3)

Señor, ten piedad

 Cristo, ten piedad

 Señor, ten piedad

Madre de los que buscan a Dios intensamente Señor, ten piedad

Cristo, ten piedad Señor, ten piedad Ruega por nosotros

Madre de los que alaban a Dios en las celebraciones del culto,

Madre de los fieles, que ponen por obra la voluntad de Dios.

Madre de los que se preparan para desempeñar su misión apostólica.

Madre de los que luchan por cumplir sus ideales.

Madre de los que lloran porque no son creídos.

 Madre de los que saben convencer a otros por sus actitudes evangélicas

Madre de los que buscan con sinceridad la verdad.

Madre de los que saben comunicar a otros sus experiencias de Dios.

 Madre que consuelas a los que son vigilados y perseguidos.

Madre que haces que creamos los unos en los otros.

 Madre que siempre nos aguardas y atiendes.

Madre que nos enseñas a usar el poder a favor de los demás

Tú, la Perfecta Virgen, Santa María Enséñanos a amar

Tú, la Amable y Maravillosa Madre de Nuestro Salvador Jesucristo

Tú, que das seguridad y apoyo a tus hijos pequeños y confiados en ti.

Tú, que eres generosa en regalos espirituales.

Tú, que velas especialmente por los que se consagran a Ti.

Tú, que nos consuelas y fortaleces en nuestros trabajos apostólicos.

Tú, que nos das continuamente signos de tu amor.

Tú que usas el poder que Dios te ha dado para favorecernos

Reina de los templos, capillas y casas de oración.

Reina de los altares abiertos de los antiguos conventos hechos especialmente para tantos indígenas.

Reina de los acontecimientos que nos acercan más a Ti, a Dios y a nuestros hermanos. Enséñanos a servir

Reina de todas las señales, admirables y sencillas, que Dios nos da para que lo sintamos presente. Reina de todas las acciones litúrgicas de la Iglesia.

Reina de todos los que dan culto a Dios en espíritu y en verdad.

Reina de los Ángeles..,

Reina de los Profetas...(Sigue como de costumbre)

Cordero de Dios.

Ambientación - Recepción - Animación

Ubicación Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Procura ayudar a los participantes para que descubran que María es la perfecta obra humana de Dios porque es la Madre de Cristo, Dios la protegió de todo pecado y la conservó perfecta en todo en atención a que iba a ser la Madre del Salvador.

Guía: Hermanos: el único lugar del Nican Mopohua en donde aparece el nombre de Nuestro Señor Jesucristo es dentro de los números que hoy consideraremos. De aquí e/ nombre de la estrella de este día —de esta sesión-. Demos gracias a la Santísima Trinidad que ha dispuesto todo tan perfecta y maravillosamente. Escuchemos cómo fray Juan de Zumárraga investigó a Juan Diego después de que éste le volvió a repetir el encargo de la Virgen para ver si era verdad cuanto decía
de la aparición y mensaje de María..

III. Lectura del Nican Mopohua (74-75)

Lector:

74. 
    «Y el gobernante obispo muchísimas cosas le preguntó, le investigó, para poder cerciorarse, dónde la había visto, cómo era Ella; todo absolutamente se lo contó al señor obispo.
    75. Y aunque todo absolutamente se lo declaró, y en cada cosa vio, admiró que aparecía con toda claridad que Ella era la Perfecta Virgen, (a) la Amable, (b)Maravillosa (c) Madre de Nuestro Salvador Nuestro Señor Jesucristo... (d)»
    
    
75. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración
El Sr. Obispo le pregunta pormenorizadamente a Juan Diego Cómo era la Virgen. (74)
Don fray Juan quiere cerciorarse de la verdad del relato de Juan Diego. Las preguntas que hace son fuertes. Quiere quedar tranquilo. Contemplemos este diálogo... Aprendamos a investigar nuestra fe para que más consciente y libremente vivamos la buena noticia del amor de Dios. Aprendamos a preguntar a otros cómo han captado y conocido a Dios, a María.

Segunda consideración

En todo lo que le dijo Juan Diego al obispo apareció claramente que Ella era la Perfecta Virgen. (75-a).
María le dijo a Juan Diego que Ella era la Perfecta Virgen; es la que está totalmente entregada a Dios y a nosotros; no está dividida ni contaminada. Alabe. más Perfecta
Iglesia la virginidad de las jóvenes.

Tercera consideración

María es digna de ser amada. (75-b)
María es tan amable... qué nombre tan propio para Ella: ¡es la digna de ser amada! ¡Y claro, jes la Madre del Señor y Madre Nuestra! Además, es cariñosa y dulce en su trato con nosotros. Gocemos la amabilidad de nuestra Madre.

Cuarta consideración

María es la mujer maravillosa. (75-c)
En verdad es Maravillosa porque Dios hizo en ella maravillas: es la Inmaculada, la Llena de gracia, la Toda Bella Santa María. Es la obra humana perfecta de Dios. La que dijo a Dios con toda su plenitud el sí, hágase en mí tu palabra. Agradezcamos a Dios que haya hecho así a María. Aprendamos de Ella a decir sí a Dios.

Quinta consideración

María es la Madre de Nuestro Señor Jesucristo. (75-d)
Este es el título y nombre máximo de María. Es, para siempre y por los siglos, la Bienaventurada Madre de Dios. Dios la ha acercado tanto a Sí que no hay persona humana que tenga una dignidad mayor que Ella. Agradezcámosle a El que nos la haya dado como Madre. Agradezcámosle a Ella que nos haya traído a Jesús a este continente americano y sea nuestra máxima evangelizadora.

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a que algunos den testimonio de las virtudes de María, lo que conocen de Ella en la experiencia de su vida.

1. 
   Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua.

Lectura base: Mt 11,18-25 y LC 2 1-7
Salmo: Col 1,1-20
Frase del Evangelio: «Bendita Tú entre las mujeres y Bendito es el Fruto de tu vientre...» (Lc. 1, 42).

 VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Las letanías ordinarias o la que elijan.

VIII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida

Guía: Te sugiero como canto: Bendita sea tu pureza, aunque es probable que pocos sepan este poema y canto tan antiguo y tan bello. Puede ser la oración final de este día. La pongo a continuación por si algunos no la conocen.

Bendita sea tu pureza

Bendita sea tu pureza
y eternamente lo sea;
pues todo un Dios de recrea
en tan graciosa belleza.
A ti, celestial princesa,
Virgen sagrada María,
te ofrezco desde este día
alma, vida y corazón;
¡mírame con compasión,
no me dejes, Madre mía!
La estrella de mañana será: Poderosa.

I Ambientación — Recepción — Animación

II Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

El día de ayer -la sesión anterior- vimos cómo el obispo Zumárraga le hizo varias preguntas a Juan Diego acerca de lo que éste le dijo de la Virgen, para ver si era verdad que había hablado con Ella.
Hoy vamos a ver cómo Juan Diego, fortalecido por la misión que le confirma María, una vez que el obispo pide una señal, le dice con mucha seguridad que qué tipo de señal quiere para pedírsela a la Reina del cielo. Él sabe que María es poderosa, y es cierto, Dios le ha dado poder para servir mejor. Por esto, la estrella de hoy es: poderosa. Aprendamos hoy, de Ella, a ponernos al servicio de Dios y de los demás con todas nuestras capacidades y limitaciones. Escuchemos atentamente la lectura de este día.

III. Lectura del Nican Mopohua (76-81)

Lector:
76. «Sin embargo, no luego se realizó (la voluntad de la Virgen).
77. Dijo -el obispo- que no sólo por su palabra, su petición se haría, se realizaría lo que él pedía
78. Que era muy necesario (que hubiera) alguna otra señal para poder ser creído cómo a él lo enviaba la Reina del cielo en persona.
79. Tan pronto como lo oyó Juan Diego, le dijo el obispo:
80. «Señor gobernante, considera cuál será la señal que pides, porque luego iré a pedírsela a la Reina del cielo que me envió».
81. Y habiendo visto el obispo que ratificaba, que en nada vacilaba ni dudaba, uego lo despacha».

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

El señor obispo no tiene por cierta la palabra de Juan Diego, no confió en (76)
Imaginemos la decepción para el enviado de María al presentar la solicitud Ella y no ser creído, él un hombre sin poder... Sin embargo, no se da por vencido y espera otra oportunidad. Sólo desde una profunda humildad del enviado se pueden llevar adelante las obras de Dios. ¿Cómo anda nuestra humildad? ¿Qué tan capaces somos de ofrecer la verdad y nuestro parecer sin querer imponernos? ¿Somos pacientes para esperar el mejor momento del otro para solicitarle algo?

Segunda consideración

El señor Obispo le dice a Juan Diego que no se haría su petición sólo porque él lo pidiera. (77)
¡qué difícil para Juan Diego pobre, pequeño, sin poder, alternar, en el diálogo, con el Sr. Obispo signo del mayor poder espiritual...! Y más, pues tenían que ser traducidos uno y otro puesto que fray Juan de Zumárraga no hablaba náhuatl y Juan Diego no hablaba el castellano, ¡al menos hasta entonces... ¡qué paciencia de los dos! Contemplemos a estos dos hombres dialogando con su verdad cada uno en busca de lo mejor. Pidámosle a María que nos enseñe a dialogar y a quitar
de nosotros las actitudes de poder que impidan un verdadero diálogo con otros.

Tercera consideración

El obispo le dice a Juan Diego que era muy necesaria alguna señal para poder creerle. (78)
El obispo Zumárraga sabe bien de los asuntos de Dios y lo difícil que es discernir su voluntad. En la época en que ellos vivieron actuaba fuerte la inquisición y había pena para quienes dijeran algo de apariciones o revelaciones. No era fácil que accediera ante la petición de un indígena desconocido. El obispo avanza con precaución como sondeando la posibilidad de la verdad o también pensando
que difiriendo el asunto se podría quitar de encima a Juan Diego. ¿Cuántas veces no damos crédito a las personas como el obispo Zumárraga? ¿Cuántas veces queremos deshacernos de las personas que nos importunan? Pidámosle a María que nos enseñe a descubrir la voluntad de Dios y a servirlo en los más desprotegidos y marginados.

Cuarta consideración

Juan Diego, al oír que el obispo pide una señal, le pregunta cuál es la señal qué quiere. ( 79-80 )
Juan Diego está muy convencido de que la reina del cielo puede darle al obispo cualquier señal...y es cierta su apreciación pues Dios ha puesto a María como Madre nuestra y Señora del universo. ¿Qué tan seguros estamos del amor y del poder misericordioso de María para nosotros? Pidámosle a Juan Diego que nos ayude a fortalecer nuestra fe y esperanza en Dios y en María aunque a veces no comprendamos y no aceptemos las señales que nos mandan.

Quinta consideración

El obispo despide a Juan Diego sin más. (81)
Sintamos el desconcierto y dolor de Juan Diego; ¿por qué procedió así el obispo; tendría cierta enfermedad de poder..? En cualquier caso, parece ser una gran descortesía y más para un adulto tan cortés y delicado como Juan Diego ¿cómo se habrá retirado éste? Que nuestra Madre y Juan Diego nos enseñen a ser humildes y corteses y a usar correctamente, evangélicamente, el poder que tenemos; y también a ser firmes en lo que queremos y buscamos, aunque se nos presenten situaciones y personas difíciles. ¿Qué tanto aguantamos y cómo vivimos las descortesías, y desatenciones que nos hacen otros quizá por exceso de poder. ?

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a considerar que la vida del creyente es difícil pero que no por eso hemos de echarnos atrás en lo que creemos y queremos vivir. También que reflexionen sobre el uso que hacemos sobre el poder que tenemos y cómo podríamos enfocarlo para servir mejor y a más hermanos.

VI Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base: Mt. 12, 38-42
Salmo: 76 (75)
Frase del Evangelio: «¿Por qué esta gente pide una señal...?» Mc. 8,12

Guía: Vamos a sacar provecho de estas lecturas. ¿Por qué será que los hombres siempre queremos señales? ¿A qué se debe? ¿ Qué señales tenemos en la Iglesia de la presencia de Jesús, el Signo-Sacramento máximo de Dios para nosotros? ¿Cómo usa Dios su poder para servirnos? Comentarios... )

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Procura que el título que lleva la estrella de hoy la introduzcan en las letanías. Ciertamente, ponerse bajo la protección de la Virgen Poderosa, nos llenará de alivio y confianza. Te sugiero las letanías Guadalupanas # 3. (pág. 73).

VIII. Oración final — Canto — Despedida — Acuerdos

Guía: Pónganse de acuerdo para ver quién preparará la estrella de la siguiente
sesión; se llamará: Dolorosa.

1. Ambientación - Recepción — Animación
2. Ubicación Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Hoy veremos que Juan Diego, después de que le insistió al Obispo para que le construyera su casita a la Virgen, es seguido y vigilado por los servidores de aquél. l Se desconfía de él. María, en su tiempo, fue mal vista por muchos por ser la Madre de uno que alborotaba al pueblo. ¡Qué no habrán dicho de Jesús y de María!. Vemos en el Evangelio la cantidad de trampas que quisieron ponerle a Jesús para que cayera. Hoy aprenderemos de nuestra Madre dolorosa a llevar con fortaleza los pecados ajenos y el mal que otros nos hacen. Escuchemos la lectura de
hoy.

III. Lectura del Nican Mopohua (82-87)

Lector:
82. «Y en cuanto se viene, (Juan Diego) luego les manda (el obispo) a algunos de los de su casa en los que tenía absoluta confianza, que lo vinieran siguiendo, que bien lo observaran a dónde iba, a quién veía, con quién hablaba.
83. Y así se hizo. Juan Diego luego se vino derecho. Siguió la calzada.
84. Y los que lo seguían, donde sale la barranca cerca del Tepeyac, en el puente de madera, lo vinieron a perder. Y aunque por todas partes buscaron, ya por ninguna lo vieron.
85. Y así se volvieron. No sólo porque con ello se fastidiaron grandemente, sino
también porque les impidió su intento, los hizo enojar.
86. Así le fueron a contar al señor obispo, le metieron en la cabeza que no le creyera, le dijeron cómo nomás le contaba mentiras, que nada más inventaba lo que venía a decirle, o que sólo soñaba o imaginaba lo que le decía, lo que le pedía.
87. Y bien así lo determinaron que si otra vez, regresaba, allí lo agarrarían, y fuertemente lo castigarían, para que ya no volviera a decir mentiras ni a alborotar a la gente».

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

El Obispo Zumárraga manda a algunos de sus colaboradores a que sigan a Juan Diego. (82)
El señor Obispo, todavía intrigado, con curiosidad quizá sana y hasta religiosa, manda investigar a Juan Diego. Y es natural que así lo hiciera pues ha habido en la historia de la Iglesia demasiados falsos videntes que han puesto en peligro la fe correcta de muchos. Como maestro de la fe, era lógico que el obispo investigara el caso de alguna manera. Por otro lado, podría ser que el Sr. Obispo fuera desconfiado respecto a los indígenas... Nosotros, ¿qué tanto somos solamente crédulos? ¿Qué tanto investigamos nuestra fe? Pidámosle a María que nos ayude a profundizar en nuestra fe.

Segunda consideración

Juan Diego va derecho hacia el Tepeyac para irse a su casa. (83)
Había sido un Domingo muy ajetreado el 1() de Diciembre. Juan Diego había quedado con la Virgen de llevarle el recado del obispo la tarde de ese día (N.M.. 65). Acompañémosle en sus preocupaciones y en su fe. Pensemos y sintamos lo que él iría pensando y sintiendo en el camino ya algo más esperanzado por la petición de la señal hecha por el obispo Zumárraga.

Tercera consideración

Los que seguían a Juan Diego lo perdieron de vista de repente y ya no lo encontraron. (84-85)
En la historia se han dado revelaciones, iluminaciones, Teofanías o Mariofanías-manifestaciones gloriosas y sorprendentes de María -que solamente algunos reciben de Dios en Su Providencia por algún motivo que El tiene. Quizá por eso Dios quiso que no hubiera otros testigos... Dios es sencillo y humilde para revelarse. Y Él sabe a quién escoge. Nosotros, ¿no nos parecemos al obispo y a
esos colaboradores suyos en aquello de: ver para creer? Pidámosle a María que nos enseñe a creer, aunque no veamos.

Cuarta consideración

Los enviados del obispo volvieron enojados a éste y le hicieron creer que Juan Diego sólo lo engañaba.(86)
La actitud de estos hombres es de dar pena y tristeza, y más al tratarse de gente del obispo. i Y cómo hay gente de ésta que vive para enredar a otros! A veces, cuando algo nos sale mal, buscamos hacer culpables a otros... Y cuando perdemos la serenidad no sabemos ni podemos analizar bien las cosas porque estamos perturbados. ¿Qué tan frecuentemente nos dejamos llevar por nuestros sórdenes y no podemos descubrir la voluntad y los caminos de Dios? Pidámosle a María que ni chismes ni comentarios nos desanimen de seguir a Jesús.

Quinta consideración

El obispo y sus sirvientes determinaron castigar a Juan Diego si volvía otra (87)
Aquí está claramente expuesta una determinación mal tomada; se plantea  un castigo injusto sólo por sospechar. En nuestra sociedad hay muchísimos en las cárceles sólo por sospechas o porque otros los culpan de algo que no es cierto. Son inocentes, que como Cristo y Juan Diego, son condenados a ser castigados. ¿No procedemos así en la familia, en los negocios, entre los amigos? ¿ Qué podemos hacer por aquellos a quienes les han quitado la libertad injustamente y que están en las cárceles sin culpa? Pidamos por ellos y sus detractores.

1. 
   Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a ver que no es fácil vivir el Evangelio. Y que a veces irán contra nosotros hasta gentes muy cercanas y queridas...
Guía: Hermanos: cuando vivamos momentos en que nos traten mal, nos calumnien o desconfíen de nosotros recurramos a Jesús y a María para resistir con fe los dolores que nos causen.

1. 
   Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua.

Lectura base: Mc. 14, 43-59
Salmo: 86 (85)

Frase del Evangelio: «Bienaventurados serán cuando los injurien y persigan y digan con mentiras toda clase de mal contra ustedes por mi causa...» Mt. 5, 11
Guía: Ayúdalos a sentir cuánto sufrió y se comprometió Cristo por nosotros y iCómo sufrió María por El y por nosotros al pié de la cruz!

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Invítalos a que añadan algunas invocaciones en las letanías; que recalquen que María ha sufrido y sufre por nosotros. Quizá sea bueno recitar hoy las letanías ordinarias que todos conocemos.

VIII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida

La estrella de mañana llevará por nombre: Agradecida.

1. Ambientación — Recepción — Animación

II Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Juan Diego va hacia su casa con muchos sentimientos en el corazón: va contento por haber cumplido el encargo de María con el Sr. Obispo, pero va triste porque no hay respuesta positiva de parte de éste. Es verdad que le pide una señal y esto ya es un paso... ¿qué irá a decir la Señora del cielo ante la actitud y la petición del Obispo? María Io va a consolar y a mostrarle su agradecimiento. Este se va a concretar en que ella lo va a glorificar, en que le pagará los favores hechos en su honor. Por eso la estrella de hoy lleva por titulo: Agradecida. Escuchemos el relato correspondiente a la tercera aparición.

III Lectura del Nican Mopohua (88-93)

Lector:
88. «Entre tanto, Juan Diego estaba con la Santísima Virgen, diciéndole la respuesta que traía del señor obispo;
89. la que, oída por la Señora, le dijo:
90. «Bien esta, hijito mío, volverás aquí mañana para que lleves al obispo la señal que te ha pedido;
91. con eso te creerá y acerca de esto ya no dudara ni de ti sospechara.
92. Y sábete, hijito mío, que yo te pagaré tu cuidado y el trabajo y cansancio que por mi has emprendido;
93. ándale, vete ahora; que mañana aquí te aguardo».

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego se encuentra por tercera vez con María a la que le dice el —cado del obispo. (88)
Otra vez María le sale al paso a Juan Diego; él se había comprometido con Eta a llevarle, al atardecer del Domingo 10, el recado del Obispo y Ella lo espera. Contemplemos esta escena. Aprendamos de María a estar al pendiente de las necesidades y preocupaciones de los demás; prendamos de Juan Diego a conen Dios y en María.

 Segunda consideración

La Virgen cita a Juan Diego a que vaya al día siguiente para darle la señal pedida por el obispo. (89-90)
María, como Dios, sabe de qué estamos hechos; conoce que son importantes para nosotros los signos y los símbolos y se hace al modo nuestro para que llevemos a cabo nuestra misión y nos realicemos como personas. ¿Qué tan atentos estamos para dar a otros los signos que necesitan para vivir más plenamente como humanos, como verdaderos cristianos? ¿Somos testigos, signos de Dios y de María para otros? Que Ella nos ayude a serlo...

Tercera consideración

María le dice a Juan Diego que con la señal que Ella le va a dar, el Obispo ya no dudará de él. (91)
¡Qué descanso para Juan Diego; se le restablecerá su crédito delante del obispo! Y sobre todo éste valorará el amor y la preocupación de la Virgen por la situación de los indígenas y la esperanza que Ella depositó en Juan Diego. La confianza de otros hacia nosotros reafirma nuestra seguridad personal; ¡les tan importante que otros confíen en nosotros...! ¿Qué tanto confiamos en otros? ¿Somos merecedores de que otros confíen en nosotros? ¿Qué tanto confía cada quien en sí mismo?

Cuarta consideración

La Virgen le promete a Juan Diego que le pagará el trabajo que está haciendo por Ella. (92)
Sigamos contemplando esta escena tan bella, este diálogo entre Madre e hijo... Nuestra condición humana es débil y siempre queremos alguna retribución por lo que hacemos. A veces es la buena cara del otro lo que nos consuela, lo que nos motiva o lo que buscamos... A veces es el regalito que nos va a hacer la otra persona más que la satisfacción de hacer el bien o cumplir con nuestro deber.
Aprendamos de María a ser generosos y agradecidos. De nuestra parte demos gratis lo que gratis hemos recibido de Dios, de María, de la Iglesia, de otros...

Quinta consideración

María despide a Juan Diego y le promete que lo esperará ahí al día siguiente para darle la señal. (93)
Disfrutemos esta parte final de la tercera aparición; ¡qué promesa y qué esperanza para Juan Diego! Ahora sí se puede ir tranquilo a su casa con la seguridad que le ha dado su Madre, nuestra reina celestial. Confiemos a Ella todo lo que somos y necesitamos porque Dios la ha hecho Poderosa, Fiel, Generosa, Agradecida.

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a que descubran la generosidad de María y su agradecimiento a Juan Diego por lo que va a hacer. El nombre de la estrella, agradecida, corresponde muy bien a María que es la más agradecida de todas las personas con Dios.

1. 
   Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Guía: Veamos cómo ya desde el Evangelio aparece que Jesús hace señales a través de María.
Lectura base: Jn. 2, 1-11
Salmo: 57 (56)
Frase del Evangelio: «El Señor me llena de gozo, y mi Dios me colma de alegría, porque me vistió con el traje de salvación, y me cubrió con un manto de liberación, como novio que se pone la corona o novia que se adorna con sus joyas» Is 61 ,10

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Hoy se presta mucho para que las letanías las inventen. Ya han ido rezando diferentes, ya están preparados para hacerlo. Podría empezar diciendo: Gracias Madre Nuestra, porque... -aquí dirían la causa por la que quieren dar gracias. - Los demás pueden contestar: te damos gracias, Madre que cumples lo que prometes.

VIII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida

Guía: El canto podría ser alguno de acción de gracias o el Magnificat de María. Sugiéreles que den gracias durante el día y la noche por tantos favores recibidos a través de Nuestra Madre.
La estrella de mañana se llamará: Reina de la esperanza.

I Ambientación — Recepción — Animación

II Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Recordaremos brevemente lo que vivimos ayer -la sesión pasada- : Juan Diego le da a conocer a la Virgen la petición que hace el Obispo de que se le dé alguna señal. Una vez dado el recado se retira a su casa a descansar. Sin embargo se va a encontrar a su tío muy enfermo y no se presentará a la Cita del lunes 11 con la Señora de/ cielo. Juan Bernardino le ruega que vaya a Tlatelolco a pedir un sacerdote que lo prepare para morir. Juan Diego se dirige con la esperanza de
encontrar al sacerdote y así favorecer la salud de su tío. El sabe esperar. Lo aprendió de Jesús y de María, la Madre de la esperanza. Ella es la Gran Maestra de la esperanza, es la síntesis, la perfecta realización de la esperanza de Israel y de todos nosotros, Ella esperó a Jesús con todo su amor antes de nacer y lo siguió esperando hasta el fina/ de su vida. Ella esperó y gozó la resurrección de su Hijo. Por eso este día la estrella se llama Reina de la esperanza; María y Juan Diego nos enseñan a esperar. Escuchemos el relato de hoy.

III. Lectura del Nican Mopohua (94-103)

Lector:
94. «Y al día siguiente, Lunes, cuando debía llevar Juan Diego alguna señal para ser creído, ya no volvió.
95. Porque cuando llegó a su casa, a un su tío, de nombre Juan Bernardino, se le había asentado la enfermedad, estaba muy grave.
96. Aún fue a llamarle al médico, aún hizo por él, pero ya no era tiempo, ya estaba muy grave.
97. Y cuando anocheció, le rogó su tío que cuando aún fuera de madrugada, cuando aún estuviera oscuro, saliera hacia acá, viniera a llamar a Tlatilolco algún sacerdote para que fuera a confesarlo, para que fuera a prepararlo,
98. porque estaba seguro de que ya era tiempo, ya el lugar de morir, porque ya no se levantaría, ya no se curaría.
99. Y el Martes, siendo todavía mucho muy de noche, de allá vino a salir, de su Casa, Juan Diego, a llamar el sacerdote a Tlatilolco;
100. y cuando ya acertó a llegar al lado del cerrillo, terminación de la sierra, al pie, donde sale el camino, de la parte en que el sol se mete, en donde antes él saliera, dijo:
101 . «Si me voy derecho por el camino, no vaya a ser que me vea esta Señora y  seguro, como antes, me detendrá para que le lleve la señal al gobernante eclesiástico como me lo mandó;
102. Que primero nos deje nuestra tribulación; que antes yo llame de prisa al sacerdote religioso, mi tío no hace más que aguardarlo».
103. Enseguida le dio la vuelta al cerro, subió por en medio y de ahí, atravesando, hacia la parte oriente fue a salir, para rápido ir a llegar a México, para que no lo detuviera la Reina del cielo».

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego no va a la cita que tenía el lunes 11 con la Virgen porque su tío estaba muy grave. (94-95)
El tío, en la cultura indígena, era importantísimo; a veces más que el papá porque simbolizaba al pueblo, las costumbres y tradiciones, la herencia... Morirse el tío, para Juan Diego, era como morirse su pueblo, Por eso luchó más por la vida de Juan Bernardino. ¿Qué tanto luchamos por otros, por el bien común? Pidamos porque nuestro país y los países Latinoamericanos no perdamos nuestras tradiciones, nuestra rica cultura y nuestras esperanzas para que seamos, en verdad, el Continente de la esperanza, como nos ha llamado Juan Pablo ll.

Segunda consideración

Juan Diego, al encontrarse al tío tan grave, le llevó el médico. (96)
El cuidado por otro es algo muy concreto. Aquí la caridad cristiana le pide a Juan Diego que actúe, que busque al médico, que salga de donde está a favor del otro. Hay veces que la atención al prójimo nos impide realizar nuestros deseos y otros compromisos tan importantes como esta cita o como ir a la misa. ..es cuando se deja a Dios por Dios; es decir, cuando el amor nos pide que nos acerquemos a cuidar del prójimo. ¿Sabemos aplicar esta regla de la caridad cristiana?

Tercera consideración

Juan Bernardino le rogó a Juan Diego que fuera el Martes 12, temprano, un sacerdote a Tlatelolco para que lo atendiera. (97-98)
Contemplemos al buen viejo de Juan Bernardino que comprende que ya va a morir y quiere estar muy bien con Dios antes de terminar su vida aquí. Vive la cristiana con plenitud aun a pesar de tener poco tiempo de haberse convertido. acepta los signos y sacramentos que Dios ha hecho para nuestro bien. ¿ Qué Zn bien y con qué frecuencia nos preparamos para recibir los sacramentos?

Cuarta consideración

Juan Diego, el Martes 12, salió muy temprano por el sacerdote hacia Tlatelolco  (99)
La caridad hace que algunas veces nuestro descanso se limite por el bien otros. Acompañemos a Juan Diego en este recorrido. Sintamos su preocupación, su zozobra, su esperanza, y aprendamos a amar así, como él. Pidámosle a Varía que nos enseñe a amar, a servir, a esperar como Ella lo hace.

 Quinta consideración

Juan Diego, ya en el camino, reflexionó sobre la posibilidad de que la Virgen lo detuviera si se iba por el mismo camino y se fue por otro lado para que Ella no le saliera al paso. (100-103)
Juan Diego estaba muy preocupado. El pensó: que primero se vaya de nosotros este pendiente de la enfermedad, ya luego haremos el servicio a la Virgen. Aquí se nos pinta a Juan Diego muy humano y, a la vez, haciendo actuar su fe por el amor. Puso todo lo que estaba de su parte para que su tío sanara aunque la Virgen tuviera que esperar... ¿Se olvidó del poder de Dios y de María? ¿Actúo sabiendo que está primero la caridad? ¿Hizo este gesto de cortesía indígena para no pasar por el mismo lugar y obligar a la Virgen a actuar? De cualquier modo él siguió aprendiendo a confiar más en Dios y en María. Ella va a ser su gran maestra. ¿Cómo podremos avanzar en el camino de la confianza en Dios y en María? Cada mañana, al menos, ofrezcámosle el día y confiémonos a Ellos.

1. 
   Reflexiones y comentarios sobre hoy

Guía: Ayúdalos a descubrir que no es fácil vivir la virtud de la esperanza aun a pesar de que uno lo quiere. Hazles ver la necesidad de vivir en ella.

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mophua Lectura base: Mt. 11, 25-30
   Salmo: 115 (114)
   Frase del Evangelio: «Padre: en tus manos encomiendo mi espíritu...» Lc. 23, 46
   Guía: Enséñalos a reposar un momento en la frase que más les haya llamado la atención para que aprovechen más la llamada del Espíritu Santo.

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Te sugiero las Letanías Guadalupanas #4 que están enseguida.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Te sugeriría que rezaran o cantaran la Salve muy despacio; que noten que esta oración contiene una gran esperanza en la intervención de María a nuestro favor. Allí le decimos que estamos seguros de que nos atiende en nuestras tribulaciones, angustias, enfermedades.
La estrella de mañana será: Solidaria.

Letanías Guadalupanas (4)

Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Madre de todos los que sufren enfermedades y miserias Ruega por nosotros
Madre de los que tienen aflicciones y tribulaciones
Madre de los que comprenden que servir al hermano necesitado es como Dios quiere ser servido.
Madre que nos esperas para atendernos, consolarnos y animarnos.
Madre de los que confiamos en Ti, a pesar de nuestras propias faltas y pecados.
Madre de los que confían en los sacramentos que Dios ha puesto para nuestro bien y salvación.
Madre que nos ayudas a cumplir nuestras obligaciones aun a pesar de las dificultades.
Madre de los sacerdotes, ministros y pastores amados de Nuestro Señor.
Madre de los que se apresuran a servirte cada vez mejor.
Madre, que junto con el Dios vivo, das a los indígenas la alegría de vivir. Enséñanos a amar
Tú, que conoces nuestras angustias, penas y aflicciones
Tú, que nos sales al paso para confortarnos en las necesidades.
Tú, que satisfaces nuestras necesidades más íntimas de amor, cuidado y protección.
Tú, que te has hecho la más pequeña para servir mejor.
Tú, que nos tienes bajo tu sombra y amparo.
Tú, que eres nuestra Madre tierna y delicada.
Tú, que nos das rosas de amor y fragancia celestiales.
Tú, que eres muy eficiente para que se cumpla el plan del Padre.
Tú, que solicitas nuestra colaboración para que el Reino de Dios llegue a todos.
Tú, que nos animas a seguir realizando la alianza que Dios ha hecho con nosotros. Enséñanos a servir
Reina de la creación que nos enseñas a usarla para nuestro regocijo
Reina de las cumbres y montañas donde el hombre ha creído encontrarse más con Dios.
Reina de las flores, reflejo del Corazón de Dios para los indígenas...
Reina de todas las plantas y vegetales de la tierra.
Reina de las fuentes, manantiales y ojos de agua.
Reina de los ayates, morrales, bolsas, y mochilas en que llevamos nuestros signos y apoyos evangelizadores
Reina de todos los caminos que recorremos para servir a otros.
Reina que nos enseñas a alabar y servir a Dios a través de sus criaturas.
Reina de los Angeles... Reina de los Profetas...(Sigue como siempre).
Cordero de Dios..

1. Ambientación - Recepción - Animación
2. Ubicación • Oración inicial, ofrecimiento y canto

Juan Diego, cuando iba hacia Tlatelolco por el sacerdote que ayudaría a su a bien morir, decidió irse por otro camino, pero María le salió al paso. Ella es la Estrella Solidaria, Nuestra Madre Amabilísima, que ve y siente nuestras penas y angustias y corre, se acerca a ayudarnos. Por eso, este día la contemplaremos muy solícita en favor de Juan Diego, en esta escena tan llena de su amor hacia Juan Bernardino, hacia nosotros... Escuchemos el relato,

III. Lectura del Nican Mopohua (104-11)

Lector: Mientras Juan Diego va caminando
104. piensa que por donde dio la vuelta no lo podrá ver La que perfectamente a todas partes está mirando.
105. La vio cómo vino a bajar de sobre el cerro, y que de allí lo había estado mirando, de donde antes lo veía.
106 Le vino a salir al encuentro a un lado del cerro, le vino a atajar los pasos; le dijo
107. «¿Qué pasa, el mas pequeño de mis hijos? ¿A dónde vas, a dónde te diriges
108. Y él, ¿tal vez un poco se apenó, o quizá se avergonzó; o tal vez de ello se espanto se puso temeroso?
109 En su presencia se postró, la saludó, le dijo:
110. «Mi Jovencita, Hija mía la más pequeña, Niña mía, ojalá que estés contenta; ¿Cómo amaneciste? ¿Acaso sientes bien tu amado cuerpecito, Señora mía, Niña mía?

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

María es la que a todas partes está mirando para cuidarnos a todos. (104)
Dios,el que es Amor Solidario con todos, le ha dado a nuestra Madre la capacidad de estar al pendiente de nosotros desde su Asunción al cielo. ¿Cómo nos sentimos ante esta realidad? ¿Cómo recibimos y sentimos esta mirada Suya?  ¿Cómo la miramos a Ella? ¿Cómo miramos toda la ealidad que está a nuestro alrededor, y sobre todo, a los demás? Pidámosle a nuestra Madre que nos enseñe a mirar con su mirada misericordiosa y compasiva...

Segunda consideración

Juan Diego se da cuenta de cómo la Virgen desciende del cerro y cómo lo había estado mirando y esperado. (105)
Imaginemos la alegría y esperanza que pudo haber sentido Juan Diego por este encuentro porque Ella lo estaba esperando. A lo mejor sintió también cierto temor al pensar que lo iba a detener... Cuando vamos a visitar al Señor en el sagrario ¿cómo nos sentimos? Cuando vamos a algún lugar en donde se venera alguna imagen de María, sobre todo en el Tepeyac, ¿cómo nos sentimos? ¿Les
pasamos esta experiencia de fe a otros? ¿Alguna vez hemos llegado a sentir que  Ella nos mira? Pidámosle que nos muestre sus ojos misericordiosos..,

Tercera consideración

María se acerca y le sale al encuentro a Juan Diego. (106)
Ya no sólo es ver que Ella lo miraba, ahora es estar con Ella, es sentirla cerca y tenerla allí, con él. Disfrutemos con Juan Diego esta presencia de María con nosotros. Pidámosle a nuestro Dios que nos haga sentirla cerca de nosotros hoy mismo con todo ese amor solidario que nos tiene a cada uno.

Cuarta consideración

La Virgen le dice a Juan Diego: ¿Qué pasa, hijito mío, a dónde te diriges? (107)
María es toda una Madre, se preocupa por su hijito, quiere saber de él por él mismo. Cada uno de nosotros le importamos, somos valiosos para Ella porque es verdaderamente Madre Nuestra. Sintamos que estas preguntas nos las hace personalmente a cada uno de nosotros. ¿Qué le respondemos? ¿Qué nos pasa hoy? ¿Cómo nos sentimos? ¿Qué nos preocupa? Expresémoselo...

Quinta consideración

Juan Diego saluda tiernamente a la Reina celestial. (108-110).
Juan Diego, con todo su cariño, y con hermosísimas expresiones, propias de su cultura, le da los buenos días a la Virgen. Contemplemos este encuentro gozoso de Madre e hijo. Pidámosle a Nuestra Madrecita que nos enseñe a saber estar gozosos con Ella en la oración, el silencio, la contemplación de los misterios de la vida de Cristo. Que nos enseñe a esperar contra toda esperanza ante lo que nos pasa y le pasa al mundo cada día. Aprendamos de Juan Diego a tratarla con mucha sencillez, cariño y familiaridad. Que él interceda por nosotros para que el
Señor Jesús nos conceda esta gracia.

1. 
   Reflexiones y comentarios sobre Io meditado hoy

Guía: La solidaridad nos debe caracterizara los cristianos. Compartamos testimonios recientes de solidaridad que nos impulsen a ser más solidarios. (tiempo. ..)Podrías invitarlos a comentar algo sobre la Madre Teresa de Calcuta,sobre la solidaridad del P:Pro en México, o fray Maximiliano María Kolbe en Polonia.

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua
   Guía: Propónles preguntas apropiadas para que descubran la solidaridad de Jesús y de María en los textos del Evangelio de hoy. Que esto los ayude para que busquen compromisos más concretos al estilo de Jesús y María.
   Lectura base: Jn. 8, 1-11; Lc. 24, 13-35
   Salmo: 85 (84)
   Frase del Evangelio: «¿Quién soy yo para que la Madre de mi Señor venga a verme...?» Lc. 1, 43
   
   

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Invítalos a que añadan a la letanía #4 (Pág 90) los aspectos de solidaridad de Nuestra Madre que quieran celebrar.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Escojan algún canto apropiado: María de Nazaret, Tú has venido a la orilla.
La estrella de mañana se llamará: Acogedora

1. Ambientación - Recepción - Animación
2. Ubicación - oración inicial - ofrecimiento - canto

Guía: Vimos ayer —la sesión pasada- la gran solidaridad de María con Juan Diego al salirle al paso. Hoy consideraremos cómo Juan Diego le dice sus preocupaciones y temores, le comunica a la Virgen que su tío Juan Bernardino está muy grave, que lo disculpe de que no pueda hacer el favor que Ella espera de él, pero que después, al día siguiente, regresará para hacerlo. Ella lo escucha con atención, acoge a Juan Diego con todo su amor. Por eso la estrella de este día es: acogedora.

III. Lectura del Nican Mopohua (111-116)

Lector:
Después de saludar a la Virgen Juan Diego le dijo:
111. «Con pena angustiaré tu rostro, tu corazón: te hago saber, Muchachita mía, que está muy grave un servidor tuyo, tío mío.
112 Una gran enfermedad se le ha asentado, seguro que pronto va a morir de ella.
113. Y ahora iré de prisa a tu casita de México, a llamar a alguno de los amados de Nuestro Señor, de nuestros sacerdotes, para que vaya a confesarlo y a prepararlo,
114. porque en realidad para ello nacimos, los que vinimos a esperar el trabajo de nuestra muerte.
115. Mas, si voy a llevarlo a efecto, luego aquí otra vez volveré para ir a llevar tu aliento, tu palabra, Señora, Jovencita mía.
116. Te ruego me perdones, ténme todavía un poco de paciencia, porque con ello no te engaño, Hija mía la menor; Niña mía, mañana sin falta vendré a toda prisa».

1. 
   Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego le hace saber a María que le dará una pena al comunicarle que su tío está muy grave. (111)
iQué delicadeza de Juan Diego! El piensa que le va a dar una pena a María con esto, como si Ella no lo supiera... Imaginemos la comprensión y ternura de María al oír esta comunicación sencilla y fiel de Juan Diego. Nosotros, ¿tenemos hoy alguna pena que queramos comunicarle a María, nuestra Madre?

Segunda consideración

Juan Diego tiene el temor de que su tío muera. (112)
Como todos nosotros él tiene este temor ante la muerte probable de su tío. ¿Qué tanto le participamos a María nuestros temores? ¿Sabemos dialogar con Ella como Juan Diego? Pidámosle a él que nos enseñe a platicar, a dialogar con Nuestra Madre, y que por su amor disipe nuestros temores.

Tercera consideración

Juan Diego le dice a la Virgen que irá a México por un sacerdote para que atienda a su tío. (113)
Sigamos contemplando este diálogo; oigamos estas palabras preocupadas y llenas de fe de Juan Diego. Ya él y Juan Bernardino viven como miembros vivos de la Iglesia y estiman y participan en los sacramentos que el Señor dejó para todos. En este relato aparecen aquí los sacramentos de la Reconciliación, Eucaristía y Unción de los enfermos. ¿Qué tanto valoramos los sacramentos que
nos dejó el señor Jesús? ¿Qué tanto apreciamos el don del sacerdocio? ¿Cómo consideramos, entendemos y atendemos a nuestros sacerdotes?

Cuarta consideración

En su diálogo con la Virgen Juan Diego menciona que todos esperamos el trabajo de nuestra muerte. (114)
Para los indígenas de entonces les era bastante familiar la muerte, Tenían el rito de los sacrificios humanos y apreciaban mucho a quienes morían en el parto y en la guerra. Pero sabían bien que hay que preparar ese trabajo de morir. Pero además, en ese tiempo, con la guerra contra los españoles y las nuevas epidemias, habían muchísimas muertes, la muerte era algo cotidiano para ellos. Nosotros, ¿nos vamos preparando para el momento de nuestra muerte? Que Juan
Diego nos enseñe a hacerlo y María nos acompañe entonces...

Quinta consideración

Juan Diego, muy decidido para ir a México por el sacerdote, le dice a María que regresará al día siguiente para cumplir su encargo. (115-116)
Juan Diego le pidió a María que lo perdonara, que le tuviera paciencia. Esta confianza de Juan Diego en María es verdaderamente filial, agradable y desconcertante. Por un lado siente dejarla, pero también el amor por el tío y la urgencia de su gravedad le piden que se apresure a ir a México. Esta premura para Juan Diego era mayor pues se trataba del tío que, como hemos visto, era una figura tan especial para los indígenas... iCon qué ternura habrá escuchado María
a este hijo suyo tan confiado! Confiemos nosotros en Ella. Confiémosle nuestras necesidades.

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a comentar aspectos sobre la enfermedad y la muerte para lograr tener una visión cristiana de ellas. Recuérdales que hace poco —en el caso de la Pascua continua— pasamos la fiesta de todos los Santos y los fieles difuntos. ¿Qué nos parece el amor de Juan Diego por su tío?  ¿Hemos tenido la experiencia de constatar cómo actúan eficazmente los sacramentos em nosotros? (Comentarios...) ¿Qué nos parece María, tan acogedora y sensible? ¿Cómo acogerá en el cielo a los que van llegando...?

Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua
Lectura base: 1 Tes. 4, 13-18
Salmo: 91 (90)
Frase del Evangelio: «Vengan a mí los que están cansados y agobiados que yo los aliviaré...» Mt. 11, 28

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Ayúdalos a que en las letanías aumenten invocaciones o frases que les hagan sentir que María nos acoge, nos oye y escucha con todo su corazón compasivo. La letanía adecuada es la #4. (Pág. 90).

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Podrían cantar: Madre de nuestro pueblo
La estrella de mañana se llamará: Educadora. l.

1. Ambientación - Recepción -Animación
2. Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Hoy y los días —y las sesiones- siguientes contemplaremos y escucharemos a María, Madre Nuestra, en la revelación máxima que hace de sí respecto a nosotros; se muestra bondadosa, piadosa, servicial, muy cariñosa. Estemos atentos y agradecidos para escuchar las frases más dulces de Ella que hayan quedado escritas en la historia del mundo... También aparece como la que nos educa en el amor total para que no temamos nada ni a nadie. Por eso la estrella de hoy es:
Educadora. Escuchemos estas palabras tan consoladoras de María.

III. Lectura del Nican Mopohua (117-118)

Lector:
117. «En cuanto oyó las razones de Juan Diego, le respondió la Piadosa Perfecta Virgen:
118. «Escucha, pónlo en tu corazón (a), hijo mío el menor, que no es nada lo que te espantó, lo que te afligió(b); que no se perturbe tu rostro, tu corazón (c); no temas esta enfermedad ni ninguna otra enfermedad, ni cosa punzante, aflictiva».(d)

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

La Santísima Virgen oye a Juan Diego con mucha atención y le responde, (117)
Ella es verdadera Madre que sabe escuchar, desde lo más profundo de su amor, al corazón del hijo... Siempre está atenta a lo que le pedimos y a nuestras necesidades. Sabe respondernos perfectamente como lo estamos deseando y necesitando. ¿Qué tan seguros estamos de que María nos escucha como verdadera Madre? ¿Qué experiencia tenemos de esto? ¿Le confiamos todo lo que somos, sentimos y sabemos? Contemplemos esta escena.

Segunda consideración
María le dice a Juan Diego: «Escucha, pónlo en tu corazón». (118-a)
Ella, que sabe oír desde su Corazón Inmaculado y vigilante por nuestro  bien, también pide que escuchemos con el corazón, a fondo. ¿Cómo podríamos vivir esta dimensión de apertura del corazón para escuchara Dios, a María, a los demás, a nosotros mismos? Sintamos que Ella nos dice: te amo, pónlo en tu corazón...

Tercera consideración
María le dice a Juan Diego: «no es nada lo que te ha espantado, lo que te afligió». (118-b)
Ella le enseña con cariño a Juan Diego a relativizar todo lo que no es el reino de Dios; nos enseña a poner a Dios por delante y a todas las cosas en el para que así pueda obrar en nosotros con toda libertad y hacernos más libres y disponibles para trabajar por ese Reinado.¿Qué tan preocupones somos de todo lo que nos rodea: situaciones, enfermedades, autoridades, descalabros? ¿No les
damos demasiada importancia? ¿Qué tanto dejamos con confianza nuestra vida y nuestras situaciones en manos de Dios, de María? Mientras rezamos digámosle a María, Nuestra Madre educadora, confío en Ti; edúcame en el amor y en la confianza,en el saber escuchar a los demás,en vivir la fidelidad...

Cuarta consideración
María le dice a Juan Diego: «Que no se perturbe tu rostro, tu corazón». (118-c).
En la cultura indígena el rostro y el corazón, dichos en una sola frase, querían decir la persona, todo lo que es uno. Ellos se educaban para tener un rostro firme y un corazón generoso y valeroso. Ella le está diciendo en realidad: que no se descomponga tu persona; contrólate, sé fuerte y valiente, despreocúpate y confía. Abandonémonos con toda confianza en Ella, la Llena de gracia, la
Omnipotencia suplicante, como le ha llamado la Iglesia. Pongamos nuestras personas bajo su cuidado materno, promotor y cariñoso.

Quinta consideración
María le dice a Juan Diego: «No temas ni esta enfermedad ni ninguna otra cosa aflictiva». (118-d).
Ella es la Madre que nos enseña cómo tener ese rostro firme y ese corazón fuerte. Es exigente y tierna a la vez. Y nos invita a confiar, a no temer. ¿Cuáles son hoy nuestros temores? ¿Por qué no los escribimos por estos días, se los decimos a María y los ponemos en su corazón? Después rompamos el papel como signo de entrega y confianza para vivir en la seguridad de su amor. Ella nos atenderá y levantará...

1. 
   Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy
   Guía: Ayúdalos a que descubran cómo María nos educa en todo; en lo sociológico, en las relaciones personales, en el trato con Dios... Que cuenten alguna experiencia en que descubran a Nuestra Estrella Educadora.
2. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua
   Lectura base: LC 2, 41-52
   Salmo: Prov 8,32-36
   Frase del Evangelio: «Ustedes me llaman el Señor, y el Maestro y dicen bien, porque lo soy» Jn 13,13

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Ayúdalos a integrar en la letanía que escojan para hoy el título de Maestra, Educadora, Madre cariñosa, Promotora..

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Hoy podrían cantar: Santa María del camino, porque Ella camina siempre con nosotros y nos educa para seguir a Jesús.

La estrella de mañana se llamará: Bondadosa.

Ambientación - Recepción - Animación

Ubicación - oración inicial - ofrecimiento - canto

Hoy vamos a contemplar y considerar uno de los momentos más profundos y tiernos de todo este Acontecimiento Guadalupano. María se le presenta a Juan Diego —en el contexto del temor que tiene por la enfermedad de su tío- como verdadera y bondadosa Madre y lo invita a abandonarse a su amor y cuidado. Por esto el día de hoy nuestra estrella se llama: Bondadosa. Escuchemos y gocemos este diálogo de intimidad de María con Juan Diego, con nosotros...

III. Lectura del Nican Mopohua (119)

Lector:
María le dice a Juan Diego:
119. «¿No estoy aquí yo, que soy tu Madre?(a) ¿No estás bajo mi sombra y resguardo?(b) ¿No soy yo la fuente de tu alegría?(c) ¿No estás en el hueco de mi manto, en el cruce de mis brazos?(d) ¿Tienes necesidad de alguna otra cosa?»(e)

1. Hechos o consideraciones para este día

Guía: Les puedes enseñar la siguiente jaculatoria, más apropiada para este día, que en adelante podrán repetir cuando quieran: iGuárdame en tu corazón, Virgen Hermosa; cambia mis penas en rosas, ¡Madre de consolación!

Primera consideración
María le dice a Juan Diego ante su temor y dolor: «¿No estoy yo aquí que soy tu Madre?» (119-a)
íQué realidad tan dulce y qué manera de decirlo María! Ella es plenamente Madre bondadosa, cariñosa. Gocemos con Juan Diego esta dicha, esta palabra que hoy nos dice Ella, Nuestra Morenita, Nuestra Madre del Tepeyac. Sintamos que Ella está aquí y nos dice estas palabras..

Segunda consideración
María le dice a Juan Diego: «¿No estás bajo mi sombra y resguardo? (119-b)
Cualquier Madre ampara y protege a sus hijos... jcuánto más María! Sintamos que estamos bajo ella como árbol frondoso... Con toda su ternura nos cobija, protege y acompaña.
En la cultura indígena se acostumbraba que el tlatoani protegiera a los más débiles, a los acusados. Y éstos se refugiaban, se ponían bajo el manto protector del poderoso o poderosa. Así aparece María en la imagen que Dios nos dejó:del lado derecho de Ella,su manto es más largo abajo, al estilo de los tlatoanis de ese tiempo que aceptaban bajo su manto a los más débiles, es protegidos, viudas, huérfanos que se agarraban de la punta del manto del jefe para sentir y pedir su protección. Así, Ella protege a su ángel, a su caballero águila o mensajero, a Juan Diego, como lo interpretaron los indígenas contemporáneos suyos. Aprendamos a ponernos bajo Su mirada que nos acaricia; Su dulce y piadosa mirada compasiva. Pongámosle todo este mundo nuestro bajo Su mirada y Su manto de protección.

Tercera consideración
María le dice a Juan Diego: «¿No soy yo la fuente de tu alegría; tu salud?». (119-c)
¿Qué habrá sentido Juan Diego ante estas palabras de María tan dulces y consoladoras? En verdad Ella es fuente de alegría en todas partes. Es salud, vida y esperanza nuestra. Ella nos enseña a cantar la alegría de vivir; Ella nos enseña a agradecerle a Dios y a contarles a otros las maravillas que ha hecho por nosotros; nos educa y enseña a agradecerle a Dios todos sus beneficios. Vivamos este agradecimiento cotínuo al Dios de la vida, Que Ella nos enseñe a poner nuestras alegrías en Dios. Pidámoselo mientras rezamos.

Cuarta consideración
María le dice a Juan Diego: «¿No estás en el hueco de mi manto, en el cruce de mis brazos?» (119-d).
iQué imagen más bella de cercanía! María habla así porque los indígenas así expresaban cómo las mamás tenían cerquita a sus hijos. María se adapta a esta hermosa cultura y nos deja extasiados con estas frases cálidas, tiernas, acogedoras. Ella es como un nido caliente en donde nos tiene consolados y protegidos para que crezcamos sin temor y glorifiquemos a Dios con nuestras obras.
Sintámonos en este momento en ese hueco de su manto, en el cruce de sus brazos... Y abandonémonos y guardémonos allí..!

Quinta consideración
María le dice a Juan Diego: «¿Tienes necesidad de alguna otra cosa?» (119-e)
Estas frases de María culminan de manera muy fuerte: Ella quiere atendernos en lo que necesitamos, pero nos dice que nos fiemos de su amor, que nos arrojemos en Su corazón, que confiemos en su protección, porque Ella cubre satisfactoriamente nuestras necesidades. Presentémosle las inquietudes y deseos que tenemos de ser felices, de querer seguir a Jesús, de poder servirlo, de hacer crecer el Reino del Padre entre nosotros... Y nuestras necesidades de amar y ser amados...

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a que expresen cómo se sienten después de contemplar y escuchar a María.

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base: Jn 19, 25-27
Salmo: Lc 1, 68-79
Frase del Evangelio: «María observaba cuidadosamente todos estos acontecimientos y los guardaba en su corazón». Lc. 2, 19

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Ayúdalos a que inventen la letanía de hoy después de haber sentido el profundo amor de María por cada uno y por todos.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Hoy sería muy propio algún canto sobre la bondad y amor de María como: Dulce Madre mía... Si se lo saben, o algún otro apropiado como: Alabemos a María.
La estrella de mañana se llamará: Consoladora.

Aquella vez...
había algo de flor, algo de estrella
en Su mirada;
algo de luz, algo de huerto
en su palabra...
Y era luz, era verso,
exaltación
-aleteo de estrella-
la mañana...
Luz, verso, palabra,
Fecundidad de Dios...
iBlancura Intacta!

Ambientación - Recepción - Animación

Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Nota metodológica. -l .-EI Domingo de Cristo Rey es una fecha importante. Por esta razón dedico una sesión especial para este día; es el anexo 1 de esta edición. Pueden usar esa sesión en lugar de la que lógicamente seguiría según la cuenta de los días ordinarios que ustedes vayan llevando. Puede ser a partir del 20 de noviembre.2.-Para los que hacen la Pascua durante el año suprimen la referencia a la Revolución mexicana.

Guía: Ayer—la sesión pasada- quedamos extasiados ante la constatación de que María es Madre de todos los humanos por designio de Dios. La verdadera revolución de la historia es que Dios se haya hecho carne y sangre, hombre como nosotros. Y que María sea Madre de Cristo-Dios es una realidad que sólo El pudo haber hecho. Pero la alianza de Dios con nosotros es, además, hacernos de su familia: hijos del Padre, hermanos del Hijo, templos y portadores del Espíritu. Pero para eso se necesitó la Encarnación de la Segunda Persona Divina para que pudiéramos ser familiares de Dios. María viene a testificar las maravillas del plan de Dios a estas tierras de revoluciones y muertes violentas -testigo la revolución mexicana- de una manera única, consoladora. Por eso la estrella de hoy se llama: Consoladora; es una de las acciones más bellas de Nuestra Madre. Escuchemos cómo consuela a Juan Diego.

III. Lectura del Nican Mopohua (120-123)

Lector:
María le dice a Juan Diego- y en él a nosotros-:
120. «Que ninguna•otra cosa te aflija, te perturbe(a); que no te apriete con pena la enfermedad de tu tío, porque de ella no morirá por ahora(b). Ten por cierto que ya está bueno». (120 c)
121. i Y luego en aquel mismo momento sanó su tío, como después se supo!
122. Y Juan Diego, cuando oyó la amable palabra, el amable aliento de la Reina del cielo, muchísimo con eso se consoló, bien con ello se apaciguó su corazón,
123. Y le suplicó que inmediatamente lo mandara a ver al gobernante obispo, a levarle algo de señal, de comprobación, para que creyera».

1. Hechos o consideraciones para este día Primera consideración La Virgen le dice a Juan Diego:

«Que ninguna otra cosa te aflija ni te perturbe». (120 a)
Ella le hace un llamamiento a mantenerse ecuánime ante las dificultades normales y extraordinarias de la vida. Pero esta estabilidad afectiva, emocional, vivencial, es también fruto de la fe en Dios, en María. Renovemos hoy nuestra confianza en Ellos y aprendamos a ubicar las penas y situaciones dolorosas desde la fe y confianza en Dios. Al terminar cada misterio podrían decir la jaculatoria dicha la sesión anterior: Guárdame en tu corazón... (Página 100)

Segunda consideración

María le dice a Juan Diego : «Que no te apriete con pena la enfermedad de tu tío porque no morirá por ahora». (120-b y 122)
iQué consuelo para Juan Diego y qué delicadeza de Ella al serenarlo ante la zozobra tan fuerte que estaba viviendo! María nos invita a esperar en Ella con absoluta certeza. Pidámosle a Juan Diego que nos enseñe a confiar.

Tercera consideración

María le dice a Juan Diego «Ten por cierto que ya está bien tu tío». (120-c)
Ella pone su palabra como garantía de la nueva realidad que le anuncia. Hoy comprendemos que la salud del tío era imprescindible para que después los indígenas comprendieran que Dios los levantaría, consolaría y les daría un porvenir y una esperanza. Ante esto Juan Diego siente que su fe se recupera. Imaginemos el consuelo que habrá recibido con estas palabras de María... ¿Qué confianza le tenemos a Dios después de ver cómo actúa en nuestras vidas, en la historia mundial y en la de nuestro país, sobre todo a través de nuestra Madre? Pidámosle a Ella que nos enseñe a confiar en el Dios de la misericordia...

Cuarta consideración

Juan Diego quedó consolado y tranquilo con las palabras de la Virgen. (121)
María es Madre de la consolación; Ella nos prepara para encontrarnos con el Dios de la vida. Así lo hizo con los apóstoles y discípulos del Señor mientras esperaban la venida del Espíritu Santo. Ella nos ayuda a apaciguar nuestro corazón. Pidámosle que nos enseñe a saber captar los consuelos que Dios nos da todos los días y que sepamos agradecerlos.

Quinta consideración

Juan Diego le pide a la Virgen la señal conveniente para que el obispo crea (123)
Una vez que Juan Diego sale de estar encerrado en su dolor es capaz de dar pasos adelante. Fortalecido por María se siente capaz de cualquier cosa. Pidámosle a Nuestra Consoladora que nos llene de ánimo para seguir al Señor y servir a nuestros hermanos. V. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy
Guía: Ayúdalos, como ayer —la sesión anterior—, a que expresen sus experiencias de consolación; en qué momento se han dado, cómo han sido. Con esto irán aprendiendo poco a poco a distinguir y discernir cómo Dios llama a través de consolaciones o desolaciones a hacer su voluntad,
según lo descubrió y nos ha enseñado san Ignacio de Loyola.

VI Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base: Jn 20, 26-2
Salmo: 96 (95)
Frase del Evangelio: «...Todos quedaban maravillados ante el poder magnífico de Dios». Lc. 9, 43.
Oraciones complementarias del rosario
Guía: Que añadan frases, a las letanías, en que mencionen que María es Reina Consoladora a partir de las experiencias de consolación que Ella ha ido realizando en los presentes. Podrían usar como base las letanías

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Hoy podría ser la oración final: Bajo tu amparo.
Guía: La estrella de mañana se llamará: Reina de la unidad.

1. Ambientación - recepción - animación
2. 
   Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Hoy celebramos —en la Pascua continua- la fiesta de la Presentación de la Santísima Virgen María en el templo. Antiguamente se celebraba como la fiesta de la dedicación que María hizo desde su niñez al Dios del amor. Es una fiesta de alegría, de alianza con Dios. Un día en que Dios aceptó a María según las costumbres antiguas de Israel según dice la tradición. Esta misma costumbre de presentar las niñas y aun niños en el templo a los tres años ha tomado auge en nuestro país y puede ser un momento de gracia para las familias; María favorece muchísimo la unidad familiar y la de amigos. Por otro lado, María, según el relato del Nican Mopohua, aparece como casi una niña ante el ya adulto Juan Diego. Y esta jovencita amada, como él le dice, va a ser la causante de la unión que vivimos los mexicanos según el plan de Dios. Ella es el gran signo de unidad de nuestro país, es la que une a todos los hijos dispersos como unió en el Tepeyac a toda esa variada cantidad de flores. Ella es muy visitada en su casa de México para presentarle a nuestros niños y niñas tanto recién nacidos como más grandecitos. Es Madre de todos y capaz de unirnos. Por eso hoy la celebramos como la Estrella de la unidad: Ella, la Madre de Cristo, Señor de la unidad. Escuchemos el relato de este día —de esta sesión- que contiene una de las partes principales del Acontecimiento Guadalupano, cuando la Virgen manda a Juan Diego por las flores a la cumbre del cerro. Pongamos atención a lo que dice el relato.

Nota: Para los que no hacen la Pascua continua no hacen mención especial de la fiesta de María El guía iniciará donde dice: María, según el relato..

III. Lectura del Nican Mopohua (124-133)

Lector:
124. « Y la reina celestial luego le mandó que subiera a la cumbre del cerrillo, en donde antes la veía;
125. Le dijo: Sube, hijo mío el menor, a la cumbre del cerrillo, a donde me viste y te di órdenes;
126. allí veras que hay variadas flores: córtalas, reúnelas, pónlas todas juntas; luego baja aquí; a mi presencia.
127. Y Juan Diego luego subió al cerrillo.
128. Y cuando llegó a la cumbre, mucho admiró cuántas había, florecidas, abiertas sus corolas, flores las más variadas, bellas y hermosas, cuando todavía no era su tiempo,
129. porque de veras que en aquella sazón arreciaba el hielo;
130. estaban difundiendo un olor suavísimo; como perlas preciosas, como llenas de rocío nocturno.
131. Luego comenzó a cortarlas, todas las juntó, las puso en el hueco de su tilma.
132. Por cierto que en la cumbre del cerrito no era lugar en que se dieran ningunas flores, sólo abundan los riscos, abrojos, espinas, nopales, mezquites,
133. y si acaso algunas hierbecillas se solían dar, entonces era el mes de diciembre, en que todo lo come, lo destruye el hielo».

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

La Santísima Virgen manda a Juan Diego a la cumbre del cerro donde antes se habían visto. (124-125).
El lugar del primer encuentro con alguien de importancia para nuestra vida siempre es un lugar estimado, recordado por nosotros. María estima ese lugar porque allí pudo iniciar el contacto sensible con los indígenas y con todos los pobladores de América y con cuantos la visitamos en el Tepeyac. Para nosotros, por lo mismo, el Tepeyac es sitio de bendición, de alianza con Dios y María. Contemplemos esta escena y diálogo. Pensemos y sintamos que con María todo se nos facilita. Subamos con Juan Diego por las flores de Dios y de María.

Segunda consideración

La Virgen precisa a Juan Diego lo que tiene que hacer con las flores que va a encontrar. (126)
María le dice a Juan Diego que recoja todas las flores, que las junte. En la narración el autor usa tres verbos que según las tradiciones culturales indígenas están significando que allí hay un mensaje que después llevará Juan Diego a Zumárraga. Nuestra vida está hecha de amuchas situaciones y acontecimientos dispersos que luego no sabemos juntar ni podemos encontrarles el hilo. Pidámosle a Nuestra Madre que nos ayude a unificarnos cada uno; que encontremos el
hilo clave del plan de Dios sobre cada uno de nosotros y llevemos a otros a la unidad.

Tercera consideración

Juan Diego sube al cerro como le indicó la Virgen. (127).
Subir a los cerros, en las culturas antiguas mesoamericanas, era equivalente a acercarse a Dios, al que está en las alturas y mira desde allí. Para los indígenas de entonces subir a una pirámide era para realizar un oficio sacerdotal. Antes, en el Tepeyac, se veneraba allí a la Diosa Tonantzin y sólo los sacerdotes subían a ofrecerle el culto... Esta invitación de María para Juan Diego le pudo haber significado que subía para ejercer su sacerdocio laical como mediador de una nueva alianza. Imaginemos la expectación de Juan Diego y subamos con él. ¿Cómo ejercemos cada uno nuestro sacerdocio bautismal o ministerial?

Cuarta consideración

Juan Diego encuentra las flores que le da la Señora del cielo como señal (128-130)
Imaginemos este encuentro; lo que habrá sentido Juan Diego y cómo se habrá extasiado ante las flores sobre todo por el significado simbólico ya que las flores, en la concepción indígena del universo, eran como expresiones del corazón de Dios. Sentían que Dios se les daba y manifestaba a través de las flores. En realidad, entonces, Dios se le da a Juan Diego y a sus indígenas, por medio de María, como el don más precioso. Gocemos con Juan Diego este encuentro tan especial para él, para los indígenas de su tiempo y para nosotros. Pidámosle a María que sepamos vivir unidos siempre con el Dios de la gran alianza, El que sí salva al hombre.

Quinta consideración

Juan Diego corta las flores y las pone en su ayate. (131-133)
Gocemos con Juan Diego este don de Dios; y este signo de gran verdad.. Las flores significaban también, en los simbolismos indígenas, la verdad. Así, María le entrega a Juan Diego la verdad. De esta manera él experimenta que María le dice y le da la verdad; Ella es fiel. iCómo se habrá sentido feliz y seguro con la Verdad de María! Como nos dice san Juan, vivamos la verdad y fidelidad.

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Procura que expliciten por qué puede ser para nosotros muy importante y pedagógico darle a las flores el sentido que le daban los indígenas pues las usamos constantemente con las mamás, novias, maestras, en las ceremonias... Así podríamos revalorar el ofrecimiento de flores de los niños a María en Mayo. Sería un compromiso de vivir en verdad el amor de Jesús y María. Que den testimonio de cómo María los ha ido uniendo en diversas situaciones de su vida. ¿En verdad Ella une a su familia; cómo?

1. Lecturas bíblicas y comparación con Io leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base: Hechos 2, 42-47
Salmo: Eclesiástico (Sir.) 24, 5-31
Frase del Evangelio: «Padre, que todos sean uno como Tú Padre, estás en mí y yo en Ti. Que sean uno en Nosotros; así el mundo conocerá que Tú me has enviado» Jn 17,21

VII Oraciones complementarias del rosario

Guía: Que añadan a las letanías #4 (pág. 90) frases que destaquen la unidad que va haciendo María entre nosotros. Podrían añadir algo sobre cómo Ella nos da en Cristo la verdad, la unidad, cómo es fiel... Podrán decir en la letanía en lugar de: ruega por nosotros: Unenos, Madre Nuestra.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Como oración final lee la oración sacerdotal de Jesús en la Ultima cena en la que le pide al Padre que todos seamos uno. (Jn. 17, todo el capítulo). Antes de la lectura explícales cómo la unidad de los cristianos es el signo máximo que pidió Jesús a los suyos para que otros creyeran en El. Exhórtalos a que se comprometan a vivir buscando siempre la unidad y
la verdad.
La estrella de mañana se llamará: Reina de la confianza

1. Ambientación - Recepción - Animación
2. Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

María confió en Dios. Ella recibió como señal de la certeza de la verdad revelada por el ángel Gabriel que su prima Isabel estaba embarazada... Ella experimentó que Dios confió en Ella Hoy como buena Madre nos conoce a sus hijos, nos educa y confía en nosotros como Dios, como Jesús. Ella le va a confiar a Juan Diego la señal y él responderá a esta confianza. Escuchemos el relato que
nos narra cómo Juan Diego bajó del cerro con las flores y cómo María se las confió para llevarlas a/ obispo. Por ser María Maestra de la confianza este día la estrella es: Reina de la confianza

III. Lectura del Nican Mopohua (134-139)

Lector:
134. «Y en seguida (Juan Diego) vino a bajar, vino a traerle a la Niña celestial las diferentes flores que había ido a cortar,
135. Y cuando las vio, con sus venerables manos las tomó; 136. luego otra vez se las vino a poner todas juntas en el hueco de su ayate, le dijo:

137. 
     Mi hijito menor, estas diversas flores son la prueba, la señal que llevarás al obispo.
     138, De mi parte le dirás que vea en ellas mi deseo, y que por ello realice mi querer, mi voluntad,
     139. Y tú, tú que eres mi mensajero.., En ti absolutamente se deposita la confían
138. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego le lleva las flores a María. (134)
Imaginemos la escena: Juan Diego ha recogido las flores; se las lleva a María con el corazón acelerado y contento. iQué alegría habrá tenido! Vivamos este momento unidos a él y pidámosle a María que haga nuestra su alegría.. ¿Sabemos gozarnos en los dones de Dios y se los agradecemos con mucho cariño? ¿Qué hubiéramos hecho y qué sentiríamos si nosotros hubiéramos llevado
las flores a María? ¿Cómo hacemos los encargos que otros nos encomiendan?

Segunda consideración

La Santísima Virgen ve las flores, las toma y las pone en el ayate de Juan Diego. (135-136)
iQué escena y qué ternura de María para con su querido Juan Diego! iCómo se sentiría él de que en su ayate -que era como si fuera su persona, según la cultura indígena- María hubiera echado las flores tocadas por sus manos..! Dejémonos en las manos de María; sintamos que esas manos, las más benditas manos femeninas, nos tocan como a las flores del Tepeyac..

Tercera consideración

María le dice a Juan Diego: «Estas flores son la señal que llevarás al obispo(137)
iQué de María para su hijo obispo! IQué lenguaje tan perfecto para los indígenas al decirles, que, a través de esta señal, Ella se compromete con ellos! ¿Qué señales de compromiso vivimos con el mundo indígena? ¿Qué hacemos con ellos -desde su manera de concebir y vivir la vida- y por ellos, por su exaltación y liberación?

Cuarta consideración

 
María le explicita el encargo a Juan Diego. (138)
Ella quiere que el obispo proceda diligentemente en lo que le ha pedido; quiere, que no le quede duda, por eso le dice: «Le dirás que en ellas vea mi deseo para que realice mi voluntad». ¿Qué tan sintonizados estamos con María? ¿Qué querrá ella de nosotros? ¿Se lo hemos preguntado? ¿Nos hemos ofrecido a servir

Quinta consideración

María le dice a Juan Diego: «Tú eres mi mensajero, en ti deposito toda mi confianza.» (139)
iQué alegría, y qué responsabilidad! Con estas palabras Ella hace entrever que el mensaje que debe llevar es porque Dios lo quiere y que el y Ella confían en él. Sintamos la alegría y fortaleza que habrá sentido Juan Diego. ¿Podrán Dios y María confiar en nosotros realmente como en Juan Diego para apoyar su plan de salvación para todos? ¿Cómo podemos disponernos para responder esa confianza...?

1. 
   Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a que sientan cómo María confió en Jesús y cómo el en su Madre; y que lleguen a sentirse felices de que Dios y María confíen en nosotros. ¿Cómo hemos de confiar, nosotros, en Ellos?

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua.

Lectura base: Mt. 14, 13-21
Salmo: Apoc. 11, 17-18 y 12, 10 (b) - 12 (a) Frase del Evangelio: «Vas a quedar embarazada y darás a luz un hijo...yo soy la servidora del señor...» Lc. 1,31 y 38

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Hoy podrían rezar la letanía #4(Pág.90) con la respuesta: En Ti confiamos, en la primera parte; y enséñanos a confiar, en la segunda.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Podrían rezar, después de la oración final ordinaria y como signo de confianza, la primera oración de la comunidad cristiana,desde el siglo IV a María: Bajo tu amparo. Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios, no desprecies las humildes súplicas que te hacemos en nuestras necesidades, antes bien, líbranos de todos los peligros, Virgen Gloriosa y Bendita.
Guía: Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. Todos: Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.
La estrella de mañana será: Obediente.

. Ambientación - Recepción - Animación

1. 
   Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Ayer —la sesión pasada— estuvimos viendo cómo la Virgen le dice a Juan Diego que en él depositaba su confianza Hoy veremos que Ella le pide que sólo ante el Obispo despliegue su ayate para darle la señal; y la petición se la hace como un mandato para que él obedezca... Quizá nos parezca rara esta expresión fuerte de María: «Mucho te mando con rigor. Aparece aquí como Señora, como quien sabe lo que está pidiendo, como quien sabe de la fragilidad humana y de la importancia de que todo salga bien para mayor gloria de Dios.

Ella, la Esclava del Señor, la que sí sabe obedecer, sabe lo que esto cuesta, pero sabe también, que al final de cuentas, Dios tiene la razón. Por eso la estrella de hoy será: Obediente, porque Cristo, María, Juan Diego, han vivido la obediencia que enaltece, la obediencia a Dios, a su plan de salvación...

Hoy celebramos en México — en la Pascua contínua la fiesta —aniversario- del martirio del P. Miguel Agustín Pro Juárez, sacerdote jesuita, fusilado en México en 1927 ,por fidelidad a Dios,en la época de la persecución religiosa. Un hombre que obedeció a Dios y a quien hoy celebramos con alegría en todo el país como un verdadero héroe de Cristo Rey, el Siervo de los siervos, el que se hizo obediente hasta la muerte y muerte de cruz.

 Que el ejemplo y testimonio del P. Pro nos impulsen a seguir al Señor como sus testigos. Escuchemos el relato de este día.

Nota: Para los que no hacen la Pascua contínua no mencionan esta celebración pues realizarán la sesión en otra fecha.

III. Lectura del Nican Mopohua (140-146)

Lector:
Le dijo entonces la Virgen a Juan Diego:

140. 
     «Y mucho te mando con rigor que nada más a solas, en la presencia del obispo ,extiendas tu ayate, y le enseñes lo que llevas.
141. 
     Y le contarás todo puntualmente, le dirás que te mandé que subieras a la cumbre del cerrito a cortar flores, y cada cosa que viste y admiraste,
142. 
     Para que puedas convencer al Gobernante sacerdote, para que luego ponga
     lo que está de su parte para que se haga, se levante mi templo que le he pedido»
143. Y en cuanto le dio su mandato la Celestial Reina, vino a tomar la calzada, viene derecho a México, ya viene contento.
     144. Ya así viene sosegado su corazón (de Juan Diego), porque vendrá a salir bien, lo llevará perfectamente (a cabo todo lo que la Virgen le encomendó).
     145. Mucho viene cuidando lo que está en el hueco de su vestidura, no vaya a ser que algo tire;
     146. Viene disfrutando del aroma de las diversas preciosas flores».
     
     
144. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

María le manda a Juan Diego que solamente despliegue su ayate ante el Señor obispo. (140)
La Virgen sabe que Juan Diego va a tener presiones para mostrar antes de tiempo, lo que Dios, en su Providencia, quería que sólo sucediera ante el obispo. El tenía calculado todo... A veces la voluntad de Dios no la entendemos pero El sabe mejor que nadie cuándo y con quiénes hemos de hacer algo.- ¿Cómo anda nuestro deseo de hacer la voluntad de Dios? ¿Qué tan bien sabemos discernir cuál es la voluntad de Dios para nosotros? - Pidámosle a María que sepamos discernir la voluntad del que sólo quiere lo mejor para todos,

Segunda consideración

María le dice a Juan Diego que le cuente con exactitud al obispo lo que hizo, vio y admiró. (141)
María le da indicaciones claras a Juan Diego para que sea un buen testigo. Sólo siendo buenos testigos podemos ser mensajeros del Evangelio. ¿Qué hemos de hacer, cómo nos hemos de preparar para ser buenos testigos y mensajeros de Dios y de María?

Tercera consideración

María le dice a Juan Diego que todo esto que hace es para que el Obispo sea convencido y así le haga su templo. (142).
La labor de Juan Diego no era fácil: decía llegar a convencer al Obispo; la Virgen le dice: «Hazle oír, hazle sentir mi voluntad». Para don fray Juan de Zumárraga tampoco iba a ser fácil creer y poner por obra la construcción del templo. ¿Cómo creer cuando en ese tiempo estaba penado hablar de apariciones y cosa que se le pareciera..? Era la época de la Inquisición... A veces seguir los planes
de Dios y las exigencias de Nuestra Señora y Madre por el Reino no son fáciles de llevar. ¿Qué tan dispuestos estamos para buscar el Reino de Dios? ¿Hasta dónde nos vamos a comprometer con Dios y con los hermanos para que ya vaya llegando ese Reino traído por Cristo? María, Madre Nuestra, enséñanos a construir con Jesús su Reino...

Cuarta consideración

Juan Diego salió con las flores hacia México ya contento, con el corazón tranquilo y lleno de esperanza. (143-144)
iQué feliz se habrá sentido al saber que su tío ya estaba bien y que ahora sí el deseo de la Señora del cielo podría llevarse a cabo! Gocemos con él y dejemos que Dios y Nuestra Madre alegren y tranquilicen nuestro corazón.

Quinta consideración

Juan Diego cuidó con esmero las flores y disfrutó de su fragancia mientras caminó rumbo a México-Tenochtitlán. (145-146)
Para Juan Diego llegó el gozo y la alegría gracias a la Virgen que le dio la señal; ¡cómo habrá gozado el camino con el recuerdo del encuentro con María. Los dones de Dios, nuestro cuerpo, lo que somos y tenemos, lo que nos sucede de bueno son regalos de El; ¿qué tanto los cuidamos? ¿Cómo administramos los dones y gracias de Dios? ¿Qué tanto apreciamos a los demás como don de Dios para nosotros? Apreciemos a María, Flor de flores de Dios para todos...

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Escuchemos la Sagrada Escritura para que nos ilumine respecto al deseo de vivir y caminar en e/ amor traducido en obediencia al Padre. Muchas veces tenemos problemas con la autoridad porque se nos manda mal, porque no nos han hecho atractiva la obediencia, porque creemos que perdemos libertad. ¿Qué aprendemos de esta obediencia que le pide María a Juan Diego?. Ella, la Obediente Perfecta, nos llevará, por la obediencia de la fe, a nuevos, insospechados
caminos...

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base: Fil. 2, 5-11
Salmo: 118, 1-8
Frase del Evangelio: «Padre nuestro... Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo...» Mt. 6,10 b.

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: La letanía #4 con la respuesta: Madre Nuestra, enséñanos a obedecer.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Invítalos a orar el Padre Nuestro muy pausadamente, depositando toda nuestra confianza en el Padre.
La estrella de mañana será: Resistente

1. Ambientación - Recepción - Animación
2. 
   Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Hoy es un día en que tendremos muy presente al Señor Jesús, Nuestro Maestro, pues aprenderemos de El a resistir, a llevar con paciencia los sufrimientos que otros nos dan o nosotros nos provocamos. Juan Diego va a casa del Obispo muy feliz con las flores, la señal de María.

 Sin embargo, los servidores del Obispo no le harán caso. Imaginemos la frustración de Juan Diego al ver que la voluntad de la Señora del cielo no se puede cumplir por culpa de personas ignorantes y descorteses que no son capaces de comprender la importancia de los mensajes de Dios; incapaces de comprender la dignidad de cualquier persona.

Por otra parte, pensemos también todo lo que María tuvo que resistir, fuerte y valiente, durante la vida de Jesús: insultos, burlas, calumnias, malos tratos... ¡lo que no habrán dicho en su tiempo de Ella..! Lo que muchos siguen insultándola ahora... Y Ella, con todo su amor, sigue esperando, resistiendo como el mundo indígena que ha soportado tantas marginaciones, insultos, malos tratos. Aprendamos de ellos a resistir, a ser fieles a nosotros mismos, a no dejarnos vencer por
las calamidades.

Hoy contemplaremos a María como Estrella Resistente, Fuerte y Valiente. Por eso la estrella de hoy es: Resistente.

III. Lectura del Nican Mopohua (147-159)

Lector:
147. «Cuando vino a llegar al palacio del obispo, lo fueron a encontrar el portero y los demás servidores del sacerdote gobernante,
148. y les suplicó que le dijeran cómo deseaba verlo(a), pero ninguno quiso; fingían que no le entendían, o tal vez porque aún estaba muy oscuro,(b)
149. o tal vez porque ya lo conocían que nomás los molestaba, los importunaba,
150. y ya les habían contado sus compañeros, los que lo fueron a perder de vista cuando lo fueron siguiendo.
151. Durante muchísimo rato estuvo esperando la razón.
152. Y cuando vieron que por muchísimo rato estuvo allí, de pie, cabizbajo, sin hacer nada, por si era llamado, y como que algo traía, algo llevaba en el hueco de
su tilma luego pues, se le acercaron para ver qué traía y desengañarse.
153. Y cuando vio Juan Diego que de ningún modo podía ocultarles lo que llevaba y por eso lo molestarían, lo empujarían o tal vez lo aporrearían, un poquito les vino a mostrar que eran flores.
154. Y cuando vieron que todas eran finas, variadas flores y que no era tiempo entonces de que se dieran, las admiraron muy mucho, lo frescas que estaban, lo abiertas que tenían sus corolas, lo bien que olían, lo bien que parecían.
155. Y quisieron coger y sacar unas cuantas;
156. tres veces sucedió que se atrevieron a cogerlas, pero de ningún modo pudieron hacerlo,
157, porque cuando hacían el intento ya no podían ver las flores, sino que, a modo de pintadas, o bordadas, o cosidas en la tilma las veían.
158. Inmediatamente fueron a decirle al gobernante obispo lo que habían visto;
159. cómo deseaba verlo el indito que otras veces había venido, y que ya hacía muchísimo rato que estaba allí aguardando el permiso, porque quería verlo».

1. Hechos o consideraciones para este día

Nota: La jaculatoria propia para este día:
Guía: iMadre llena de dolores, acuérdate que en la cruz: Todos: Te nombró tu Hijo Jesús: ¡Madre de los pecadores!

Primera consideración

Juan Diego llega a la casa del Sr. Obispo. (147).
Después de haber caminado gozoso con las flores durante casi una hora de recorrido del Tepeyac a la casa del obispo Juan Diego llega a la casa de éste a cumplir el encargo de la Señora del cielo. Imaginemos con qué alegría y gusto habría llegado y habría tocado todavía siendo excesivamente temprano. El amor no sabe esperar muchas veces... ¿Qué tal nos sentimos cuando estamos a punto de terminar algo que nos ha costado trabajo y que sabemos va ser útil o va a servir a otros? Acompañemos a Juan Diego en esta alegría. ¿Qué tal sabemos acompañar a otros en sus alegrías y éxitos?

Segunda consideración

Juan Diego suplica a los servidores del obispo que lo llamen. (148-a).
Juan Diego había llegado muy temprano y muy quitado de la pena pensando que le harían caso de inmediato los servidores del obispo. cómo van a oponerse, pensaría el, si llevaba nada menos que el recado de la Señora del cielo! El traía enormes deseos de terminar su misión... Cuando queremos dar buenas noticias a otros y vamos a sus casas para darles los recados ¿Cómo esperamos que nos reciban? Cuando llega alguien a tocar a nuestras casas, ¿Cómo lo recibimos?

Tercera consideración

Los servidores del obispo no quieren recibir a Juan Diego. (148-b al 150)
Imaginemos el contraste que vive Juan Diego en ese momento; por un lado, iba a hacer un servicio con mucho amor en favor de su tío, pero la Virgen le que haga este otro.

 Ahora es interferido por los servidores del obispo. iCómo se habrá sentido de mal! Muchas veces nos habrá pasado algo por el estilo... pidamos por todos aquellos que son heridos en su esperanza por la falta de educación y de amor de otros; ¡que no seamos nunca de éstos!

Cuarta consideración

 Juan Diego espera largo rato que los servidores avisen al obispo. (151- 152)
iQué sentiría Juan Diego: ¡otra vez en la misma casa del Sr. Obispo tiene dificultades! Antes había sido con el mismo Sr.- Obispo; ahora con sus servidores. Pero espera en paz y con humildad, no se desespera, Es buen discípulo de Jesús, ¿Cómo reaccionó el Señor ante los que lo hirieron y crucificaron? Cuando nos tratan de un modo parecido al de estos hombres ¿cómo reaccionamos? Aprendamos del Señor, de María y de Juan Diego a esperar, a perdonar, a resistir las afrentas por amor, por congruencia, por consideración... Pero sepamos también pedir que se nos trate con dignidad, con justicia.

Quinta consideración

Los servidores se dan cuenta de que Juan Diego lleva flores, y asombrados, van a decírselo al obispo. (153 al 159).

Hasta que sucede algo fuerte estos hombres cumplen con su deber. iCuánta gente tiene que sufrir tanta espera y malos tratos por no tener palancas...! iQué poca consideración hay en general para tratar bien a otros, no se diga a los pobres, a los indígenas, a los campesinos...! ¿Somos de los que tratan así a otros? ¿Fomentamos el que se hagan los servicios sólo cuando hay palancas o se dan
mordidas...? ¿Denunciamos los malos servicios, los chantajes y extorsiones? ¿Qué dirá Jesús de esta manera de tratarnos entre nosotros?

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado

Guía: Ayúdalos a que descubran que hay que esperar mucho y trabajar y sufrir para que el Reino del Señor llegue a nosotros. Que descubran en Jesús el modelo de resistencia y sufrimiento cristiano. María también resistió va lienternente en las diversas circunstancias aflictivas que vivió con José, Jesús y la Iglesia naciente. Aprendamos de Ella a saber resistir...

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base; Lc. 22, 63-71 y 23, 1-46
Guía: Invítalos, antes de la lectura larga de hoy, a contemplar con amor a Jesús que sufre su pasión y muerte por amor.

Salmo: 53, 1 - 12
Frase del Evangelio: a elegir: «Junto a la cruz de Jesús estaba su Madre...» Jn 19,25
«Lo que hicieron con algunos de estos más pequeños, que son mis hermanos, lo hicieron conmigo». Mt. 25, 40.

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Que introduzcan en las letanías #5 algunos dolores de Jesús o de María..; están enseguida.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

La estrella de mañana se llamará: Respetuosa.

Letanías Guadalupanas (5)

Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Padre que siempre nos entregas lo mejor de cuanto existe.
Madre de las esperanzas cumplidas.
Madre de los que recobran el ánimo de vivir.
Madre de las buenas noticias.
Madre de los que hacen los recados en todos los pueblos.
Madre de los que son testigos del Evangelio para sus hermanos.
Madre de los que se arrepienten y llegan a creer.
Madre de los prodigios de la gracia de Dios.
Madre que conviertes a los incrédulos al Evangelio.
Madre de todos los que se alegran y dejan sorprender por el amor y el poder de Dios.
Madre de los que te contemplan con regocijo y entusiasmo.
Madre de los que captan la belleza de Dios a través de Tl.
Madre de todos los que tratan con respeto los acontecimientos y signos de Dios.
Madre de todos los que te servimos y de los que sirven a Dios y a su pueblo.
Tú, alegría de toda'la tierra.
Tú, la que nos entregas al Sol de justicia y santidad.
Tú, la que nos acunas como pueblo de Dios. Enséñanos a amar
Tú, que derribas cualquier muro para darnos a conocer al Verdadero Dios por quien se vive.
Tú, la discreta figura materna que Dios escogió como signo de Luz y Vida para América.
Tú, la que nos tocas el corazón para que deseemos conocer, amar y servir más al señor Jesús.
Tú, Portadora del Espíritu de Dios para nuestras tierras.
Tú, Consuelo, Protección y Reivindicación para el indígena.
Tú, que conviertes a las personas más sofisticadas en servidoras.
Tú, la Preciosa siempre Virgen y Madre Nuestra, Santa María de Guadalupe.
Tú, la Hija predilecta y Rosa Primorosa del Padre.
Tú, Regocijo, Alegría y Descanso de la Gloriosa Trinidad. Enséñanos a servir
Reina de todas las flores, estrellas y montañas.
Reina de los lagos y de las aguas.
Reina de todas las combinaciones armónicas de la tierra.
Reina de todas las ciencias del cosmos.
Reina de todas las ciencias del hombre.
Reina de todas las escuelas de filosofía promotoras del hombre.
Reina de todas las artes.
Reina de los medios de comunicación e impresión.
Reina de los instrumentos fotográficos.
Reina de todos los telares, hilados y tejidos.
Reina de todas las fábricas.
Reina de los materiales que anuncian tu presencia.
Reina de las ciencias de Dios.
Reina de todas las pisadas que anuncian la verdad de Dios.
Reina de las manos que tocan a las puertas para anunciar el Evangelio de Jesucristo.
Reina y Madre de nuestra nación.
Reina y Maravilla de toda esta América.
Reina y Madre de la Iglesia.
Reina de los Ángeles... Patriarcas... Profetas...
Cordero de Dios..

1. Ambientación - Recepción - Animación
2. Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Hoy contemplaremos cómo Juan Diego llega, con mucho respeto y cortesía, a presencia del obispo para llevarle la señal de la Reina del cielo después de haber esperado tanto tiempo que lo recibiera. Se inicia un largo y bello diálogo entre ellos. Aprendamos de Juan Diego a ver con gran respeto a los demás. Jesús nos enseña en todo el Evangelio a respetar a las personas, a darles su lugar, a no presionarlas más allá de lo que puedan dar. María trata también a Dios, a Juan
Diego, a todos nosotros con gran respeto y cariño.

 Si vivimos estos valores tan humanos y tan cristianos otros hermanos entenderán que Dios está atrás de nosotros. Para ellos seremos señal de que somos testigos del amor y de la verdad, del mismo respeto que Dios tiene a cada uno. Hoy la estrella lleva por nombre: Respetuosa, porque María es prodigio de respeto para Dios y para todos.

 Escuchemos y participemos activamente este día. Escuchemos el inicio del relato que
hace Juan Diego al Obispo de su entrevista con la Virgen.

III. Lectura del Nican Mopohua (160-164)

Lector:
160. «Y el gobernante obispo, en cuanto lo oyó, dio en la cuenta de que aquello era la prueba para convencerlo, para poner en obra lo que solicitaba el hombrecito.
161. Enseguida dio orden de que pasara a verlo.
162. Y habiendo entrado, en su presencia se postró, como ya antes lo había hecho
163. Y de nuevo le contó lo que había visto, admirado, y su mensaje.
164. Le dijo: -»Señor mío, gobernante, ya hice, ya llevé a cabo según me mandaste

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

El señor obispo cae en la cuenta, por lo que le dicen sus sirvientes, que Juan Diego le trae la señal que le pidió. (160)
iCómo se habrá sentido el obispo ante la respuesta de la Virgen! iQué curiosidad se habrá despertado en él de conocer la señal! ¿Sabemos captar los quenos que Dios nos ofrece para nuestro bien? ¿Cómo reaccionamos ante ellos?

 Segunda consideración

El Obispo manda llamar a Juan Diego para ver qué respuesta le trae, (161 )
El Obispo reacciona positivamente ante lo que sus servidores le han dicho de Juan Diego. ¿Sería por convicción, por curiosidad, caridad o alguna otra razón? Nosotros, ¿cómo reaccionamos cuando nos hablan de otras personas? ¿Qué tanto estimamos y valoramos los testimonios que nos dan algunas personas? ¿Qué tan abiertos nos manifestamos para creerles a otros?

Tercera consideración

Juan Diego saluda con reverencia al señor Obispo. (162).
Los indígenas siempre han sido muy respetuosos de otras personas, hasta de los enemigos. Y nosotros ¿qué tan respetuosos somos de todos los hermanos que el Padre nos ha dado? ¿Qué tanto aprecio tenemos a nuestra jerarquía? ¿somos como Juan Diego?

Cuarta consideración

Juan Diego le cuenta al señor Obispo lo que había vivido y visto y el mensaje de la Virgen. (163)
Imaginemos este momento tan importante para Juan Diego y para el señor Obispo. Están frente a frente aquellos que Dios, a través de María, ha unido para ser testigos de la verdad del Gran Acontecimiento. Contemplemos esta escena y pidámosle a Ellos que lleguemos a ser testigos del amor, de la resurrección y vida que nos da Cristo, el Señor,

Quinta consideración

Juan Diego le dice al Obispo que ya hizo lo que le mandó. (164)
Cuando alguien tiene interés en servir a Dios y al prójimo hace lo que tiene que hacer. Aquí Juan Diego nos enseña a respetar la autoridad legítima, a seguir las observaciones y peticiones de quienes tienen la delegación de Dios para esto. ¿Cómo anda nuestro aprecio, respeto, colaboración ante las autoridades y superiores legítimos que el Padre ha puesto para nuestro bien? ¿Qué tan dóciles, activos y eficientes somos ante ellos para contribuir a que el Reino de Dios esté presente ya en esta tierra?

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Pregúntales qué valor se da ahora al respeto a los demás. Que den vivencias y testimonios del respeto que han visto vivir a algunas personas; que descubran las faltas de respeto a las personas en los que viven e en los medios de comunicación. Terminen proponiendo acciones
para favorecer el respeto de unos a otros.

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Guía: Veamos el parecido entre el respeto de Juan Diego al Obispo y el de San Juan a San Pedro. Y también como los reconozcamos los grandes signos de salvación que el Dios de la eterna gloria nos da para clarificarnos en nuestra fe.

Lectura base: Jn. 20, 1-10
Salmo: 34 (33)
Frase del Evangelio: «...María, (la hermana de Marta) sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra...» Lc. 10, 39(b)

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Letanía #5, está en la sesión anterior.

VIII. Oración final - Canto - Acuerdos - Despedida

Guía: Invítalos a que procuren vivir todos en gran respeto a los demás como Dios y María nos enseñan a respetar a todos.
La estrella de mañana será: Amada.

1. Ambientación - Recepción - Animación
2. Ubicación - Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: En este día —en esta sesión- vamos a contemplar a María recordando en cada consideración los títulos, nombres o calificativos tiernos y hermosos que le da Juan Diego a Ella, al estarle hablando al señor Obispo. De todos ellos destaca aquí como nuevo y profundo el título de: Amada. Y en verdad, María es la más amada de Dios, la amada Madre del Señor Jesús, Nuestra Madre Amada. ¿Quién ha sido más amada que Ella? Por eso el título de la estrella de hoy es: Amada.
Contemplémosla durante esta oración con todo nuestro amor mientras escuchamos el relato.

III. Lectura del Nican Mopohua (165 a-d)

Lector:

Le dijo Juan Diego al Sr. Obispo:
165. «Fui a decirle a la Señora, mi Ama (a), la Niña celestial (b), Santa María (c), la Amada Madre de Dios (d), que pedías una prueba...»

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego llama a María: la Señora, mi Ama. (165-a).
iEn qué gran estima tiene Juan Diego a María: es Su Señora y Su Ama! Es decir, él se sabe y se siente servidor de María! i Y vaya que lo fue y sigue siendo! ¿Cómo nos sentimos nosotros ante Ella? ¿Podemos decirle en verdad: Tú eres mi Señora y mi Dueña? ¿De veras queremos ser hoy y para siempre servidores de María?

Segunda consideración

Juan Diego nombra a María: la Niña, la Jovencita celestial. (165-b)
iQué dulzura de Juan Diego llamar así, con tanta ternura, a María! Y en verdad acierta porque María se presenta en el Tepeyac como una muchachita dulce y celestial. Ella ha adquirido de Dios Su juventud y belleza eterna... Contemplemos extasiados a María, la reina, la jovencita y niña del Tepeyac. Pidámosle especialmente por todas las niñas y jóvenes de México y del mundo.

Tercera consideración

Juan Diego llama a la Virgen: Santa María.(165-c).
Ella es la Hija predilecta del Padre, la Madre amorosísima del Salvador,Templo y Gloria del Espíritu Santo. Toda Santa tenía que ser, ya que es la criatura mejor relacionada con Dios, el Dador de vida. El nos pide que seamos santos, dignos familiares de El y de Ella. Pidámosle a Nuestra Santa Madre nos ayude a vivir santamente. ¿Qué tan dispuestos estamos para vivir como santos, para agra-
dar siempre a Dios y servir a los demás?

Cuarta consideración

María -según le dice Juan Diego al Obispo- es la Amada Madre de Dios. (165-d).
Imaginemos el amor que el Padre le tiene a su hija predilecta. Sintamos el amor que el Hijo le tiene a su Madre. Inflamémonos en el amor que el Espíritu Santo le tiene a la que es su obra perfecta, a la más dócil y servicial de sus templos vivos. Toda la Iglesia ama a María. Con razón la llama Juan Diego la Amada Madre de Dios.

El la amó con todo su corazón. Estuvo a su servicio en la ermita
del Tepeyac 17 años después de las apariciones y la dio a conocer a un número enorme de indígenas. ¿Cómo está nuestro amor por María? ¿Es realmente amada por nosotros cada día de nuestra vida, o nuestra devoción sólo se la expresamos en sus fiestas o cuando estamos de humor? ¿De veras queremos servirla como Madre nuestra? Pidámosle a Jesús y a Juan Diego que nos enseñen a amarla y servirla.

Quinta consideración

Juan Diego se expresa de María diciendo que es la preciosa Madre de Dios. (165-d).
Itza Tonantzin significa en la cultura indígena nahua: preciosa Madre o reverenciada, amada Madre. En verdad que es Preciosa, la más Preciosa de toda la creación, la Mujer más bella que existe. Deleitémonos con Su presencia, dejémonos fascinar por Su hermosura. Alabemos a Dios que es capaz de haber hecho a quien le decimos: Bendita entre todas las mujeres. iSí, Bendita tú la criatura más Perfecta y Maravillosa de Dios!

1. 
   Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a que comenten y expresen todo su amor por María. Que cuenten cosas concretas de cómo la aman, qué hacen por Ella, cómo la dan a conocer, cómo la celebran...

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua.
   Guía: En la Antigua Alianza van apareciendo mujeres famosas que van a ayudar al pueblo de Israel a vivir la alianza con Dios, E/ Antiguo Testamento canta las glorias de las mujeres perfectas, bellas, buenas, como Ester y Judit que son como un anticipo de lo que va a ser en plenitud la Virgen María, la Amada Madre de nuestro señor Jesucristo y de nosotros. Escuchemos las siguientes lecturas para sacar provecho.

Lectura base: Ester 15, 4-15
Salmo: Prov. 31, 10-31
Frase del Evangelio: «Feliz la mujer que te dio a luz y cuyos pechos te alimentaron...» LC 11 , 27

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Ayúdalos a que compongan la letanía a María inspirados por los títulos que le da Juan Diego y por el ejemplo de lo que aparece en la Biblia o en las vidas de las santas cristianas. Si no es posible hacerlo del modo propuesto puedes usar la letanía #5, Pág. 119.

VIII Oración final Canto - Acuerdos - Despedida

Hay una oración famosa que se llama en latín: Tota Pulchra es María; la tenemos a la vuelta de la página. Sería bueno aprendérnosla.
La estrella de mañana será: Dialogante.

Todos: Toda hermosa eres, María (Tota Pulcra es, María)
Toda hermosa eres, María,
y la mancha del pecado original no está en Ti.
Tú eres la gloria de Jerusalén,
Tú la alegría de Israel,
Tú el honor máximo de nuestro pueblo.
Oh, María; oh, María.
Eres Virgen prudentísima,
Nuestra Madre clementísima.
Ruega por nosotros,
intercede por nosotros
ante Nuestro Señor Jesucristo.

Guia: Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios

Todos: Para que seamos dignos de alcanzar las divinas gracias y promesas de Nuestro Señor Jesucristo.

Ambientación — Recepción — Animación

Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Vamos a seguir meditando estos días el diálogo íntimo, abierto y sencillo que establece Juan Diego con el Obispo Zumárraga. Es un diálogo bello, fuerte, tierno, lleno de colorido en que Juan Diego le va contando cómo la Virgen le dio la señal que le trae de su parte. Y todo este diálogo a pesar de la dificultad de la lengua. Pero María les ha enseñado a dialogar como hermanos, a aceptarse recíprocamente como son. cómo no va ser modelo nuestro la que permitió a Dios el diálogo más bello con la humanidad a través de Su sí! Ella estableció el diálogo de culturas entre flores y cantos desde el Tepeyac. Ella, modelo de personas dialogantes, es la estrella dialogante que nos enseña este arte tan necesario y difícil para todos los demás. Por eso nuestra estrella de hoy se llama: Dialogante. Vamos a escuchar el relato de Antonio Valeriano.

III. Lectura del Nican Mopohua (165 e— 169)

Lector:
Juan Diego le dice al obispo:
165. «así fui a decirle (a la Virgen) que pedías una prueba para poder creerme, para que le hicieras su casita sagrada en donde te la pedía que la levantaras;
166. Y también le dije que te había dado mi palabra de venir a traerte alguna señal, alguna prueba de su voluntad, como me lo encargaste.
167. Y escuchó bien tu aliento, tu palabra, y recibió con agrado tu petición de la señal, de la prueba, para que se haga, se verifique su amada voluntad.
168. Y ahora, cuando era todavía de noche, me mandó para que otra vez viniera a  
169. y le pedí la prueba para ser creído, según había dicho que eme la daría, e inmediatamente te lo cumplió».

1. Hechos o consideración para este día

Primera consideración

Juan Diego y el obispo están ya en la cita definitiva. El obispo lo ha recibido con curiosidad. Pensemos la complicación entre ellos pues cada uno hablaba su propia lengua, pero no la del otro. Agradezcámosle al bachiller y clérigo —luego sacerdote— Juan González que haya hecho de traductor de este acontecimiento...

Segunda consideración

Juan Diego le comenta al Sr. Zumárraga cómo le hizo saber a la Virgen el compromiso que tenía con él. (166) Juan Diego va haciendo los aportes necesarios al obispo para que éste se vaya disponiendo para ver la señal ¿Qué estaría pensando y sintiendo en su interior el obispo mientras Juan Diego le contaba todo con tanta sencillez? Nosotros, ¿sabemos contarle a otros las maravillas que Dios o María hacen con nosotros? Vamos a intentarlo' para gloria suya..

Tercera consideración

Juan Diego le relata al Sr. Obispo cómo la Virgen recibió con agrado la petición de la señal solicitada. (167)
¡Qué hermosa y buena es nuestra Madre del cielo! Siempre le interesan todas nuestras cosas, hasta nuestros pequeños deseos y tonterías... Ella está al pendiente de nosotros y nos comprende. ¿Qué tanto tratamos de entender a los demás cuando nos piden algún favor? ¿Procedemos con gusto, con amor, como María?

Cuarta consideración

Juan Diego le dice a) Obispo cómo se encontró con la Santísima Virgen. (168)
Ella se le presentó todavía oscuro en la madrugada y lo mandó con él, ¡qué dulce recuerdo para Juan Diego! ¿Qué estaría sintiendo al narrarle todo esto al obispo? ¡Cómo estaría recordando este encuentro definitivo con la Reina del cielo! -Qué acción de gracias estaría diciendo a Dios y a María en su corazón! ¡Cómo bendeciría al cerrillo del Tepeyac...! Agradezcámosle hoy a Dios los grandes encuentros que hemos tenido con las personas más significativas para nosotros.

Quinta consideración

Juan Diego le dice al Sr. Zumárraga cómo la Virgen respondió prontamente ante la señal pedida. (169)
Sintamos cómo acogió el corazón de María esta petición, cómo respondió de inmediato al deseo de sus dos hijos. Contemplemos la sencillez y confianza de Juan Diego con la Virgen María. Gocemos con ellos este encuentro y aprendamos 2e ellos a dialogar, a tenernos confianza unos a otros.

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Que recuerden algunos diálogos de Jesús con personas concretas que aparezcan en los evangelios... Ayúdalos a descubrir cómo cuando hay buena voluntad y están Dios y María de por medio es mucho más fácil dialogar, aunque haya dificultades para hacerlo.

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Guía: El Señor Jesús es el que mejor dialoga con la humanidad, con cada uno, porque es la Plenitud de Palabra, es el Diálogo de Dios con el hombre. Todo el evangelio nos muestra a Jesús dialogando con muchos. Los diálogos con sus apóstoles. Con Marta, la Samaritana y el más largo y bello en la última cena son deliciosas muestras de cómo hemos de vivir el dialogo con los demás y con Dios. Escuchemos una muestra.

Lectura base: jn 1,35-50 

Salmo: 46 (45)
Frase del Evangelio: «yo les he dicho todas estas cosas para que en ustedes esre mi alegría y la alegría de ustedes sea perfecta jn. 15,11

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: sugiero las letanías No. 5 complementadas de los asistentes en honor de Maria; que hagan mención a su capacidad de escucharnos y atendernos.

VIII.  Oración final-canto-acuerdos-despedida

La estrella de mañana se llamará Testigo

1. Ambientación Recepción — Animación
2. 
   Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Hoy contemplaremos a Juan Diego dialogando profundamente con el obispo. Lo hace con soltura, sencillez, emoción, profundidad Y esto puede hacerlo gracias a las indicaciones precisas de María de cómo debería presentarle al obispo todo lo que había vivido, visto, oído. María es la gran pedagoga y testigo que nos enseña a seguir a Cristo, a ser sus testigos. Por eso la estrella de hoy es: Testigo. Dispongámonos a escuchar el relato.

Nota: Por el sentido de los hechos y las repeticiones del texto original los números llevan hoy otro orden en las consideraciones.

III. Lectura del Nican Mopohua (170-178)

Lector:

Juan Diego le sigue contando al Sr. Obispo:
170. «Y me mandó a la cumbre del cerrito en donde antes yo la había visto, para que allí cortara diversas rosas de Castilla
171. Y cuando las fui a cortar, se las fui a llevar allá abajo;
172. y con sus santas manos las tomó,
173. de nuevo en el hueco de mi ayate las vino a colocar,
174. para que te las viniera a traer, para que a ti personalmente te las diera.
175. Aunque bien sabía yo que no es lugar donde se den flores la cumbre del cerrito, porque sólo hay abundancia de riscos, abrojos, huizaches, nopales, mezquites, no por ello dudé, no por ello vacilé.
176. Cuando fui a llegar a la cumbre del cerrito miré que ya era el paraíso.
177. Allí estaban ya perfectas todas las diversas flores preciosas, de lo más fino que hay, llenas de rocío, esplendorosas, de modo que lueóo las fui a cortar;
178. Y me dijo que de su parte te las diera, y que ya así yo probaría; que vieras la señal que le pedías para realizar su amada voluntad».

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego recuerda ante el Obispo Zumárraga cómo la Virgen lo mandó a la cumbre del cerrito a cortar las flores. (170) Juan Diego recuerda su obediencia a María y cómo subió al cerro; ¿cómo
estaría recordando el camino, la subida al cerro para recibir la señal de María? Nosotros también hemos de subir a las alturas de la santidad que el padre quiere para nosotros... Pidámosle a María que queramos creer y obedecer.

Segunda consideración

Juan Diego le cuenta al Obispo cómo tuvo fe en María cuando ella le pidió que subiera al cerrito a cortar las flores. (175) Juan Diego sabía que no era lugar propicio ni el tiempo adecuado para
que allí se dieran las flores. Pero como hombre de fe sube confiado en la palabra de María. Así, creció en su fe, no se estacionó en donde estaba. ¿Qué tanto hacemos para avanzar y madurar en nuestra fe?

Tercera consideración

Juan Diego recuerda ante el obispo cómo encontró las flores. (176-177)
Contemplemos este hecho maravilloso en donde Juan Diego se siente ya en el paraíso. ¿Hemos tenido algún recuerdo de alguna experiencia que nos haya hecho sentirnos en el paraíso? Recordemos esos hechos y agradezcámoselos a Dios.

Cuarta consideración

Juan Diego le dice al obispo cómo le bajó del cerro las flores a la Virgen y luego se las dio. (171-173)
En este momento del diálogo Juan Diego debió haber estado muy entusiasmado recordando y platicando cómo Ella tomó las flores con sus manos y las puso en su ayate. Imaginemos la alegría de Juan Diego al recordar este hecho maravilloso de María con él: ¡Con qué cariño habrá tocado las flores María y se las habrá recolocado en la tilma a Juan Diego! Contemplemos esta escena como si estuviéramos en ese pequeño paraíso y disfrutemos con María y Juan Diego este
acontecimiento.

Quinta consideración

Juan Diego le dice al Sr. Zumárraga cómo la Virgen le pidió que sólo a él diera personalmente la señal. (174-178)
Siempre las acciones de Dios son personales, siempre tienen muy en cuenta a cada persona en sí misma y en su relación con los demás. María procede del mismo modo personalizarte, directo, que hace que cada uno se sienta persona, Con este detalle tan personal y directo el Sr. Zumárraga ya puede Convencerse del deseo y voluntad de Dios y de María. La señal para el obispo van a ser las flores: pero la señal globalizante de Dios va a ser también el crecimiento en la fe de Juan Diego; la confianza de Dios y María en su Iglesia, su pueblo, compuesto por el pueblo y la jerarquía; el hecho de hacer nuevas todas las cosas desde el Tepeyac; el sacar a los indígenas de su postración y liberarlos; el ratificar la alianza de Dios con todos nosotros. Todo esto es la Gran Señal que Dios y María dan a fray Juan de Zumárraga, a Juan Diego, a todos nosotros... ¿Cómo nos sentimos ante esta alianza de Dios? ¿Qué pensamos del poder y misericordia del que se preocupa tanto, personalmente, por nosotros? Ratifiquemos nuestra confianza en 132 el Dios de la alianza, en el que es todo amor, compasión y fidelidad.

Agradezcámoste a nuestra Madre que haya aceptado ser la mensajera, la magnífica pedagoga y realizadora de esta alianza. Debe movernos, entusiasmarnos, saber que Dios y Su Madre nos protegen y cuidan tan personalmente...

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Facilita el diálogo y ayúdalos a que descubran cómo María es la mejor testigo de Dios. Que digan por qué. Que compartan cómo hemos de ser buenos testigos para convencer a otros que Dios y María estarán de nuestra parte. Destaca la función pedagógica de María como aparece
en los números 141-142 del Nican Mopohua.

VI Lecturas bíblicas y comparación con Io leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Guia: Vamos a ver en estas lecturas cómo hay que ser testigos de Jesús.
Lectura base: Hechos 10 (Todo el capítulo).
Salmo: 19 (18)
Frase del Evangelio: «...y los discípulos salieron a predicar por todas partes con la ayuda del Señor, el cual confirmaba su mensaje con las señales que les acompañaban».

VII Oraciones complementarias del rosario
Les sugiero que hagamos Mc. 16,20 juntos una letanía en que tomemos en cuenta los aspectos de hoy: testimonio, alianza, verdad, pedagogía, crecimiento en la fe y en la propia personalidad y misión... Después de cada frase diremos: Madre Nuestra, ayúdanos a ser buenos testigos.

VIII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida
La estrella de mañana se llarará: Reina de la alianza.

1. Ambientación — Recepción — Animación
2. 
   Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: El día de ayer —la sesión pasada- nos extasiamos ante la escena tierna y maravillosa de la entrega de la seña/ completa: las flores y el ayate glorificado a través de la presencia misteriosa de María en él. Hoy contemplaremos la reacción del obispo, arrepentido por no creer, lo mismo que los suyos. Aquél le pide perdón a la Virgen.

Hoy también para nosotros es un momento de pedir perdón, de dejarnos reconciliar por Dios y María, de volvernos a encontrar todos como hermanos. Dios, Padre de todos, quiere hacer una sola familia, un solo pueblo con sus hijos. Jesús, el Hijo mayor, Dios como el Padre, es el que nos reconcilia Y e/ Espíritu Santo es el que actualiza toda esta
obra maravillosa en cada uno y en la historia. En esta obra de santificación y renovación del hombre, María tiene un lugar único en la historia de la salvación.

Así fue en Israel, así ha sido en México y en muchas partes de mundo, María le ayuda a Dios a reconciliarnos. Por eso le estrella de hoy es: Reconciliadora. Que Nuestra Madre nos ayude y enseñe a vivir renovados, reconciliados.

 Pidámosle a San Andrés, apóstol, a quien hoy celebramos, -en la pascua continua- que seamos testigos y misioneros de la reconciliación. Escuchemos la narración de esta sesión.
Nota: Los que hacen la Pascua durante el año no hacen mención de la celebración de San Andrés.

III. Lectura del Nican Mopohua (185-190)

Lector:

185. 
     «Y en cuanto la vio el Obispo gobernante y todos los que allí estaban, se arrodillaron, mucho la admiraron,
     186. se pusieron de pie para verla, se entristecieron, se afligieron, suspenso el corazón, el pensamiento...
     187. Y el Obispo gobernante con llanto, con tristeza, le rogó, le pidió perdón por no luego haber realizado su voluntad, su venerable aliento, su venerable palabra.
     188. Y cuando se puso de pie, desató del cuello de donde estaba atada, la vestidura, la tilma de Juan Diego
186. en la que apareció, en donde se convirtió en señal la Reina celestial.
     190. Y luego la llevó; allá la fue a colocar a su oratorio».
187. 
     Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

El obispo y sus acompañantes caen de rodillas y admiran a la Santísima Virgen recién impresa en el ayate de Juan Diego. (185)
Imaginemos la escena: iqué estupor, alegría y admiración, habrán vivido estos dichosos hermanos nuestros que tuvieron la gloria de ser testigos del acontecimiento! Un hecho único en la historia universal con valor de testimonio-alianza de parte de Dios y de María. iQué gozo y alegría del mismo Dios y de María hacer esta alianza con nosotros. iGocemos con ellos y con quienes fueron testigos de este hecho!

Segunda consideración

El obispo y sus acompañantes se entristecieron y afligieron ante María. (186)
Ante la presencia de la Santidad, del Amor, de la Luz, cualquier persona humana se siente indigna de un acercamiento a Dios, a María. ¡Cuántas veces nos habrá sucedido que decimos: «Señor, yo no soy digno..!»; es el amor reverencial, el saberse nada ante El que es todo; saberse pequeño y pecador ante el Amor y Pureza de Dios, de María. Sintámonos pequeños delante Del que es
Todo Santo y ante la Santa Madre de Jesús y Madre Nuestra.

Tercera consideración

El obispo, postrado ante la imagen-retrato de la Virgen María, le pide perdón. (187)
¡Qué escena tan tierna y convincente! La persona a la que Dios le había encargado el mayor servicio espiritual a su pueblo aprende a servir como Dios, como María. Y le duele no haber estado a la altura de los signos y acontecimiento. Nosotros, ¿qué tanto sabemos reconocer nuestros errores y pecados? ¿Qué podemos hacer para que El y Ella nos conviertan a vida nueva como al Obispo, a sus servidores y al pueblo de entonces?

Cuarta consideración

El Obispo le desata a Juan Diego su ayate en donde quedó impresa la imagen de María. (188-185)
¡Qué bella estampa! El que no creía, el que se sentía superior, ahora con Eda reverencia, ¡se acerca al indígena y le desata su tilma! Así Dios nos hermana, si la autoridad religiosa sabe que es servidora de Dios y de su pueblo. Contemplemos esta escena y pidamos especialmente por las autoridades eclesiásticas para que sepan vivir en humildad y amor su servicio a todo el pueblo,

Quinta consideración

El señor Obispo coloca la tilma de Juan Diego, convertida en signo de salvación, en su oratorio. (190) Contemplemos esta piadosa escena; ¡con qué devoción habrá puesto la Imagen el señor Obispo en su oratorio. 11-0 que se habrán movido los servidores del Obispo para preparar el lugar, para colocar la tilma! Ahora los que no aceptaban a Juan Diego están a su servicio. iAsí reconcilia Dios a sus hijos! ¿Qué tan capaces somos de colaborar con otros en sus alegrías, trabajos, y celebraciones?

1. 
   Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Invítalos a que capten que la reconciliación y paz que trae María a México es gracias a que Cristo nos redimió; El nos ha hecho uno a través del ayate de Su cuerpo... Hagan silencio y pídeles que perdonen a quienes los han ofendido y que estén dispuestos a pedir perdón, si es necesario.
Pedir en especial por México en esta difícil etapa de reconciliación nacional.

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Lectura base: Ef. 2, 11-22
Salmo: 72 (71)
Frase del Evangelio: «Señor mío y Dios mío...» Jn 20, 28

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Letanías # 5 (Pág. 119) enriquecidas con frases de los asistentes sobre Jesús como Reconciliador, sobre María, Madre de la reconciliación; Ella, Gran Señal de la alianza de Dios con nosotros. Puenden decir después de cada frase: Madre Nuestra, reconcílianos.

VIII. Oración final — Canto — Acuerdo — Despedida

Guía: Este día podrían intentar, como oración final, un acto de reconciliación entre los asistentes para que María reine y Jesús también. Podrían rezar juntos, despacio un: «Yo confieso...» Quizá hasta podrían darse un saludo o abrazo de paz. Y para terminar podrían rezar la oración: Bajo tu
amparo, para caminar juntos reconciliados y unidos.
La estrella de mañana será: Servidora.

1. Ambientación — Recepción - Animación
2. Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Hoy comienza el docenario, la docena de días en honor de Santa María de Guadalupe. Este día vamos a contemplar cómo, por influjo de Nuestra Madre, el Obispo y sus allegados van a servir a Juan Diego en la misma casa episcopal. El va a mostrarles el sitio donde la Virgen quería su casa. Probablemente al convocar el obispo para que levantaran la casita a Santa María fue mucha gente dispuesta a servir, Así, pueblo de Dios, obispo y profeta se unen en el mismo servicio
encabezados por la Servidora del Dios de la vida y Servidora Nuestra también.

Aprendamos de Dios, de Ella, de Juan Diego y de todos estos hombres y mujeres de buena voluntad a servir por amor. La estrella de este día, por todas estas razones se llama: Servidora.

Nota 1 Por comenzar hoy el mes de Diciembre se inician, en casi todo el país, las celebraciones Guadalupanas más especiales o se acrecientan más. Nos unimos a todos los devotos de Nuestra Madre y pedimos por ellos, por nuestro país y todos los países de América, Vamos a seguir la lectura donde la dejamos ayer —la seSión pasada—.

Nota 2.- Para los que hacen la Pascua larga pueden comenzar en la 24. Línea de la parte del guía donde dice: este día...

III. Lectura del Nican Mopohua (191-196)

Lector:

191. 
     «Y todavía allí pasó un día Juan Diego en la casa del obispo, aún lo detuvo.
     192. Y al día siguiente, (el obispo) le dijo (a Juan Diego): «Anda, vamos a que muestres dónde es la voluntad de la Reina del cielo que le erijan su templo».
     193. De inmediato se convidó gente para hacerlo, levantarlo,
     194. Y Juan Diego, en cuanto mostró en dónde había mandado la Señora del cielo que se erigiera su casita sagrada, luego pidió permiso:
     195. quería ir a su casa para ir a ver a su tío Juan Bernardino, que estaba muy grave cuando lo dejó para ir a llamar a un sacerdote a Tlatilolco para que lo confesara y lo dispusiera, de quien le había dicho la Reina del cielo que ya había sanado
192. Pero no lo dejaron ir solo, sino que lo acompañaron a su casa».
     
     IV. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego pasa todo lo que queda del Martes 12 en la casa del Sr. Obispo invitado por él. (191)
Lo que son las cosas: el que fue obstaculizado por los servidores del obispo y por este mismo, ahora es servido por ellos. Comienza de parte de Dios la glorificación de Juan Diego. ¡Qué sabio y maravilloso es nuestro Dios que es capaz de cambiar a las personas de indiferentes y hasta opuestas a otros a ser amigos inseparables y colaboradores fieles! Dejémonos cambiar por el Dios de la vida, El que une y da vida nueva, El que hace amigos en El a muchos.

Segunda consideración

El obispo le dice a Juan Diego que les muestre en dónde quiere la Virgen que se le haga su templo. (192-193)
El miércoles 13 Juan Diego, el obispo y otros más fueron a conocer el sitio elegido por Dios para construir la casita materna. Imaginemos este hecho: Juan Diego debió ir gozosísimo por la calzada por donde había caminado con experiencias y afectos tan distintos los días anteriores. Iría comentando por el camino con otros indígenas y ante el Sr. Obispo lo que sentía. A lo mejor rezaron juntos un rato por el trayecto...

Dios es capaz de hacer que trabajen juntos y recorran por el mismo camino aun aquellos que estuvieron distanciados. Confiemos en su poder y misericordia. Pidamos a María que sepamos tener el corazón abierto a todos para que Dios obre a través de nosotros.

Tercera consideración

Juan Diego muestra el sitio en donde la Virgen quiso que estuviera su casita. (194)
¡Qué alegría para él terminar el encargo que le había dado Ella; ahora todo dependería del Obispo y de las gentes que se organizaran para hacer la ermita. Pensemos un poco cómo anda nuestra colaboración con el obispo, con el párroco de nuestro lugar, con la comunidad parroquial o diocesana. ¿Colaboramos con las obras y organizaciones de la Iglesia? Que María nos conceda ser servidores de la Iglesia y de la comunidad ambiental.

Cuarta consideración

El señor obispo y la gente de la comunidad inician el trabajo para construir el templo de María. (193)
Contemplemos esta escena en la que el pueblo de Dios, unidos todos, encabezados por su obispo, hacen la obra que Dios quiere para bien de todos. Alabemos la providencia de Dios y estimemos nuestros templos, casas de Dios, de María y de nosotros.

Quinta consideración

Juan Diego va a la casa de su tío Juan Bernardino acompañado de varias personas. (194-196)

Es natural que Juan Diego haya querido ir a ver a su tío pues hacía más de día y medio que no le veía y lo había dejado enfermo. No era por duda seguramente, pero quería ir a servirlo por ser anciano. ¿Cómo anda nuestra disponibilidad para servir? ¿Qué tanto nos preocupamos, eficazmente, de la salud de nuestros familiares, amigos, vecinos..? ¿Visitamos como Jesús y María a los enfermos? ¿Qué haremos en adelante ante estos ejemplos y testimonios?

1. Reflexión y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a descubrir que nuestro mundo es muy flojo para los servicios.
Todos queremos recibirlo o que nos paguen por los servicios. Pero Jesús nos dice: «Den gratis lo que gratis recibieron». ¿Qué podríamos hacer en nuestras comunidades para que haya mejores servicios religiosos, de salud, vivienda, escuelas, centros de recreación y promoción
social... ?

1. 
   Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Guía: Jesús sirvió a los demás en su tiempo; dispongámonos a servir como El que nos sigue sirviendo y nos invita a llegar a Su casa del cielo con las manos genas habiendo vivido como justos, como quienes sirvieron a todos como ¿ Qué podríamos hacer para que haya mejores servicios en nuestra comunidad... parroquia... colonia... ciudad... ?
Lectura base: Jn. 13, 1-17
Salmo: Fil 2, 5-11. (Se puede decir, a manera de salmo, este himno dedicado a Cristo de la comunidad cristiana naciente que nos transmite san Pablo. El estribillo podría ser: Gloria a Ti, Jesús, que nos enseñas a servir.)

Frase del Evangelio: «Zaqueo, baja pronto, porque conviene que me quede yo en tu casa...» Lc. 19-5

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Después de las Ave-marías y de la Salve, exhórtalos y encamínalos para que hagan una letanía a Dios, a Jesús, a María donde expresen los grandes servicios que nos hacen. Vgr. Tú que hiciste este mundo para nosotros...Gloria a Ti, Padre. Y así como ésta podrían decir otras para el Padre, para el Hijo, para el Espíritu Santo y para María. Sólo cambian al final el nombre de la Persona invocada.

VIII Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida

La estrella de mañana: Guadalupe.

Ella es la Madre Amorosa y Compasiva que nos guía hasta el Verdadero Dios.»
SS. Juan Pablo ll, en la canonización de San Juan Diego. 31 de Julio del 2002.

1. Ambientación — Recepción — Animación
2. Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Hoy vamos a meditar el encuentro de Juan Diego y Juan Bernardino y cómo la Virgen le dice a éste el nombre con el que quiere ser llamada. Aunque es cierto que toda la Pascua guadalupana está ofrecida a Ella, será bueno considerar por qué usó ese nombre tan querido, primero en España y ahora en tantas partes de mundo, Porque va aparecer en la lectura de hoy el nombre de Guadalupe, por eso este día la estrella llevará ese nombre.

 Asistamos al encuentro de Juan Bernardino, ya sanado, y de Juan Diego, y gocemos con ellos los favores de Dios y de María. Escuchemos e/ relato de hoy.
Nota: Si quieren abundar sobre el nombre Guadalupe lean lo que viene al final de este día al terminar la sesión.

III. Lectura del Nican Mopohua (197-208)

Lector:

Juan Diego y sus acompañantes llegaron a la casa de éste:
197 «...y al llegar vieron a su tío que ya estaba sano, absolutamente nada le dolía».
198. Y él, por su parte, mucho admiró la forma en que su sobrino era acompañado y honrado;
199. le preguntó a su sobrino por qué así sucedía, el que mucho le honraran;
200. y él le dijo cómo cuando lo dejó para ir a llamarle un sacerdote para que lo confesara, lo dispusiera, allá en el Tepeyac se le apareció la Señora del cielo;
201. y lo mandó a México a ver al gobernante Obispo, para que allí le hiciera una casa en el Tepeyac.
202. Y le dijo que no se afligiera, que ya su tío estaba contento, y con ello mucho se consoló.
203. Le dijo su tío que era cierto, que en aquel preciso momento lo sanó,
204. y la vio exactamente en la misma forma en que se le había aparecido a su sobrino,
205. y le dijo cómo a él también lo había enviado a México a ver al obispo;
206. y que también, cuando fuera a verlo, que todo absolutamente le descubriera, le platicara lo que había visto
207. y la manera maravillosa en que lo había sanado;
208. y que bien así la llamaría, bien así se nombraría: la perfecta Virgen Santa María de Guadalupe, su Amada Imagen».

1. 
   Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego llega a su casa con sus acompañantes y encuentran ya sano a su tío Juan Bernardino quien se sorprende de que su sobrino llegue con tanto honor. (197-199)
Imaginemos el camino que recorrieron Juan Diego y sus acompañantes para ir con Juan Bernardino; cómo fueron por las veredas que recorría aquél para ir de su casa al Tepeyac y a México y viceversa. iQué alegría irse acompañando y qué doble alegría para Juan Diego encontrar bien a su tío! ¡Qué alegría para Juan Diego haber experimentado que María le cumplió lo que le dijo! Así es Ella, así es Dios, el autor de toda alianza santa, el Dios fiel a sus promesas. Gocémonos en este Dios que hace maravillas y en María que nos ama y nos atiende como sólo
Ella sabe hacerlo.

Segunda consideración

Juan Diego le cuenta a Juan Bernardino cómo se le apareció la Virgen cuando iba por el sacerdote a Tlatelolco; cómo lo mandó con el obispo a México para que le diera la señal que le había dado y cómo lo consoló al decirle que su tío ya estaba sano. (200-201)
Por segunda ocasión en el relato del Nican Mopohua Juan Diego cuenta lo que le sucedió con la Virgen en el Tepeyac; ahora es a su tío. Reconstruyamos la escena y aprendamos a recordar con agradecimiento lo que Dios y María hacen por nosotros. Sintamos la alegría de Juan Diego al relatar a su tío lo experimentado al ver a la Virgen, al llevar la prueba al Obispo, y al saber que Ella lo sanaría de su enfermedad. ¡Qué importante es dar ánimo a cualquier persona en la vida y
más ante el dolor! Aprendamos de María a animar, a consolar, a fortalecer al pró-
jimo, a dar esperanza.

Tercera consideración

Juan Bernardino le confirma a Juan Diego que en el mismo momento que la Virgen dijo que lo curaría efectivamente lo hizo. (202-203)
Sigamos contemplando este encuentro en que tío y sobrino se robustecen en la fe gracias a María; ¡cómo estarían contentos comentando sus experiencias! Es hermoso en las familias, con los amigos, en la propia comunidad tener experiencias vivas de fe. Y es Dios el que las prepara y las regala. ¡Cómo se habrán sentido contentos los dos al poner en común esta alegría profunda de haber visto, de manera semejante, a su misma Madre del cielo! ¡Con razón llamamos a María
Fuente de todo consuelo; con razón la llamamos Salud de los enfermos, Consoladora de los afligidos! Gocemos con Ella este encuentro de fe; agradezcámosle todas las intervenciones que ha tenido a favor nuestro a través de la vida; agradezcámosle a Dios Su providencia sobre nosotros y el regalo de nuestra fe.

 Cuarta consideración

Juan Bernardino le comenta a Juan Diego que la Virgen le mandó que fuera con el obispo para decirle cómo lo había sanado. (204-207)
María ha venido a iniciar a los indígenas a una vida de fe, de comunión eclesial. Su misión de Madre espiritual de todos la inicia con los indígenas pero también para que sean incluídos todos los hombres. María procede con la misma pedagogía que con Juan Diego. El testigo tiene que experimentar a Dios: su cercanía, su bondad, para que otros puedan sentir que lo que dice es cierto. Por eso le dice a Juan Bernardino que le cuente muy detalladamente al obispo todo lo que
experimentó. Esta iba a ser una prueba fundamental de la veracidad de las apariciones para Juan Diego y los indígenas. Pensemos en lo simbólico de esta curación: María viene a sanar a Juan Bernardino que hace las veces de padre de Juan Diego y que se estaba muriendo. Juan Bernardino representa al pueblo de los viejos, a la sociedad indígena, a la cultura que se estaba muriendo después de la conquista. María viene a levantarlos, a sanarlos, a darles vida. Es la Madre del
todopoderoso que pone a disposición de sus hijos pequeños su poder para salvarlos y levantarlos a una nueva vida. Agradezcamos a Dios y a María esta intervención suya a favor del pueblo indígena y de nosotros.

Quinta consideración

Juan Bernardino le dice a Juan Diego que la Virgen se nombró la Perfecta Virgen Santa María de Guadalupe. (208)
Pensemos y sintamos este detalle de Dios y de María que nos dejan su nombre. El nombre define a la persona. En el Antiguo y Nuevo Testamento el nombre es la persona. Cuando usamos el nombre de Dios estamos tomándolo a El en nuestros labios y corazón como testigo de que el actúa. Al principio del día y en las acciones principales que realizamos en nuestra vida iniciamos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Al dejarnos Su nombre, la Virgen nos dice cómo quiere ser invocada, cómo va a responder a quienes invoquen Su nombre.
Guadalupe quiere decir río de amor, río de luz, según algunos autores. Y en verdad que Ella ha venido a México como un río de luz para iluminar las tinieblas de los indígenas, de los españoles y de todos nosotros. Ella nos trae a Cristo, del mundo. Y Ella, la que es todo cariño, amor y ternura viene como río de amor. En Ella el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo tienen la Gran Aliada del amor
para que todos conozcamos, amemos, sigamos y sirvamos a Jesucristo Nuestro Salvador. Gocemos estas verdades y digamos con todo nuestro amor:

Mi corazón en amarte eternamente se ocupe;
y mi lengua en alabarte, Madre mía de Guadalupe.

1. 
   Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a intercambiar experiencias de fe al estilo de Juan Bernardino y Juan Diego. Que cuenten algo que los motive más a querer a Nuestra Madre y al Dios de amor que hace tanto por nosotros.

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Guía: Interésalos en la lectura, motívalos para que vean la pedagogía de Jesús para hacer sus testigos. Después del Evangelio les podrás preguntar: ¿qué hace Jesús para convertir y transformar a la Samaritana en Su testigo?
Lectura base: Jn. 4, 1-43
Salmo: 126 (125)

Frase del Evangelio: «Vuelve a tu casa y cuenta todo lo que el Señor ha hecho contigo... Y fue por toda la ciudad propagando lo que Dios había hecho por él». Lc. 8, 39

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Podrían recitar la letanía # 6 (Está al terminar este día: pág. 150). Puedes poner en cada oración de la segunda parte, el nombre de Guadalupe. Tú, Santa María de Guadalupe, la más Maravillosa de las creaciones de Dios...

VIII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida

Guía: Podrían cantar una canción muy apropiada para hoy: De piel morena.Está en la pág 209. Terminen la oración y aprendan esta jaculatoria:

Guadalupe, Guadalupe,
nombre tan consolador;
es el nombre de mi Madre,
de la Madre de mi Dios.

Nota.- Sobre el nombre Guadalupe. Quien guía puede explicar lo siguiente: Hay una imagen en España muy famosa desde el siglo XIII, en una región que llaman Extremadura ya ceca de Portugal, que se llama Nuestra Señora de Guadalupe. Allí tiene origen el nombre. Es una palabra compuesta de dos vocablos de distintos orígenes al que se ha dado diferentes significados. Según algunos: guadal: en árabe quiere decir: río; y lupus, en latín lobo. El nombre compuesto sería: río de lobos, porque por allí hay un lugar donde hay un río a donde bajaban antiguamente los lobos a beber. Guadalupe, pues, es un nombre mestizo, hecho de vocablos árabe y latín, precisamente las lenguas de los que dominaron España por muchos siglos: los romanos y los árabes. Hay también otra versión de allí mismo: que el nombre viene de guadal — río y loup — escondido. E/ nombre quiere decir, según esta versión, río escondido porque el río Guadalupe tiene a sus orillas muchos árboles y como no es muy ancho, las ramas de los árboles de las dos márgenes del río llegan a enredarse entre sí y hacen que no se vea el río: de allí su nombre: río escondido. Pero también hay otras versiones del mismo nombre: según algunos, significa río de luz y según otro autor más reciente —Gutierre Tibón- la palabra: uad-al-hub, quiere decir en árabe: río de amor. Esto da un conjunto de versiones muy interesante: María es un río de amor y de luz que viene a luchar a favor de sus hijos contra todos los lobos que van contra ellos. El que Dios haya querido que María usara
este nombre es muy simbólico e interesante porque este nombre hoy es conocido en casi todo el mundo y se conoce cada vez más esta historia portentosa de Dios y de María. Pero en el tiempo de la conquista fue muy importante que Ella así se llamara porque Hernán Cortés y muchísimos de los que vinieron a hacer la Conquista eran de poblaciones cercanas a Guadalupe, España y eran muy devotos de Ella. Cuando oyen que aquí María se nombra Guadalupe comienzan a tenerle una inmensa devoción, tanto que en tiempo de la colonia hubo escuelas de pintores de guadalupanas de México en España. Esto nos hace conocer la inmensa sabiduría de Dios, su providencia y su estrategia divina para salvarnos.
Hay otros autores de mucho renombre que afirman que el nombre original fue nahua pero por el contexto de la Conquista perdió fuerza en el sonido al pronunciarlo y fue castellanizado como muchas otras cosas. Las versiones son muy interesantes pero no es posible poner aquí todas. Lo importante hoy es que sea Guadalupe para todos en todo el mundo.

La estrella de mañana se llamará: Misionera.

Letanías guadalupanas (6)
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Madre de todos los que oran unidos a Dios, por quien vivimos.
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Ruega por nosotros
Madre de los que ponen en ejecución las cosas que les encomiendas.
Madre de los que promueven la construcción de casitas, oratorios y templos dedicados a Ti.
Madre de los que recorren juntos los caminos de la alegría y la esperanza.
Madre de todos los felices encuentros entre personas.
Madre y Promotora de los desvalidos.
Madre de los que visitan enfermos, ancianos y necesitados para llevarles el consuelo de Dios.
Madre de todos los médicos, enfermeras, investigadores y promotores de la salud.
Madre de todas las instituciones de salud y de todos los asilos.
Madre de los que dan testimonio de Ti y de Dios.
Madre de todos los que pronuncian los diversos nombres que te hemos dado en toda la tierra.
Madre de todos los que saben recibir con amor en sus casas a otros hermanos,
Tú, la que eres Mensajera de la vida plena que Dios nos da.
Tú, salud de los enfermos y consoladora de los afligidos. Enséñanos a amar.
Tú, que nos tienes, como lo prometiste, bajo tu protección, amparo, auxilio y defensa.
Tú, que estás en medio de los encuentros importantes de nuestra vida.
Tú, que eres modelo de quienes visitan a otros.
Tú, que acompañas a los de la tercera edad fortaleciéndolos y amparándolos.
Tú, que peregrinas de un lugar a otro para hacer el bien.
Tú, que consuelas y das honor a tus mensajeros.
Tú, la transparencia humana más pura y radiante de Dios.
Tú, que en tus distintos nombres y advocaciones, juntas a todos tus hijos de la tierra.
Tú, que te presentaste para todos como Santa María de Guadalupe.
Tú, a cuyo nombre goza la tierra y tiemblan los infiernos.
Tú, río de amor y luz para todos nosotros.
Reina de todos los lugares de la tierra. Enséñanos a ser tú
Reina de todas las especies curativas que ayudan a la salud del hombre.
Reina de todas las ciencias biológicas y químicas.
Reina de todos los laboratorios, clínicas, hospitales y casas de recuperación.
Reina de todos los instrumentos por los que se facilita la salud.
Reina de todos los avances modernos de la ciencia.
Reina de todos los ancianos y de los necesitados de salud.
Reina de todos los jacales y casitas de los más pequeños de tus hijos.
Reina de todos los testigos y mensajeros de tu amor.
Reina de todos los que saben hospedar a otros.
Reina de todos los lugares, hoteles y casas donde se hospeda la gente.
Reina de este mundo, casa-hospedería de Dios para todos sus hijos.
Reina de los Angeles... Reina de los Patriarcas... Reina de los Profetas.
Cordero de Dios...

El Papa Juan Pablo ll nos habla de Santa María de Guadalupe

El Santo padre nos presenta la certeza que él tiene y que nosotros experimentamos de que Nuestra Reina del Tepeyac ha sido un valor insustituible en la evangelización de nuestro Continente. Por eso la proclamamos todos la Estrella de Nuestra Evangelización.

«América Latina, en Santa María de Guadalupe, ofrece un gran ejemplo de evangelización perfectamente inculturada. En efecto, en la figura de María —desde el principio de la cristianización del nuevo mundo y a la luz del Evangelio de Jesús- se encarnaron auténticos valores culturales indígenas. En el rostro mestizo de la Virgen del Tepeyac se resume el gran principio de la inculturación; la íntima transformación de los auténticos valores culturales mediante la integración en el cristianismo y el enraizamiento del cristianismo en las varias culturas». (Discurso inaugural de S.S. Juan Pablo ll a la IV Conferencia General del Episcopado Latinoamercano, 1992). (Documento de Santo Domingo, # 24 ).

1. Ambientación — Recepción — Animación
2. Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Ayer —la sesión pasada— consideramos el dulce nombre de Guadalupe. Hoy veremos cómo Juan Diego y Juan Bernardino van a dar testimonio ante el señor obispo de la curación de este último. Con estos últimos signos se redondea y concluye la prueba testimonial de la alianza que Dios da al señor obispo a través de María.

Con la presencia de los dos testigos, las flores entregadas y el ayate transformado como perenne testigo del amor de Dios, María termina su primera misión temporal en el Tepeyac para seguir después con su misión permanente. El obispo, con todos estos signos, ya le podía levantar la casa materna a María para que atendiera a sus hijos y siguiera su misión.

Este día la estrella lleva el nombre de: Misionera porque Ella, María, Nuestra Madre, es la Gran Misionera en estas tierras, porque es misionera permanente y nos invita a todos a seguir la misión de Jesús hoy mismo. Por otro lado —para los que hacen la Pascua contínua- recordamos y celebramos en toda la Iglesia al gran misionero jesuita de Asia y de la India San Francisco Javier, que fue verdadera estrella de Jesús par evangelizar esas enormes regiones de la tierra. Escuchemos la lectura de este día para que entusiasme a ser testigos y misioneros del Señor y de María.

Nota: Para los que hacen la Pascua larga supriman todo lo relacionado con San Francisco Javier. (A partir de: por otro lado...)

III. Lectura del Nican Mopohua (209-211)

Lector:

Después de que Juan Diego estuvo con su tío ambos se fueron con enviados del Sr. Zumárraga:
209. «y luego trajeron a Juan Bernardino a la presencia del gobernante obispo, lo trajeron a hablar con él, a dar testimonio;
210. Y junto con su sobrino Juan Diego, los hospedó en su casa el obispo unos cuantos días,
211. En tanto que se levantó la casita sagrada de la Niña Reina allá en el Tepeyac donde se hizo ver de Juan Diego. IV. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego y Juan Bernardino fueron hacia México para ver al obispo, (209)
Una vez más Juan Diego tuvo que emprender el mismo camino. Es la cuarta vez en sólo 5 días, sólo que ahora va acompañado y muy honrado. Aun a pesar de la edad avanzada de Juan Bernardino caminan con amor todos esos kilómetros en honor de María. Pensemos que hasta el camino se les haría corto con tal de dar la gran noticia al obispo de que María había sanado al venerable anciano. Cuando se nos pide un esfuerzo para las cosas de Dios y de María ¿qué tan dispuestos estamos para hacerlo?

Segunda consideración

Juan Bernardino da testimonio ante el obispo de su curación. (209)
Ahora el Sr. Obispo es confirmado por dos testigos directos del gran Acontecimiento Guadalupano. Además de conocer a Juan Bernardino y de ver con sus propios ojos que está curado conoce por él que la Virgen le ha pedido que la llamaran la siempre Virgen Santa María de Guadalupe. ¿Qué habría sentido el Obispo al ver y conocer todo esto; qué habría pensado de Dios, de su plan, de
María? Cuando algo nos sucede ¿acostumbramos darle vueltas en el corazón a esos sucesos como María, para entenderlos, para ver qué nos pide Dios a través de ellos, o dejamos que pasen los acontecimientos sin preguntarle a Dios qué significan?

Tercera consideración

El obispo hospedó a Juan Diego y Juan Bernardino. (210)
iQué gusto que el que no creía, ahora hospede con cortesía a los dos favorecidos de María! iCómo se habrán comunicado esos días! iCuántas cosas compartirían sobre todo en la oración y en el testimonio recíproco! ¿Qué tanto nos apoyamos los unos a los otros en nuestra fe? ¿Qué atenciones tenemos cuando sabemos que tenemos que hospedar a alguien en nuestra casa; lo servimos como a Cristo?

Cuarta consideración

Juan Diego y Juan Bernardino evangelizan a su pueblo mientras construyen la casita de la Virgen.(211) Aunque no aparece en la narración del Nican Mopohua, es lógico suponer
que todos aquellos cientos de indígenas que fueron a la casa del Obispo primero y luego a la iglesia mayor a ver a la Virgen, recibieron el testimonio directo de Juan Ciego y de su tío. Contemplemos esta escena tratando de vivir y sentir lo que vieron y sintieron esos primeros indígenas testigos de la grandeza de Dios y del amor de María. Imaginemos lo que sentirían Juan Diego y Juan Bernardino al contarles a tantos hermanos suyos lo que habían vivido esos días. Pidámosle a ellos que no enseñen a evangelizar a las personas con quienes tratamos y a otros
ruchos para que Dios y María sean más glorificados.

Quinta consideración

El pueblo construyó la casita de la Virgen en el Tepeyac. Desde entonces Ella cumple allí la misión que Dios le encomendó. (211) Imaginemos la obra, la acción. Todos los que habrán tomado parte en ella. Unos directamente al pie del cerro y otros en la ciudad preparando adornos y demás. El Obispo, preparando las invitaciones para la inauguración solemne de la casa de María y luego el hecho de enviar los comunicados. El cerro y el llano fueron preparados por los hombres para la glorificación permanente que recibirían porque entre ellos María iba a poner su casa para siempre. iBendito el cerro del Tepeyac en donde María apareció para gloria de Dios y bien de los hombres de América, y de México en especial! Podemos preguntarnos: ¿qué tanto colaboramos con otros para que más pronto se hagan las cosas a favor de todos? ¿Qué tanto damos gracias a Dios de
que escoja algunos lugares para manifestarnos más su amor y acercarse más a nosotros?

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a que compartan alguna experiencia misionera que hayan vivido. Dales tiempo. Que compartan también sus idas al Tepeyac.

1. Lectura bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Guía: Ayúdalos a relacionar el pasaje del Evangelio con el Tepeyac: los pastores son avisados por los mensajeros de Dios y van al lugar señalado; allí encuentran a Jesús y María. Lo mismo pasa en el Tepeyac: allí está Ella y nos da a Jesús. De ahí regresamos con más alegría y fortaleza a nuestra vida ordinaria.

Lectura base: Lc. 2, 8-20
Salmo: Is 2,2-5
Frase del Evangelio: «Y les dijo Jesús: vayan por todo el mundo y anuncien la buena noticia a toda la creación» Mc. 16,15

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Escoge las letanías que te parezcan adecuadas para hoy o invítalos a que las inventen de acuerdo a lo orado y considerado este día. También pueden usar los piropos a Santa María (pág. 195) -podrían decir al final de cada frase: Ayúdanos a ser misioneros como tú.

VIII. Oración final — Canto —acuerdos — Despedida

La estrella de mañana será: Admirable

I Ambientación — Recepción — Animación

II Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Hoy concluiremos la primera vuelta completa de la lectura y meditación de los acontecimientos guadalupanos narrados en el Nican Mopohua. A partir de mañana haremos un recorrido breve día por día de los siete acontecimientos principales que se efectuaron en 1531 durante los 15 días iniciales, sorprendentes y rascendentales de las manifestaciones más sensibles de la presencia de la Santisima Virgen (Mariofanía) en el Tepeyac y la antigua Tenochtitlán, hoy ciudad de México.

Este día consideraremos cómo el señor obispo, presionado por la gente quiere ver la imagen, que quiere sentir la presencia de María su Madre, lo obligan a trasladar la imagen de su casa obispal a la llamada iglesia mayor de la ciuudad, sede del Obispo.

 Es muy significativa esta primera salida de la Virgen porque va a ser colocada en el sitio desde donde el obispo, pastor de su diócesis, conngrega y educa en la fe a su grey. Así, de una manera velada pero real, María inicia este Pentecostés Guadalupano al estilo de como estuvo en Jerusalén en medio de los apóstoles y discípulos de Jesús para recibir el amor, la unidad, la consolación y fuerza del Espíritu Santo. Así va a ser en México.

Ella va a aglutinar al obispo Zumárraga y a los otros tres que van a ser los actores principales: Juan Diego, Juan Bernardino y Juan González, e/ traductor e intérprete del señor Obispo quien posibilitó el entendimiento de los actores que se expresaban en distintas lenguas, como en el Pentecostés de Jerusalén que aglutinó a Pedro con los demás  apóstoles.

Vamos a tratar de recrear este día entre nosotros la vivencia y experiencia de fe que tuvieron los primeros indígenas y españoles al hacer los traslados de la virgen.

Hubiera sido deseable que pudiéramos desdoblar estas consideraciones El traslado en dos o tres días pero no podemos hacerlo porque ya está cercana la fiesta de la Señora del Tepeyac y hay que hacer los días siguientes unas repeticiones de todos los acontecimientos como lo indica San Ignacio en su metodología y camino espiritual para que saquemos mayor provecho y sintamos dónde Dios nos ha consolado más para que afirmemos nuestro deseo de servir a quien maravillosamente desencadenó todo este acontecimiento de salvación.

Como en el relato que vamos a considerar este día aparece que todos se admiraban por María y por las acciones que Dios realiza por Ella, la estrella de hoy llevará el nombre de: Admirable. Dispongámonos a participar y a admirarnos como los primeros testigos guadalupanos. Escuchemos pues e/ relato.

Guía: Sugiero hoy al inicio el canto: Paloma Blanca

III. Lectura del Nican Mopohua (212-218)

Lector:

212. 
     «Y el señor Obispo trasladó a las iglesia mayor la amada imagen de la Amada Niña Celestial.
     213. La vino a sacar de su palacio, de su oratorio en donde estaba, para que todos la vieran, la admiraran, su amada imagen.
     214. Y absolutamente toda esta ciudad, sin faltar nadie, se estremeció cuando vino a ver, a admirar su preciosa imagen.
     215. Venían a reconocer su carácter divino.
     216. Venían a presentarle sus plegarias,
     217, Mucho admiraron en qué milagrosa manera se había aparecido,
     218. puesto que absolutamente ningún hombre de la tierra pintó su amada imagen.
     
     
213. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

El señor obispo don Fray Juan de Zumárraga decide trasladar la imagen-retrato de María a la iglesia mayor. (212-213 a) Imaginemos y sintamos la contradicción que vive el Sr. Obispo: por un lado tiene el deseo de tener en su propia casa a la Virgen; pero por otro lado está el reclamo de los indígenas de querer ver y admirar a su Madre. Imaginemos también el desconcierto de muchos de ellos al oír hablar de las apariciones de la Virgen. ¿Cómo podía ser posible esto que les contaban otros connaturales? ¿Cómo que una mujer bajó del cielo? ¿Cómo es que andan diciendo por allí que se le apareció a uno de los nuestros y dice que es nuestra Madre? ¿Tendrá que ver con la Tonantzin? Con todo y la incredulidad de algunos el obispo sabe compartir, oye la voz del pueblo, voz de Dios y decide sacar la imagen de su casa. A veces no comprendemos a nuestros obispos. Hacen cosas que según nosotros no debían hacer. Pero consideremos que tienen muchos datos que manejan y que algunos de éstos ni siquiera pueden comunicar a otros. ¿Hacemos esfuerzos por comprender a nuestros obispos? Pidamos por ellos mientras rezamos.

Segunda consideración

El señor obispo trasladó la imagen-retrato de la Virgen a la iglesia mayor para que todos la vieran. (212-213)

Uno de los días posteriores a la Gran Manifestación Mariana se realizó el primer traslado de la imagen: este acontecimiento permite que muchísimos indígenas conocieran por primera vez a su Madre. Imaginemos lo que habrá significado este momento para muchísimos de ellos.

Este traslado va a ser el primero de muchos que se han hecho en la historia. Allí comenzó el peregrinar de Santa María de Guadalupe entre nosotros; allí se iniciaron también la multitud de peregrinaciones que se han hecho y se harán hasta el final de los siglos para ver a María. Contemplemos esta escena. Veamos los miles de indígenas que habrán ido esos días a la iglesia mayor —que después será la catedral- movidos por testigos presenciales que fueron invitando unos a otros; ¡qué espectáculo! ¡Si tuviéramos un video de lo que sucedió por esos días... iCómo habrán ido, con qué curiosidad y esperanza! Un pueblo que había perdido toda esperanza comienza a recuperarla. Imaginemos el encuentro de los indígenas con Juan Diego y Juan
Bernardino y los testimonios de éstos...
Dice la narración: «Todos fueron a verla»; ¡cómo no iban a ir a verla con todo lo que les contaban otros! Todavía hoy muchísimos la seguimos viendo y admirando. Agradezcamos a Dios este prodigio de sabiduría, amor y misericordia por nosotros y oremos especialmente por los indígenas de nuestro país, de toda América, para quienes fue hecha de manera especial la manifestación Mariana-Guadalupana al inicio de la que por otro lado fue trise conquista...

Tercera consideración

Todos se estremecieron al admirar la preciosa imagen. (214)
Contemplemos esta escena. Los indígenas llegan con toda su curiosidad a contemplar a María. con qué detenimiento contemplarían la imagen de María que traía tantos signos usados por ellos; ¡tantos mensajes contenidos en esos glifos divinos dejados especialmente para ellos! Habrán comentado que era la Señora del cielo y de la tierra; ¡que estaba emparentada con el sol, que unía a todos los elementos en una reconciliación única, ¡Y que además traía al Niño-Sol en su vientre como signo de vida nueva! ¡cuántos habrán tocado la imagen y hasta la habrán besado. ¡Qué estremecimiento interior y exterior en todos esos indígenas que se dejaron tocar profundamente por Dios y María a través de este acontecimiento único en la historia humana, inicio de otras muchas, muchísimas Mariofanías que se han ido dando a través de estos siglos en todo el mundo a partir de este Primogénito Acontecimiento Mariano, que para gloria nuestra se ha realizado en nuestra tierra, dulce y herida, pródiga y desierta..! Llenémonos de regocijo interior, agradezcamos con todo el corazón que Dios haya salvado a nuestro pueblo y le haya dado de esta manera razones para vivir, amar y esperar. Estremezcámonos con ellos ante la admirable belleza de nuestra Madre y Reina Celestial...

Cuarta consideración

Los indígenas fueron a ver a María, a presentarle sus plegarias y a reconocer que Dios había sido el autor de este prodigio. (215-218)

Este párrafo es el relato final del Nican Mopohua. Es el testimonio último del Evangelio de México. Dios, autor de este plan de salvación iniciado desde el principio del mundo, viene a poner su sello en México con todo este prodigio de amor, de su alianza con el hombre. Ahora es con María, la Madre de su Hijo, con quien da este sello peculiar. Lo que las Tres Divinas Personas han realizado para nosotros teniendo como centro de la revelación a Jesucristo, Nuestro Señor, a través de toda la historia, vienen a darle un sello materno especialísimo, a través de Santa María de Guadalupe, en nuestro amado cerrito del Tepeyac.

Desde Diciembre de 1531 y hasta hora, y por los siglos, Dios será bendecido en México y en especial en el Tepeyac, por haber iniciado, anunciado y realizado este signo materno único en la historia de la humanidad Presentémosle nuestras súplicas a nuestra Madre, Ella que ha prometido escucharnos, para que nos atienda con todo su amor maternal, para que calme nuestros miedos y angustias, renueve nuestra fe y esperanza y nos enseñe cómo servir mejor a este Dios maravilloso que nos la ha dado como Madre. Guardemos
un momento de silencio para ver qué le ofrecemos y qué le pedimos.

Quinta consideración

María de Guadalupe sigue en el Tepeyac fascinándonos, y atendiéndonos como lo prometió.
Vamos a contemplar a María, Nuestra Madre, con todo nuestro amor. Veamos su rostro. Dejémonos fascinar por él, por la expresión compasiva de sus ojos.

Contemplemos la tierna postura de sus manos juntas... Gocemos el sublime embarazo de su hijo en el vientre... Sintamos la armonía con que Dios ha vestido y presentado para todos los hombres de la tierra a Esta sin igual Mujer. Esta expresión Mariana, la más bella de la tierra, es obra del Único y Verdadero Dios por quien vivimos, que nos entusiasma, nos llena de aliento y nos dice: ámenla y sírvanla con todo su corazón.

Pidamos hoy por los que hacen investigaciones Guadalupanas para que lo que vayan aportando ayude al plan de Dios. Hoy, el Acontecimiento Guadalupano es estudiado por muchísimas personas especialistas de distintas ciencias. Todos nos vamos preguntando; ¿cómo un ayate puede durar tanto? ¿Qué técnicas hay en este prodigio celestial para que haya tal luminosidad, expresión, contenido teológico, antropológico, artístico, científico? Contemplemos extasiados esta maravilla universal y pidámosle por los que todavía no creen a pesar de tantos prodigios.

Para ayudarnos a contemplar a María como lo hicieron los primeros indígenas que tuvieron el privilegio de hacerlo vamos a leer el primer canto que conocemos dedicado a María y que fue compuesto según la tradición, por Francisco Plácido, indígena de los principales de Azcapotzalco. Lo estrenó el 26 de Diciembre de 1531 día del traslado de la imagen al hogar de María en el Tepeyac, fecha cumbre para México en que indígenas, españoles y el clero, en una reconciliación
única en la historia, trasladan a la Virgen de la iglesia mayor a su casita del Tepeyac. Escuchemos el llamado canto del atabal.

Canto del atabal, llamado también el Pregón del atabal (Atribuido al indígena Francisco Plácido de Azcapotzalco, Diciembre de 1531)
Yo me recreaba con el conjunto policromado de variadas flores de tonacaxochitl que se erguían, sobrecogidas y milagrosas, entreabriendo sus corolas en presencia tuya, i0h Madre Nuestra, Santa María! Junto al agua cantaba (Santa María): soy la planta preciosa de escondidos capullos; soy hechura del único, del perfecto Dios: soy la mejor de sus criaturas Tu alma está viva en la pintura. Nosotros los señores le cantamos junto al libro-grande y le bailamos con perfección.

Y tú, Obispo, nuestro único padre, predica allí, en la orilla del agua. Dios te creó, i0h, Santa María!, entre abundantes flores: y nuevamente te hizo nacer, pintándote en el obispado.
Artísticamente se pintó. iOh! en el venerado lienzo tu alma se ocultó: todo allí perfecto y artístico. ¡Oh! yo aquí de fijo habré de vivir. ¿Quién tomara mi ejemplo? ¿Quién conmigo ira? Oh! póstrense en torno suyo. ¡Oh! canten con perfección: que mis flores y mis cantos se desgranen en
presencia suya. Lloro, digo y advierto a mi alma que observe la verdadera razón de mi canto: ¡Oh! que se funde, que prontamente sea hecha su casa terrenal; allí moraras alma mía, flor distinguida que su aroma difunde mezclándolo al de nuestras flores. ¡Oh! vibrantemente brotan mis cantares, en loor del venerado y tierno fruto de nuestras flores que son su perenne adorno. La flor de cacao su perfume va esparciendo: difundiendo su aroma la flor poyoma los caminos perfume: allí viviré yo el cantor. ¡Oh! ¡Oh! Oigan mis cantos que brotan tiernamente.

Guía: Mientras rezamos contemplemos a Nuestra Madre

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos para que logren tener una experiencia fuerte de fe, de amor, de consolación como la tuvieron los indígenas. Prepara bien tus preguntas y déjalos que se expresen con todo su amor y devoción. Podrías empezar por algo así: ¿qué han sentido hoy durante las consideraciones? ¿Quiere empezar alguno a darnos su testimonio? Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

1. 
   Lectura base: Is. 35, 1-10 ó 9, 1-6

salmo: 46 (45)
Frase del Evangelio: «Hoy hemos visto cosas increíbles» LC 5, 26
VII. Oraciones complementarias del rosario
Guía: Inventen unas letanías de alegría, de admiración por Nuestra Madre
Admirable. Pueden usar también las letanías Guadalupanas # 7 que están en la siguiente página.

VIII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida

Guía: Sugiero el canto: Señora del Tepeyac o Reina de la nación (Esta la tienen al final del libro en la página 212).

La estrella de mañana: Luz
 
Letanías Guadalupanas (7)

Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Madre de todos los caminos que llevan a Dios.
Madre de la esperanza compartida.
Madre de todos los reinos y naciones de la tierra.
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Ruega por nosotros
Madre que reconcilias a los enemigos y de manera admirable los hermanas.
Madre de todos los cantos y las danzas, de los músicos y artistas.
Madre de todos los pescadores, lancheros y navegantes.
Madre de los que se fían de Ti y de Dios en sus vidas.
Madre de las resurrecciones a vida nueva.
Madre y Señora de todos lo peregrinos.
Madre de todos los que hacen historia al caminar contigo.
Madre de todas las sanas alegrías de la tierra.
Madre de los carpinteros, artesanos y albañiles de tus santuarios.
Madre de la liturgia, rostro hermoso de la iglesia.
Madre del pueblo de Dios, sacerdotal y profético.
Madre que promueves y mantienes la unidad de todos los hombres, de todos los pueblos.
Madre que nos enseñas a ser hermanos unos con otros.
Madre que has traído a todos los pueblos de la tierra, desde el Tepeyac, unos tiempos nuevos.
Madre de la Nueva y eficaz evangelización.
Madre que alabas a Dios con nosotros desde el cerrillo del Tepeyac.
Madre que acompañas desde siglos a este Continente de la esperanza.
Madre que nos descubres el verdadero camino para llegar a Cristo.
Tú, que nos sacas de nuestros rencores y nos reconcilias con otros. Enséñanos a amar
Tú, que alejas de nosotros toda la historia que nos ha hecho daño.
Tú, que has ayudado a forjar una Patria mestiza, nueva y misionera.
Tú, que has levantado al pueblo oprimido a la libertad.
Tú, que eres Bandera de México para cambios radicales.
Tú, que eres el lazo de unión de toda nuestra nación.
Tú, que nos acoges a todos en el Tepeyac.
Tú, que eres en el Tepeyac, el signo más evidente del triunfo del Dios de los pobres y sencillos.
Tú, que con tu presencia en el Tepeyac eres signo del cuidado amoroso de Dios para todos.
Tú, que desde el Tepeyac, ejerces de manera admirable tu maternidad espiritual y universal sobre todos los hombres de la tierra.
Tú, que preparaste a Juan Diego para que fuera tu mejor catequista.
Tú, gloriosa y siempre Virgen, Santa María de Guadalupe.
Tú, la Amada y Favorecida en extremo por Dios.
Tú, Nuestra Jovencita y Madre del Tepeyac, Señora de Nazaret.
Tú, Reina de Pentecostés y de este nuevo, pequeño y grande Pentecostés Americano.
Tú, la Enviada de Dios, y la Mejor Mensajera de su Evangelio.
Tú, la Discípula, Esclava y Servidora del Señor.
Tú, la más Dócil a la acción del Espíritu Santo.
Tú, Gloria de la Santísima Trinidad. Enséñanos a servir
Reina de todos los caminos, puentes y calzadas.
Reina de todas las aves y animales que cantan.
Reina de todas las canoas, buques, vehículos e instrumentos de traslación.
Reina de todo lo que sirve para alabar a Dios.
Reina de todos los atabales, huéhuetles e instrumentos indígenas.
Reina de todos los panderos, violines, flautas y guitarras.
Reina de todos los instrumentos musicales, coros y alabanzas.
Reina de todas las danzas y bailes de alegría religiosa.
Reina de todos los penachos, coronas, pectorales y signos de distinción.
Reina de todos los adornos florales.
Reina de todos los que han pintado maravillosamente tu hermosura.
Reina de todos los escritores que han contado tus proezas.
Reina y Señora del pueblo de Israel, pueblo de la alianza.
Reina del pueblo de México, con el que Dios ha hecho una alianza especial.
Reina de América Latina, de toda la América Continental y de todo el mundo.
Reina y Señora de todo el universo.
Reina de los Angeles... Patriarcas... Profetas... Apóstoles...
Cordero de Dios...

1. Ambientación — Recepción — Animación
2. Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía; Hoy iniciamos una parte muy importante de nuestra Pascua Guadalupana pues consideraremos en resumen, durante estos siete días antes de la gran fiesta de Nuestra Madre, las siete estaciones; siete diversas manifestaciones especiales —Mariofanías-. Junto con ellas consideraremos sus mensajes que nos dejó durante los sucesos que se originaron el 9 de Diciembre y fueron coronados el 26, de manera tan especial, en la procesión que todos hicieron de la antigua Tenochtitlán al cerro del Tepeyac para dejar allí la Imagen-retrato de la Virgen Morena. Estos días nos ayudarán a tener una síntesis general pero amplia a la vez por la extensión de las lecturas y consideraciones que haremos del gran Acontecimiento Guadalupano.

Unámonos a todos los hermanos de México, de América Latina, de toda América, Filipinas y de muchas partes del mundo que hacen cada día estas estaciones, rosarios, peregrinaciones, novenas, docenarios, semanas y cientos de cosas más para cerrar las fiestas Guadalupanas ya en tiempo de Adviento y como preparación a una mejor celebración litúrgica y vivencial del Nacimiento del Señora Invitemos a Juan Diego para que nos acompañe de manera especial estos
días y recorramos con emoción el camino que él recorrió originalmente con nuestra Madre Santísima de Guadalupe.

Ella se presenta en este Continente de la esperanza como luz magnífica de Dios para iluminar a los pueblos indígenas y darles a la luz del mundo, Cristo, el Señor. Por eso la estrella de hoy es: Luz

Nota 1 : Como apoyo y para profundizar más estos días en el contenido y mensaje del Acontecimiento Guadalupano pueden servirse del libro: «Semana Guadalupana» que se basa en esas 7 especiales manifestaciones de María en México según el relato indígena de Antonio Valeriano. Lo edita también Buena Prensa. Allí encontrarán una metodología adecuada y diferente a la de esta Pascua pero propia, para vivir más intensamente los siete días previos de preparación a la gran celebración de México: la fiesta de Nuestra Morenita del Tepeyac, El guía tendría que cuidar que la dinámica y nombre de la estrella de cada día no se pierda sino se poten-
cie con la otra metodología

Nota 2: Pondré una pequeña síntesis del relato original antes de la lectura de los números correspondientes a cada día pero les sugiero que lean el texto que corresponde a los números señalados para cada consideración antes de rezar. El que guía debe tener bien localizados en el texto los números que se tienen que leer o una edición corrida del Nican Mopohua

III. Lectura del Nican Mopohua

(Desde el inicio hasta el no. 39. Está entre las páginas 32 y 54 de este libro)

Síntesis:

La primera estación Guadalupana que tomamos del Nican Mopohua abarca e/ inicio de la narración; relata cómo Juan Diego se dirige a México para ir a la catequesis de los sábados y su primer encuentro con la Virgen en el cerro del Tepeyac. Ella le hace saber quién es, quién es Dios, lo que quieren, el papel que él debe hacer en esta obra y cómo lo manda con el Sr. Obispo para que le construyan su casita sagrada, su templo, en el Tepeyac.

1. 
   Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego se dirige a Tlatelolco para participar en la catequesis y al pasar por el Tepeyac se siente como si ya estuviera en el paraíso. (N.M..: Desde el inicio hasta el no. 11)
Recorramos con Juan Diego este camino. Dejémonos sorprender también por los hermosos cantos que escucha. Pensemos en el interés que él tiene de ir a Tlatelolco a sus clases de catecismo para conocer más a Dios. Alegrémonos con él de lo que oye, ve y admira. Nosotros ¿qué tanto nos admiramos de la maravillosa creación de Dios? ¿Qué tanto nos esforzamos por conocer más a fondo al verdadero Dios?

Segunda consideración

La Santísima Virgen se presenta ante Juan Diego y le dice quién es. (12- 26 a)
Juan Diego se siente feliz al estar con Ella, la admira y escucha su presentación. Ella es la perfecta siempre Virgen Santa María, Madre del Verdaderísimo Dios. Contemplemos esta escena. Fascinémonos con la presencia de María y sintámonos junto a Ella como Juan Diego. Pidámosle que la conozcamos más, que seamos capaces de buscarla, amarla y servirla con todo nuestro corazón.

Tercera consideración

La Santísima Virgen le revela a Juan Diego quién es Dios (26b-26g)
La Virgen le da a conocer al vidente del Tepeyac al mismo Dios bajo distintos nombres y atributos. Ella se apoya en los nombres que los mismos indígenas daban a Dios. Con esta pedagogía Juan Diego se interesa por conocerlo más. Dios es Aquél por quien se vive, el Creador de las personas, -de los rostros y corazones según la tradición indígena-, el Dueño de la cercanía y proximidad; el
Dueño del cielo y de la tierra, ¡qué nombres tan bellos le da Ella! Pidámosle a Nuestra Madre que nos enseñe a conocer a este Verdaderísimo Dios y a amarlo y servirlo como se merece. ¿Qué tan dispuestos estamos para esforzarnos en conocer, amar y servir a nuestro verdadero Dios? ¿Seremos capaces de ofrecer parte de nuestro tiempo para orar, leer sobre el, asistir a cursos o
retiros que nos lo den a conocer mejor?

Cuarta consideración

La Santísima Virgen le descubre a Juan Diego la misión materna que Ella tiene con nosotros; cómo viene a darnos a conocer a Dios y a atendernos a sus hijos de una manera tan original y única en el Tepeyac. (26f-32) La Virgen dice que nos atenderá con todo su amor y compasión en el Tepeyac, en la casita que Dios, el pueblo y el obispo le pondrán como signo de la alianza de Dios y de Ella con su Iglesia. De esta manera podrá acompañarnos mejor a todos sus hijos durante la historia hasta que el Padre Dios cierre esta bellísima historia de Su presencia Guadalupana en el Tepeyac para todos.

Quinta consideración

María le descubre a Juan Diego su misión de profeta y lo envía con señor obispo para que éste también conozca el encargo que Dios y María le hacen. (33-39)
María le hace saber que él es el mensajero que debe ir con su recado obispo para que éste le haga su templo, su casita sagrada. Le dice que lo va a glorificar por el servicio que le va a hacer y le recalca que debe poner todo lo que esté de su parte para que todo salga bien. Juan Diego, confiado, se va a México darle el recado al señor obispo.

Contemplemos esta escena que completa esta primera estación tepeyacana. Gocemos y sintamos las palabras de María como dichas a nosotros Ella cuenta con nosotros para hacer una realidad nueva: la comunidad de los hijos de Dios; una sociedad justa y fraterna, verdadero y gran templo que esperan ella y Dios de nosotros.

1. 
   Reflexión y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos para que saquen provecho de esta primera estación y disponlos para que durante estos días vayan haciendo una síntesis que los ayude a vivir una vida marcada por el Acontecimiento Guadalupano. Que les quede claro cómo Dios es el autor de estos acontecimientos y cómo María también puso todo lo que estuvo de su parte para que este Gran
Acontecimiento tuviera éxito en ese momento. Que descubran cómo hoy nos llena de luz, de Dios mismo y esto los invite a llevar la luz de Dios y de María a otros.

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua
   Escuchemos el relato del Evangelio, que nos dice cómo María fue visitada por el ángel Gabriel y cómo así conoció su misión. A su vez Ella dará a conoce Juan Diego y al Sr. Obispo Zumárraga su respectiva misión.

Lectura base: Lc. 1, 26-38
Salmo: 15
Frase del Evangelio: «Bendita Tú entre las mujeres y Bendito el Fruto de tu vientre...» Lc. 1,42

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Letanías # 1 (Están en la pág. 31)

VIII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida

La estrella de mañana —de la siguiente sesión- será: Confortadora.

Nota: Ahora, con la canonización de Juan Diego, muchos tendrán ganas de darle un lugar especial a sus celebraciones. Pudiera ser conveniente que se pusieran de acuerdo los participantes en la Pascua para ver si quieren extender un poco la duración de la celebración de cada día en su honor durante los tres días previos a su fiesta que comienzan a partir de mañana. En tal caso, pueden usar mi libro: «Juan Diego Cuauhtlatoatzin, Profeta-Servidor» editado por esta misma casa editorial, que tiene una parte dedicada a celebrar a San Juan Diego.

1. Ambientación — Recepción — Animación
2. Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Les recuerdas que estos últimos días estamos haciendo una síntesis de  los acontecimientos Guadalupanos. Hoy toca la segunda estación de Nuestra Reina en el Tepeyac, Juan Diego va por la vez con el Obispo Zumárraga pero éste no le da mayor atención; se siente rechazado y va con la Virgen, quien lo consuela, lo levanta, lo conforta y lo vuelve a su dignidad. María, como buena Madre, anima a sus hijos, los educa para seguir luchando, para que no se cansen aun a pesar de las muchas dificultades y tropiezos que hay en la vida. Como Ella conforta a Juan Diego y también a nosotros la estrella de hoy es: Confortadora. Escuchemos el relato de este día.

III. Lectura del Nican Mopohua (40-67)

(Lo tenemos entre las págs. 54 y 67 de esta edición)

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Después de haber hablado con la Santísima Virgen, Juan Diego se va a buscar al Sr. Obispo a quien tiene que esperar para que lo atienda. (40-41) Pensemos lo que habría ido pensando y sintiendo en este recorrido del Tepeyac a México-Tenochtitlán itodo lo que habría ido pasando por su mente y en el corazón! La experiencia de la entrevista con la Virgen lo debió de haber consolado tanto que ni habría sentido los kilómetros que hay del Tepeyac al centro de lo que era la antigua Tenochtitlán. jQué dicha poder ser el mensajero de María con tan buenas noticias para su Obispo y su pueblo! Alegrémonos con Juan Diego por este gozo que lo invadía. ¿Cómo nos sentimos nosotros cuando vamos a llevarle a alguien alguna buena noticia? Recordemos alguna de ellas para unirnos más a Juan Diego y pensemos qué tan capaces somos de gozarnos y alegrarnos con los demás cuan- do están alegres y contentos: ¿cuál es nuestra actitud en esos casos?

Segunda consideración

Juan Diego le comunica al Sr. Obispo el encargo de la Señora del cielo.  Este lo oye con atención pero no le cree. (42-45)

Juan Diego presentó con mucha alegría al Obispo toda su experiencia, lo 166 que había vivido, oído, visto y experimentado. El Obispo hizo un esfuerzo para comprender lo que Juan Diego le quería decir. No fue fácil la comunicación pues hablaban lenguas diferentes y tenían culturas diferentes. El Obispo tiene de por sí muchos problemas de diverso tipo: la Primera Audiencia, los encomenderos, el clero... El Obispo le dice que considerará el asunto, que vuelva otra vez.
Sintamos con Juan Diego: él venía muy contento, seguro de que el obispo lo atendería bien y encuentra resistencia ante su testimonio.

Se siente rebajado de su dignidad, humillado. Acompañémoslo en este momento. ¿Cómo se habría sentido, sobre todo si consideramos que en la cultura indígena había que creer siempre en la palabra de los mayores? ¿Qué iría a decir la Virgen al conocer la reacción del obispo? Pidámosle a María, la que siempre escucha nuestras penas y necesidades, que nos ayude a superar las dificultades y situaciones en que sufrimos el  descrédito por parte de alguien.

Tercera consideración

Juan Diego se regresa entristecido pero la Virgen le sale al paso. (46-52) Imaginemos a Juan Diego cómo se regresaría hacia su casa por la calzada del norte. Ni lo más bello del lago le habría llamado la atención...regresa frustrado porque el obispo no le hizo caso. ¡Qué desmoronamiento interior! Llega al Tepeyac y la Señora del cielo le sale al paso para confortarlo. Juan Diego le saluda con cortesía, le dice lo que ha pasado y le pide que mande a otro más cualificado que él ante el Sr. Obispo pues él es poca cosa: escalerilla de tablas, lo menor de todo...

Ella lo escucha con todo su amor Consideremos este encuentro. Imaginemos a Juan Diego postrado a los pies de la Virgen, todo humillado, desconcertado, sintiéndose pésimo. Nos parecemos tanto a él cuando no creemos cada quien en nosotros mismos; cuando no creemos en las propias cualidades que tenemos y que hemos recibido a favor de otros y nos quedamos estacionados, pasmados, sin poder poner todo lo que está de nuestra parte para salir las dificultades...

¿Qué podemos hacer en adelante cuando nos sintamos así? ¿Cuál será la —supuesta que esperan Dios y María de nosotros? Pidámosle al Señor Jesús, que, humillado hasta la muerte, que no perdamos nuestra propia dignidad ni la confianza en nosotros mismos pues El nos la tiene.

Cuarta consideración

La Virgen le dice a Juan Diego que él es su mensajero digno de confianza, que vaya otra vez con el obispo. (57-62)
¡Qué alegría para Juan Diego ser confirmado en su misión por Ella, quien lo hace valer, lo hace sentir que vale, que es Su mensajero, que sin él no se podrá hacer este plan de Dios! Imaginemos el gozo interno, la reconciliación enorme que  vivió Juan Diego en su corazón: ¡él es una persona digna de la confianza de Dios y  de María! ¿Cómo nos sentimos cuando alguien confirma la fe que tiene en nosotros? Nosotros, ¿cómo tratamos a los demás? ¿Hemos ninguneado a alguien?  qué? ¿Cómo podríamos darle a los demás nuestra confianza? ¿Cómo creció Juan Diego ante el amor y la actitud de María? Así crecemos nosotros si confianza en ella..

Quinta consideración

Juan Diego le responde a la Virgen que irá con mucho gusto, otra vez, con el Sr. Obispo. (63-67)
Juan Diego, fortalecido por las palabras y la actitud de la Reina del cielo, se decide a llevar a cabo la obra que se le encomienda.

 Aprendamos de él a convertirnos, a ser decididos. Pidámosle, que por Su intercesión nada nos detenga en nuestra misión para hacer el plan que Dios tiene para todos y para cada uno de nosotros, para llêvar con alegría el mensaje de Dios y de María a otros. ¿Qué tan decididos estamos a poner todo lo que esté de nuestra parte para que Dios y María sean conocidos, amados y servidos?

1. 
   Reflexión y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a que capten cómo en México nos ninguneamos mucho, nos hacemos menos y nos estancamos. El país, desgraciadamente, se siente ninguneado, no se siente capaz de grandes empresas, de superarse. ¿Qué podemos hacer por los que se sienten menos... ? ¿qué vamos a
hacer por nuestro país?

1. 
   Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Guía: Vamos a ver cómo Jesús sufrió al máximo por nosotros y cómo le encargó a María estar al pendiente de nosotros.

Lectura base: Jn. 19, 25-27
Salmo: 40(39) 1-12a.
Frase del Evangelio: «Jesús, tomándola de la mano, la llamó con estas palabras: niña, levántate». Lc. 8,54

VII. Oraciones complementarias del rosario
Guía: Sugiero la letanía # 2 (Pág. 59) o que inventen una llevados por sus sentimientos de gratitud y esperanza.

VIII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida

La estrella de mañana -de la siguiente sesión- será: Amable
Nota: Inicia Triduo a San Juan Diego. Jaculatoria optativa para estos días: Juan Diego, hermano nuestro, enséñanos a contemplar
Guía:  Juan Diego hermano nuestro, enséñanos a contemplar
Todos: A Nuestra Madre Amada, Reina del Tepeyac.

1. Ambientación — Recepción — Animación

Guía: Para este día vamos a considerarla tercera estación Guadalupana. María, Nuestra Madre, le ofrecerá a Juan Diego la señal que le pidió el obispo. Nos fijaremos en las actitudes de Juan Diego, del Obispo, de María; en los títulos Marianos, los nombres bellos que aquí el autor le va dando a María. Uno de ellos es: Amable, y en verdad que Ella procedió con Juan Diego y procede con nosotros con toda amabilidad. La estrella de hoy, por estos motivos, la llamamos: Amable. Disfrutemos nuestra oración de este día Pidámosle al Padre Dios que nos disponga a celebrar su amor y el de María de manera que Él nos vaya trasformando en mensajeros de su alianza de amor, paz y fidelidad. Les recuerdo que estamos en el segundo día del Triduo a San Juan Diego; encomendémosle esta sesión.

1. Lectura del Nican Mopohua (68-93) (Está entre las págs. 70 y 83)

Síntesis:
El Domingo 10 Juan Diego va a ver al Sr. Obispo con el recado de la Virgen después de haber participado en la misa. Una vez que está con él le suplica que le crea que es verdad la petición de Ella. El Obispo pide una señal como prueba y Juan Diego le dice que diga qué tipo de señal quiere. El Obispo, habiendo visto más fuerte a Juan Diego en su pretensión, queda intrigado y manda a
unos de sus servidores que lo sigan para ver con quién habla y qué hace.

 Juan Diego se les pierde en el camino y ellos, molestos, le dicen a Sr, Obispo que no le crea, que sólo lo engaña. Juan Diego se encuentra con la Virgen y le hace conocer la petición que hace el obispo de que le dé alguna señal. Ella, amablemente accede y le dice que vaya por la señal al día siguiente.

III. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego va a Tlatelolco en la mañana del domingo y participa en la misa. (68-69)
Acompañemos a Juan Diego. Él va a alabar a Dios con el pueblo en la misa, y a hacer el favor que le pide la Virgen. Aprendamos de él a vivir como cristianos verdaderos, como quien se siente miembro vivo de una comunidad que en la Eucaristía se hace más pueblo de Dios porque allí proclamamos que la salvación de Dios es algo concreto y real que Él nos ofrece cada día y de manera privilegiada en la Misa de los domingos donde el pueblo recuerda y celebra el triunfo del Señor, Su resurrección gloriosa. ¿Qué tan buenos cristianos somos no sólo en el amor y servicio de todos los días a los demás sino también en la proclamación de nuestra fe y agradecimiento a Dios en comunidad? Pidámosle a Juan Diego que nos enseñe a ser miembros vivos del pueblo de Dios también en las celebraciones litúrgicas de nuestra fe.

Segunda consideración

Juan Diego va con el Sr. Obispo por segunda vez a manifestarle la voluntad de la Virgen. Este le dice que necesita una señal. (70-78) Juan Diego tuvo que insistir con el obispo hasta las lágrimas para que le creyera. La Virgen, la tarde anterior, le había dicho: «Hazlo oír» (al Sr. Obispo).  Juan Diego le ruega, le llora; él, todo un hombre de 57 años para que le crea a la Virgen...

Consideremos la humildad y paciencia de Juan Diego para llevar adelante la obra de Dios y de María. El Sr. Obispo lo investiga; lógicamente tiene que investigar de dónde viene la petición, por qué se hace. Como maestro de la verdad el obispo debe buscar, primero él, la verdad para proponerla a los demás. Al ver que Juan Diego está firme el obispo quiere concluir la entrevista diciéndole que es necesaria una señal. Aprendamos de Juan Diego a pedir las cosas con sencillez y humildad, y también con exigencia cuando es justo.

Tercera consideración

Juan Diego le dice al obispo que le pedirá la señal a la Virgen. (79-87) Con seguridad Juan Diego le pregunta al obispo cuál es la señal que quiere para pedírsela a la Virgen. El está muy seguro de quién es Ella. La fe es la seguridad de que Dios actúa en nuestra vida, de que nos oye y nos responde. Juan Diego es un hombre de fe. Primero María le ha manifestado que tiene fe en él. Ahora ante el obispo él hace profesión de fe de que María es capaz de darle la señal al obispo. Aprendamos de María, Nuestra Madre, y de Juan Diego, nuestro hermano mayor, a vivir en la fe. Una fe que Dios nos da, que nos infunde y nos fortalece como lo vemos en este pasaje. ¿Qué tanto creemos en nuestro Dios, en María, en nuestros hermanos? Investiguemos los misterios de nuestra fe para estar mejor cimentados en ella. Aprendamos del obispo a discernir y de Juan Diego a estar prontos para dar razón de nuestra esperanza. Pidámosle a Nuestra Madre que nos ayude a ser mejores servidores, mejores hermanos de todos y que sepamos interpretar bien a otros.

Cuarta consideración

La Santísima Virgen de Guadalupe se le aparece por tercera vez a Juan Diego y le promete la señal. (88-93) ¡Qué delicadeza de Nuestra Madre salir al encuentro de Juan Diego para fortalecerlo en su misión! Ella quiere que él la realice y le ayuda a poner los medios. Dejémonos penetrar por este amor tierno y eficaz de la Virgen. Agradezcámosle que salga al paso de nuestras dificultades y que nos dé tantos signos de Su amor y del cuidado amable y personal que tiene de cada uno de nosotros. Aprendamos de Ella a estar al pendiente del bien de los demás.

Quinta consideración

Los bellísimos nombres de María. (75)
Vamos a detenernos en estos momentos para considerar algunos de los dulces y bellos nombres de María que aparecen en esta parte de la narración Van a ser parte de la señal que Ella promete porque el Obispo oyó a Juan Diego decir estos nombres que no podía haber dicho él mismo sin una experiencia cercana de María. Se le dice a María: la Perfecta Virgen, la Amable, la Maravillosa Madre de Nuestro Salvador, Nuestro Señor Jesucristo. ¡Qué nombres y qué profesión de fe! En verdad Ella es Virgen, es Perfecta, Sumamente Amable y la Madre del Señor. Este hecho es el fundamento de todos sus bellos nombres. Gocemos estos nombres mientras vamos rezando las Ave-Marías,

1. Reflexión y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a que reconozcan los detalles amables que María ha tenido en sus propias vidas. Que esto los disponga para querer ser amables con otros como Ella es con nosotros,

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Guía: Descubramos las señales de Dios y de María: esa amabilidad sin límite que tienen con nosotros en tantas cosas y acontecimientos. El pasaje de las bodas de Caná servirá mucho para comprender esto.

Lectura base: Jn. 2, 1-11
Salmo: 65 (64)
Frase del Evangelio: «Jesús los abrazaba —a los niños- y luego ponía sus manos sobre ellos para bendecirlos...» Mc 10,16

1. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Inventen la propia letanía de este día o apóyense en las letanías Guadalupanas # 3 que están en la pág. 73.

VII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida
La estrella de mañana -de la siguiente sesión- será: Inmaculada l.

1. Ambientación — Recepción — Animación
2. Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Hoy —para los que hacen la Pascua continua- es la fiesta de la Inmaculada Concepción, fiesta muy grande y hermosa en toda la tierra porque festejamos el poder, amor y providencia de Dios que hizo a María Inmaculada desde el momento de Su concepción.

 A ese don inefable le añadió el de Impecable y así Ella permaneció inmaculada toda la vida, sin ninguna mancha de pecado. ¡Qué obra de Dios; una de las más grandes señales hechas por El en la historia de la humanidad! ¡Agradezcámosle este don que le dio a Nuestra Madre! Ella, personalmente, va a ser la Gran Señal que Dios le dará a/ Obispo y a esta tierra; las otras señales serán las flores, el ayate impreso con su retrato, la salud de Juan Bernardino y tantos milagros más. Pero Ella es la mayor señal... Pidámosle a Nuestra Madre Inmaculada que nos ayude a vivir sin pecado para gloria de nuestro Dios.

Por ser esta fiesta, la estrella de hoy lleva por nombre: Inmaculada Hoy consideraremos la cuarta estación Guadalupana, es la cuarta aparición de la Virgen a Juan Diego cuando le da la señal. Un gran día para México, para América y para el mundo ese 12 de Diciembre de 1531. Que el Dios de todas las alianzas, de las mejores noticias y los mayores consuelos nos anime a vivir estos días más a fondo para prepararnos mejor para celebrar la fecha de salvación que se acerca. Que San Juan Diego, a quien vamos a celebrar mañana, nos enseñe a dejarnos guiar por María para llegar a Jesús y a los hermanos.
 
Nota para los que hacen la Pascua contínua: Inician la presentación del día con el párrafo anterior solamente, a menos que hayan decidido acoplarse estos últimos días a las celebraciones tradicionales Guadalupanas.

III:  Lectura del Nican Mopohua (94-143) (Está entre las págs. 86 y 114)

Síntesis:

Juan Diego no se presentó el lunes 11 a la cita que tenía con la Virgen por la enfermedad de su tío. El martes 12 muy temprano salió rumbo a México Tenochtitlán para ir por un sacerdote que atendiera a su tío Juan Bernardino- le saca la vuelta a la Virgen para no entretenerse con Ella por el camino pero Ella sale al paso, lo consuela, lo manda a cortar las flores-señal a la cumbre del cerrillo para llevar la prueba al Sr. Obispo. Juan Diego se sorprende al ver las flores tan  variadas y tan bellas, lo más bello de la creación. Extasiado, consolado y seguro por ser la verdad —según la cultura indígena- las corta y se las baja a la Virgen. Ella las coloca en su ayate y lo manda con ellas como señal al Obispo.

Guía: Te sugiero que hagan la lectura de corrido para que saquen más fruto;  que sus sentimientos vayan madurando más. Es la parte más bella del relato. Luego, otra vez en cada consideración, vuelven a leer la parte correspondiente si pueden darse el tiempo y el lujo de poder hacerlo.
San Ignacio recomienda repetir los pasajes en donde hallamos más consolación y éste puede ser un día especial por tratarse de esta parte del texto y por ser éste el día de la fiesta de la Inmaculada (Nota especial para los de la Pascua contínua).

Lector:
«Y al día siguiente...»

1. 
   Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego atiende a su tío Juan Bernardino el lunes 11 y no va a ver a la Virgen. El martes 12 va a México pero da un rodeo para no encontrarse con Ella (94-104)
Juan Diego ya no puede retrasar más la asistencia espiritual a su tío Juan Bernardino; este mismo le ha insistido que ya está para morir. Preocupado por su tío-tutor primero quiere satisfacer su necesidad y encargo y luego atender las cosas de Dios y de María. Sabe vivir el mandamiento del amor... ¿de veras amamos a Dios y buscamos su Reino, ante todo; antes que a nosotros mismos? Qué María nos enseñe a amar a Dios sobre todas las cosas como Él nos ha enseñado a amar, especialmente a los que sufren, a los que están rodeados de problemas y no pueden vivir como Dios quiere.

Segunda consideración

La Virgen sale al encuentro de Juan Diego y le pregunta a dónde se dirige.
(105-116)

Consideremos la atención de la Virgen: cómo está al pendiente del tío y de la preocupación de Juan Diego; cómo baja del cielo y del cerro para encontrarse con su hijo que está en una situación desesperada que le quita la paz. Contemplemos esta escena tan tierna...sintamos cómo Juan Diego se expresa ante Ella con toda confianza y seguridad. Aprendamos de María a ser solícitos por el bien de otros; de nuestro profeta, a tratarla con toda confianza...

En realidad ¿nos preocupamos efectivamente por otros hasta el punto de busscarlos como María para atenderlos en sus necesidades? ¿Le tenemos a María -anta confianza como Juan Diego? Pensemos, mientras rezamos, en estas cosas...

Tercera consideración

María se le manifiesta a Juan Diego como su Madre Santa, Tierna, Bondadosa  y Compasiva, y lo invita a confiar en Ella; le asegura que su tío ha sanado (117,122)

Esta escena y estas palabras son la cumbre de esta revelación de la perfecta maternidad espiritual de María que hace en el Tepeyac. Gocemos y sintamos cómo Juan Diego queda sumamente consolado. Sintamos estas palabras como dichas a cada uno de nosotros. Arrojémonos al regazo espiritual de María para que Ella nos acoja y proteja como lo hizo con Juan Diego.

Digamos íntimamente a María: Tú eres mi Madrecita amada; yo me pongo en tu corazón, Tómame, recíbeme. Quiero ser un(a) buen(a) hijo(a). Confío plenamente en Ti; Tú serás mi señal como has sido la señal dada por Dios en este Continente americano... no permitas que caiga en pecado; Tú eres la mujer sin pecado...

Cuarta consideración

María manda a Juan Diego a cortar las flores a la cumbre del cerrito del Tepeyac; él las corta y se las lleva. (123-133)

Gocemos con Juan Diego este momento; sintamos con él cómo goza con las flores, cómo las huele, las contempla, tan perfectas, inmaculadas... las corta y se las lleva a la Reina Celestial. iCómo habrá sentido que María le da más de lo que podía suponer; cómo Ella le da la verdad con sus flores, como la señal de Dios! iQué alegría para todos tener un Dios y una Madre que cumplen, que nos dan la verdad, su perfección, su amor total..! Que Dios, que es la misma verdad, nos ilumine, y Ella nos consuele y alegre como a Juan Diego. ¿Qué tanto buscamos y vivimos en la verdad? ¿Somos para otros verdaderos mensajeros del Dios de la verdad?

Quinta consideración

María recibe las flores que le da Juan Diego, las toma en sus manos, las coloca en su ayate y lo manda con las flores como señal para el obispo. (134-143)

El inicio de la gran señal ya está dado. María cumple su promesa y da la señal. Ella, la Inmaculada, le da flores inmaculadas, nuevas, fragantes, a Juan Diego. iCómo Dios planeó y realizó tanta hermosura! Ahora Juan Diego irá a llevar las flores al obispo para que éste le haga a la Virgen la casita que le ha pedido. Por fin el Sr. Obispo podrá ser convencido... Sintamos la alegría que María siente al dar las flores a Juan Diego, al mandarlo con esa señal al obispo como mensajero de confianza. ¡Cómo se habrá ido contento Juan Diego! Sus sufrimientos quedan atrás; él ha sido levantado por Dios y por María de su postración. El podrá ya confiar en sí mismo, sabrá que es digno de toda confianza...

¿Alguna vez hemos sentido cómo Dios nos vuelve a nuestra dignidad de hijos suyos? ¿Podrá confiar María en nosotros como sus mensajeros...? ¿Estamos dispuestos a hacer el plan de Dios con toda nuestra alma y a llevar su verdad a otros?

1. 
   Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Ayúdalos a que expresen cómo se sienten ante la Virgen Inmaculada. ¿Cómo vivir el ideal de ser perfectos discípulos del Señor; perfectos hi- jos del Padre? ¿Han experimentado cómo María los ha ayudado para no caer en pecado? ¿Alguno quiere dar un testimonio?

Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Guía: Descubramos a María Inmaculada en la lucha contra el maligno. Ella siempre nos defenderá y se mostrará como Madre, Guía y Protectora, Modelo de fidelidad. Démosle gracias interiormente al Señor después de la lectura durante el silencio que vamos a hacer y extasiémonos ante la Madre y Virgen Inmaculada que nos ayuda en todo por voluntad del Padre.

Lectura base: Apoc. 11,19; 12,1-6 y 13 al 17
Salmo: 104 (103)
Frase del Evangelio: «Aquí están mi Madre y mis hermanos...» Mc 3, 34b
Frase del Evangelio del Tepeyac: «¿No estoy yo aquí que soy tu Madre?» N.M. 119

1. 
   Oraciones complementarias del rosario

Guía: Pueden usar la letanía # 4 que está en la página 90, o inventan una hecha por los presentes. Podrían decir después de cada frase:
Madre Inmaculada, ayúdanos a no pecar.

VII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida

Guía: Como oración final pueden decir la oración: Bendita sea tu pureza. (La tenemos en la sesión de María Madre de Cristo, al final).
La estrella de mañana será: Flor de flores

hoy llevará el nombre de: Admirable. Dispongámonos a participar y a admirarnos como los primeros testigos guadalupanos. Escuchemos pues el relato.

Guía: Sugiero hoy al inicio el canto: Paloma Blanca

1. Ambientación — Recepción — Animación
2. Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Estamos en la antevíspera de la gran fiesta. Cada año nos preparamos de manera especial para celebrar estos días tan guadalupanos. La presencia de María se siente viva por todos los países.

En las carreteras, calles, casas, todo va hablando de ella lo mismo que en los diarios: Ella es presencia alegre, viva y fecunda para México. Muchos extranjeros y gente nuestra que vive en varios otros países comienzan su éxodo de fin de año hacia México por esos días.

Prolongaremos nuestras fiestas hasta el primero de Enero: más de 20 días de fiestas seguidas comenzados por Jesús y María. El Adviento del Señor avanza también ¿cómo le haremos para que todas estas fiestas no se desperdicien, para que no nos quedemos únicamente en lo festivo y alegre con el peligro de que sea algo que sólo se quede en la superficie? Pidámosle a Nuestra Madre y a Juan Diego que nos ayuden a profundizar todo esto que vivimos.

La estrella de hoy se llamará Señora del cielo porque este nombre aparece en el relato de este día y porque por su poder de Reina de todo lo creado María sanó a Juan Bernardino de la enfermedad. Ella manifiesta también su poder al hacer del encuentro de los santos indígenas con e/ obispo un encuentro que sabe a cielo...

III. Lectura del Nican Mopohua (192-201) (Está entre las págs. 141 y 145).

Síntesis:
Después de que Juan Diego le mostró al Sr. Obispo en dónde quería la Virgen su templo se fue con algunas personas más hacia su casa para estar con su tío Juan Bernardino quien se extraña de que su sobrino llegue con tanto honor.

Este le explica por qué. Juan Bernardino, a su vez, le relata como fue su curación. Añade que la Virgen le dijo cómo quería que la nombraran: Nuestra Señora de Guadalupe y le dice que también la Virgen lo mandó con el Obispo para que le diera su testimonio. Van los dos santos indígenas con el señor obispo quien los hospeda varios días en su casa.

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego después de haber mostrado el sitio escogido por Dios y María para hacerle su casa desea ir a ver a su tío y pide permiso para ir a verlo. (192- 196) Nada más legítimo para Juan Diego que ir a participar su enorme dicha y gozo; nada tan natural como querer ir a celebrar con su tío la salud que ya tenía según le había dicho la Virgen. ¿Qué tan buenos deseos tenemos del bien de los demás? ¿Sabemos llevar a otros la alegría de nuestra salvación?

Segunda consideración
Juan Diego se encuentra con su tío. (197-202)

Imaginemos este encuentro. ¡qué gozo encontrarse los dos, tío y sobrino, en la dicha! Y esa dicha era originada, ofrecida y regalada por Dios que se hizo presente a ellos a través de su Maravillosa Enviada Consoladora: la Señora del cielo y Reina del Tepeyac. ¡Cómo habrán vivido felices este encuentro de liberación y amor de Dios y de María! Gocemos con ellos, sintamos la dicha que
tuvieron y pidámosles que nos enseñen a compartir los gozos y alegrías que nos da Dios.

Tercera consideración

Juan Bernardino le relata a Juan Diego cómo vio, admiró y fue servido por la Virgen. (203-208)
Reconstruyamos esta escena. Dos indígenas ya mayores, en su propia lengua y según sus costumbres y tradiciones, narran los prodigios que Dios y María les habían hecho. Veamos cómo Juan Diego escucha primero... Le cuenta el tío cómo la Virgen le pide que la nombren la perfecta Virgen. Santa María de Guadalupe. iCómo habrá puesto atención a las palabras de su tío tan querido! iQué feliz se habrá sentido al comprobar el amor de Dios y de María por su tío y
por él! ¿Cómo reaccionaría Juan Diego ante el nombre de la Virgen? ¿Se lo habrá dicho en su propio idioma? ¿Qué significa hoy para nosotros, nuestra familia, el Papa, México, ese bendito nombre?

Agradezcámosle a Ella que nos haya revelado Su nombre, que quiere decir, como hemos visto anteriormente, y según algunos: Río de luz o Río de amor. Gocemos los significados de este nombre...

Cuarta consideración

Juan Bernardino va a dar testimonio junto con Juan Diego ante el obispo. (209)
Imaginemos el encuentro del obispo con los elegidos de Dios, los videntes de María. iQué sorpresa para él saber que también Juan Bernardino había visto a María y que Ella le había pedido que le comunicara a él, la autoridad, sus deseos! ¡Cómo se habrá sentido consolado al ver que María confiaba en él! ¡Con qué gusto habrá escuchado y atendido a los dos privilegiados indígenas que habían 181 visto a María! Gocemos estos hechos y pidámosle a nuestra Madre que seamos testigos de su amor ante otros y que nos sepamos apoyar unos a otros como Juan Diego apoyó a su tío y los dos al obispo.

Quinta consideración

El señor obiSpo fray Juan de Zumárraga hospeda a Juan Diego y Juan Bernardino varios días. (210-211)
Estamos en la conclusión de los encyentros personales que aparecen en el relato original de las apariciones. Un encuentro modelo de lo que debe ser una relación entre obispos y sus hermanos laicos. El obispo ha sido convertido por Dios, por María y por los mismos indígenas, en un hombre que sabe escuchar, abre su corazón al amor fraterno y hospeda a aquellos en quienes antes no
creía, El gran mensaje de liberación de las personas está resumido aquí en unas cuantas líneas. iQué alegría ver lo que será el futuro de la iglesia anticipado en México hace cuatro siglos y un poco más! iQué esto nos llene de esperanza porque la señora de cielo, por encargo de Dios, irá haciendo aquí cada vez más esto mismo en la tierra como parte de un trabajo maternal con nosotros: la reconciliación entre todos sus hijos, la posibilitación de que nos estimemos todos y de que nos hagamos uno como el Padre quiere y Jesús lo ha pedido. Pidámosle a Ella, Madre y Reina, Señora y Abogada Nuestra, que ayude a sus obispos, a toda la jerarquía a abrirse a todos sus hermanos y que éstos aprendan a convertir a sus hermanos que tienen la autoridad en servidores, como lo hicieron Juan Diego y Juan Bernardino con su gran Obispo, Juan de Zumárraga. Dichoso él que tuvo de huésped a los más ilustres mexicanos...

1. Reflexión y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: ¿Qué les parece lo que oramos, leímos y meditamos hoy? ¿Qué sentimos de Nuestra Estrella, Reina del cielo? ¿Quieren comentar algo en especial? ¿Qué podemos hacer para que más familias y grupos acepten a María como Reina de sus vidas?

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado, en el Nican Mopohua

Lectura base: Jn. 1,35-51
Salmo: 116 (115)

Frase del Evangelio: «Vayan y digan a Juan: los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos quedan limpios, los sordos oyen, los muertos resucitan, se anuncia a lo pobres las buenas noticias idi-
choso aquél que no se escandalice de mí!» Mt. 11 , 4-6

 VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Puede ser la letanía # 6 que está al final de Estrella Guadalupe o el Ramillete de letanías Guadalupanas que está al final de la Visita a las capillas, iglesias, santuarios o a la Basílica, casi al final del libro.

VIII. Oración final Canto - Acuerdo - Despedida

La estrella de mañana será: Animadora.

Oración y canto

1. Ambientación — Recepción — Animación
2. Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Ya mañana es la gran fiesta Guadalupana, la Pascua anual de Nuestra Madre entre nosotros que comenzó desde 1531. Ella se nos ha hecho más cercana durante esta Pascua Guadalupana que hace muchos días empezamos con Ella que ha iluminado nuestro camino. Dejemos que nos conduzca pues estará más presente todavía estos días como es el sentir popular, la convicción de todos.

Hoy y mañana de manera especial nos unimos a todos los que han peregrinado al Tepeyac desde las primeras peregrinaciones que hubo para ver a la Virgen en un éxodo guadalupano inacabable para encontrarnos con Ella. Primero fue la peregrinación de la casa del señor obispo Zumárraga a la iglesia mayor que después fue la catedral, y 14 días después del día 12 la que le hicieron los primeros que tuvieron la dicha de hacerle su casa terrenal en el Tepeyac. Nos unimos también a los que han a peregrinado hasta la basílica desde sus lugares de origen y volverán a ellos con sus antorchas como Io hacen tantísimos Antorchistas Guadalupanos.

Nos sentiremos unidos a los que peregrinan a distintos santuarios Guadalupanos que tiene ella dedicados en nuestro país y fuera de éste. Gocemos y agradezcamos a Dios tantos favores y tanto bien recibido por tan innumerables hermanos. Démosle gracias a María, nuestra Madre, por su amor, su fidelidad, su presencia cariñosa entre nosotros y por todos los bienes que nos ha conseguido de Dios para cada uno y para todos, para nuestra Patria también, desde el Tepeyac.

Hoy consideraremos el relato del Nican Mopohua sobre el primer traslado. Los siguientes traslados y peregrinaciones que hubo ya no están narrados en este escrito sino en otros.

Este día la estrella llevará el nombre de: Animadora porque María sigue animando a nuestro pueblo, es el Alma de México, Nuestra Gran Animadora que nos anima a seguir a Jesús, a glorificar a/ Padre y a aceptarnos y apoyarnos como hermanos.

III. Lectura del Nican Mopohua (212-218)

Síntesis:
El señor Obispo traslada la Imagen de la Virgen de su oratorio particular a la iglesia mayor, Se hace el traslado y miles de personas van a verla, a admirarla, a hacerle oración y a comprobar que verdaderamente era una obra de arte divina. 184 IV. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

 El señor Obispo traslada la Imagen de la Reina del Tepeyac de su oratorio
a la iglesia mayor para que todos tuvieran la oportunidad de admirarla. (212-213) ¡Qué bella escena provocada por la devoción y admiración de un pueblo que quiere conocer a su Madre! ¡Qué don de Dios haber hecho esta señal para que todos pudiéramos conocer a nuestra Madre de una manera tan original y magnífica! Pensemos y sintamos cómo la mayoría que iba todavía no estaba bautizada. ¡Qué labor tendrían en esos días Juan Diego y Juan Bernardino para evangelizar y dar su testimonio a todos los que iban pasando! ¡Qué respeto y veneración de todos para estos santos hombres de su pueblo! Imaginemos cómo Juan Diego estaría cerca de Ella esos días para contarles a todos lo que él había vivido.

Juan Bernardino les contaría cómo lo había sanado. ¡Qué alegría y entusiasmo de todos! ¡Qué grandes animadores de ese pueblo indígena fueron la Virgen, Juan Diego y Juan Bernardino!
¿Qué tan capaces hemos sido de vivir las emociones y alegrías de nuestro pueblo? ¿Sabemos animarnos unos a otros y hacernos pueblo con otros? ¿Qué podremos hacer para ser mejores ciudadanos y celebrar juntos nuestras alegrías y esperanzas comunes tanto civiles como religiosas?

Segunda consideración

La ciudad se estremeció ante el Acontecimiento Guadalupano. (214)
¡Qué espectáculo tan extraordinario, digno de ser registrado en nuestra historia Patria como el momento de la verdadera gestación de ese pueblo nuevo, el origen de nuestro nacimiento e inicio del estremecimiento religioso y piadoso de una nación, que a partir de entonces, lleva a María en el corazón! Hoy todavía millones de mexicanos y muchos de otros países vamos a visitarla y nos estremecemos con júbilo al verla.

¡Qué bella manera de decirnos el influjo que tuvo la presencia de María en la ciudad! Ella fue capaz de estremecerla entonces. Y vemos cómo sigue siendo realidad eso hoy todavía. Todos los días Ella tiene hijos que la visitan en el Tepeyac, especialmente los domingos y días de fiesta, allí en su casa de México, la casa de los hijos de María. Ella nos anima siempre en verdad.

iY cómo está especialmente presente para todos desde el 11 de Diciembre -este día- en la noche hasta el 12 en la noche! Es una pascua del pueblo; todo el pueblo de México está al pendiente de la mañanitas, de lo que allí sucede; todo el mundo quiere hacerse presente...

Es el día de la Madre de México. Agradezcámosle a Dios, Dador de vida, que nos haya dejado a Nuestra Madre en el Tepeyac. y que Ella nos acerque a Dios, el único capaz de hacer tantas maravillas! Pidámosle que los mexicanos sepamos responder a la elección Suya y que seamos misioneros de Su amor y de Sus grandezas.

Tercera consideración

Los que visitaban a María reconocían que era un don de Dios. (215) En verdad esto lo siguen comprobando los años y las ciencias. ¿cómo explicarse que un ayate de dos piezas dure más de 470 años sin deshacerse o 185 desintegrarse estando en exhibición en una zona húmeda y salitrosa? ¿Cómo explicar que durante muchos años alrededor de quince ciencias investiguen sobre este hecho portentoso de Dios y confirmen que no está hecho por mano humana?.
Todavía hoy muchísimos seguimos opinando que Dios es el autor de todo esto puesto que este Acontecimiento Guadalupano sigue convocando a artistas, escritores, científicos y a tantos más a reconocer que Dios es grande, que es el único capaz de hacer maravillas de este estilo. Como dice el apóstol Santiago: «Toda dádiva buena y todo don perfecto desciende del Padre de las luces» (Sant. 1 ,17). Gracias, Padre, por este don insólito de tu amor. Gracias, Jesús, por darnos a tu Madre como Madre Nuestra. Gracias Espíritu Santo, porque has hecho maravillas en María y porque a través de Ella nos animas y llamas a todos a vivir la perfección, el amor , la santidad. iGloria y alabanza a Nuestro Dios y Señor!

Cuarta consideración

Los que acudían a ver a la Virgen María le presentaban sus plegarias. (216) i Y cómo no, si es la Madre cariñosa de mirada misericordiosa y compasiva! Con razón todos acudimos a Ella para contarle nuestras cosas y pedirle que interceda un nuestro favor, ante su Hijo. Ella que es amparo, auxilio y defensa nuestra como se lo prometió a Juan Diego nos anima a acudir a Ella misma con
toda confianza, y siempre, en nuestras necesidades. Pidámosle por todos para que Dios sea glorificado por esta salvación que realiza entre nosotros; que nos obtenga vivir el plan de Dios sobre todos para que reinen la paz, la justicia, la misericordia y todas las obras buenas que el Padre espera de nosotros para conseguir con El la Civilización del amor.

Quinta consideración

«Todos admiraban la Imagen no pintada por mano humana y comprobaban cómo milagrosamente había aparecido» (217-218) Imaginemos esta escena en que los primeros que fueron a visitar a María la tenían al alcance de las manos, inclusive tan cerca de sus ojos. Estaban tan cerca... Era tan pequeña la iglesia que todos se podían acercar mucho: tocarla, besarla. ¿Qué comentarían los que tuvieron la dicha de ser los primeros testigos de este Gran Acontecimiento? Pero Dios hizo este milagro no sólo para Juan Diego, el obispo y los demás de entonces; nos la ha dejado permanentemente en su casa del Tepeyac para gloria suya, de María, de nosotros, del mundo.

 El quiere que allí, de una manera especialísima, experimentemos el amor materno de María por cada uno. Quiere que todos recibamos el ánimo para seguir viviendo la perfección del Evangelio. Dios le puso su casa a María y ahora todos acudimos a Ella y seguimos admirando las maravillas de Dios. Y así será hasta el final de la historia humana.

Unámonos a María para proclamar que sólo Dios es grande, que no tiene fin su amor y su bondad permanece para siempre. Este es el final de la narración original indígena: la comprobación de que Dios es el autor magnífico de este milagro permanente en el Tepeyac. Y desde entonces María se quedó en México para todos...

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: Oriéntalos para que narren sus experiencias como peregrinos y comenten si han sentido lo mismo que se dice que sintieron los primeros que fueron al Tepeyac a ver a Nuestra Madre. Que se pregunten cómo animar a otros a vivir mejor como nos enseña Nuestra Estrella Animadora.

1. Lecturas bíblicas y comparación con lo leído y reflexionado en el Nican Mopohua

Guía: Después de la lectura ayúdalos a que vean cómo María en el Tepeyac, con su Hijo, nos resucita a muchos a vida nueva. Ella escucha nuestras súplicas y nos consigue más de lo que esperamos.
Lectura base: Jn. 11, 32-45
Salmo: 150
Frase del Evangelio: «Yo les digo: si ellos se callan hasta las piedras gritarán». Lc. 19,40

VII. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Hoy podemos componer una letanía hermosa a favor de Nuestra Madre Admirable, Perfecta, Animadora; lo hacemos? Si no, pueden usar e/ Ramillete de letanías Guadalupanas. (Está al final de la visita a la Virgen, página

VIII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida

Guía: Como oración final o como canto (si lo saben cantar) puede ser el Magnificat de la Virgen (Lc. 1, 46-55)
La estrella de mañana será: Perfecta

Nota: Para mañana hay que prever todo muy bien pues habrá especiales situaciones que podrán dificultar la celebración normal porque unos pre- ferirán hacer cosas que han hecho otros años o quizá quieran ver los programas de televisión que ofrecen variedad de aportes Guadalupanos.
Esperamos sea una sesión muy rica, Si no la pueden hacer en grupo háganla a nivel personal.

1. Ambientación — Recepción — Animación
2. Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Guía: Alegrémonos porque hoy es el gran día de México. Vivámoslo con todo nuestro amor y agradezcamos a Dios su maravillosa providencia, y a nuestra Madre, su continua y maternal presencia entre nosotros. Todavía no es el final total de esta Pascua Guadalupana ya que falta el día de mañana (o la próxima sesión para los que hacen la Pascua durante el año), que nos ayudará para asimilar y agradecer todo lo vivido estos días, para evaluar los frutos y sacar los compromisos pertinentes. Y esto no se logra si no es en el amor que opera, por la fe, el amor solidario, la justicia recreativa, la capacidad de ser hermanos y de vivir dignamente la elección divina que el Padre ha hecho de nosotros y que el Espíritu Santo acompaña y guía con tanta suavidad y exigencia
a la vez.

 Todo esto nos va preparando con la ayuda de Nuestra Madre para la Navidad ya cercana.

Caminemos con Ella este día de manera especial para que nos disponga a ser fieles y a preparar un mundo nuevo para todos como lo vino a hacer desde el Tepeyac. Pidámosle que nos ayude a ser mejores servidores de la causa de su Hijo que es la causa del hombre: que todo aquél que es semejanza de Dios viva a plenitud su vida porque a eso ha venido Jesús a esta tierra.

Los invito a celebrar con toda alegría a la Perfecta Virgen Santa María, como es llamada varias veces en el Nican Mopohua nuestra Madrecita, la Morenita del Tepeyac. Por ser el día que remata todas las acciones de Dios y de María de manera perfecta en el Tepeyac la estrella de hoy es: Perfecta Este día hay muy variadas celebraciones en el país, en las familias y en los grupos o comunidades: unos peregrinan durante el día, otros ya lo hicieron en la noche; algunos hacen la celebración en un asilo, casa hogar o casa de descanso para ancianos y muchos durante el día van viajando de ida al Tepeyac o regresan de allá a sus casas y pueblos.

Por eso la celebración de este día puede ser muy variada. Que cada quien o cada grupo vea qué es lo más conveniente para
realizar esta sesión.

Nota metodológica: Para hoy propongo un rosario especial sintético de siete misterios con las siete Manifestaciones Guadalupanas más importantes y que hemos recorrido estos últimos días y de modo especial los últimos siete. Al final de cada hecho propongo un salmo o alguna otra cita bíblica para que nuestra Pascua Guadalupana tenga este día más elementos bíblicos que nos ayuden a ligar este

Acontecimiento Guadalupano con todo eol plan universal de salvación de Dios. Pongo también un canto para cantarlo al terminar las Ave-Marías después la lectura y el salmo.

En todas las estaciones, al terminar la lectura del Nican Mopohua, o en su defecto del enunciado de la consideración, y de la lectura de/ Nuevo Testamento pueden hacer algunos comentarios breves para ver la relación existente entre los textos y las consideraciones. -si hacen este día a nivel personal valdrá la pena meditar un momento esta lectura- después leen el salmo.

Pueden cantar alguna frase de éste que sirva para ser repetido a manera de pequeña estrofa como se hace en las celebraciones Eucarísticas. Si para algunos se les hace difícil hacer tantos comentarios los pueden dejar para el final. (Apartado V de este día), Puesto que en cada estación hay textos bíblicos, en este día suprimimos el apartado dedicado a las lecturas bíblicas que hemos tenido ordinariamente. Podríamos iniciar la celebración de este día con las: Mañanitas
guadalupanas.

III. Lectura del Nican Mopohua

Nota: Para quienes tengan tiempo les recomiendo que vayan leyendo el suceso de cada estación según los números de/ Nican Mopohua que pondré en cada una de las estaciones. Para los que no tengan tiempo simplemente enuncian el título del hecho que se medita. Los textos los pueden ir
buscando en los días en que fueron considerados o bien usar un texto corrido que tenga a la mano alguno de los participantes.

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera estación: (Nican Mopohua, desde el inicio hasta el # 39). La Santísima Virgen se le aparece por primera vez a Juan Diego en la madrugada del 9 de Diciembre de 1531 en el cerrito del Tepeyac. La Perfecta Virgen, Madre de Cristo y Madre Nuestra vino a manifestar el plan de Dios que la envía para estar con nosotros en su casa del Tepeyac.

Ella le revela a Juan Diego quién es Ella misma y su misión: viene a darnos a Dios y a atendernos; por eso necesita su casita sagrada: para dárnoslo a él, Verdaderísimo Dios, y para servirnos personalmente. Al descubrir quién es Dios el pueblo va a recuperar su deseo de vivir, de esperar, de avanzar. Ella les manifiesta a Juan Diego y a fray Juan de Zumárraga cuál es su misión.

Agradezcámosle a Dios que nos haya enviado a Nuestra Morenita tan perfecta, modelo de entrega total, tan buena mensajera y tan excelente y eficaz Madre Nuestra. Lecturas bíblicas: Gálatas 4,3-7
Salmo: 46 (45)
Canto: Desde el cielo

Segunda estación: (40-67). Juan Diego se entrevista con el Sr. Obispo pero no obtiene la respuesta deseada. Muy triste se regresa al Tepeyac en donde la Santísima Virgen lo levanta de su pena y tristeza y le confirma la misión que le ha encargado. Lo vuelve a mandar con el obispo como su mensajero muy digno de confianza.

Pensemos, sintamos que María nos envía también como mensajeros de la Nueva Alianza, del Evangelio de su Hijo. Pidámosle que sepamos ser mensajeros de Su amor.
Lecturas bíblicas: Mt. 10, 1-15
Salmo: 42 (41)

Canto: El milagro de las rosas o el Ave María de Juan Diego.

Tercera estación: (68-93). Juan Diego, el Domingo 10, va temprano a Tlatelolco para la celebración de la Eucaristía. De allí va por segunda vez con el obispo fray Juan de Zumárraga a darle el recado de la Virgen. Este lo oye con atención y le pide alguna señal, Juan Diego regresa con la Virgen al Tepeyac y le da el recado del obispo. La Virgen lo escucha y lo cita para darle la señal al día
siguiente. Pensemos y sintamos cómo Dios ha sido bueno con nosotros y nos da signos de cómo está junto a nosotros. También María nos acompaña siempre para darnos signos de amor materno, perfecto y alentador.

Lecturas bíblicas: Lc. 1, 39-45
Salmo: 65 (64)
Canto: Himno guadalupano: Mexicanos, volad presurosos o la nueva verSión: Mexicanos, vivamos alegres.

Cuarta estación: (94-143). Juan Diego no se presentó el lunes 11 con la Virgen porque su tío se agravó mucho.

El Martes 12 va a Tlatelolco por un sacerdote para que atienda a Juan Bernardino que está a punto de morir. Al pasar por el Tepeyac le saca la vuelta a la Virgen para no entretenerse, pero Ella le sale al paso, lo consuela, lo fortalece y le dice las palabras más sublimes que hemos escuchado de Ella: «¿No estoy yo aquí que soy tu Madre? ¿No estás bajo mi sombra y amparo? ¿No soy tu salud, fuente de tu alegría? ¿No te tengo en mi regazo? ¿Tienes necesidad de alguna otra cosa?» Una vez que le ha dicho estas palabras de consolación lo manda a la cumbre del cerrito por la señal: las flores. Recordemos que son símbolo de la verdad para el mundo de Juan Diego; él sube, las contempla, las corta gozoso y se las lleva a María.

 Ella se las reacomoda en el ayate y lo manda con el Sr. Obispo. Sintamos profundamente en este momento cómo María nos ama, se preocupa por nosotros y nos promete traernos en su corazón y atendernos. Confiemos
más y más en ella. Hoy nos da sus flores de compromiso, de verdad y de vida 190 nueva. Aceptemos y vivamos esta alianza que nos ofrece. Seamos testigos de la verdad y amor de Dios y de María. Pidámoselo en este misterio.
Lecturas bíblicas: Jn. 2, 1-11

Salmo: 104 (103)

Canto: Tonantzin icuic (Canto a nuestra Madre) o Virgen ranchera.

Quinta estación: (144-191). Juan Diego se encamina a su cita con el Sr. Obispo, le lleva en su ayate la señal y va feliz por la calzada. Llega al obispado y espera pacientemente ser recibido. Cuando lo recibe el obispo le cuenta todo lo que ha vivido y le da la señal, las flores. En ese momento se imprime en el ayate la imagen de la Virgen como hoy la conocemos.

El obispo llora, pide perdón y
pone el ayate glorificado en su oratorio. Acompañemos a Juan Diego y al Sr. Zumárraga en este acontecimiento privilegiado en la historia de la humanidad. Contemplemos con ojos de fe y con
alegría esta nueva ratificación de la alianza de Dios con sus hijos a través de Santa María de Guadalupe. Sintámonos más comprometidos porque ha sido realizado en México. Glorifiquemos a Dios, Fuente de todo consuelo, porque no tiene fin su amor. Seamos dignos de este don único que nos ha hecho y démoslo a conocer a todos para que vivamos como pueblo de Dios. Que el Evangelio del Tepeyac nos ayude a vivir más alegres, confiados y comprometidos.
Lecturas bíblicas: Lc. 22, 14-20
Salmo: 147
Canto: Reina de la nación.

Sexta estación: (192-211). Después del gran milagro de la impresión de la Virgen en el ayate de Juan Diego éste es hospedado por el Obispo quien le pide que lo lleve al sitio elegido por la Virgen para hacerle su casita. Van con muchas personas y comienzan el trabajo. Juan Diego pide permiso para ir con su tío Juan Bernardino y es acompañado por personas de confianza del Obispo. Juan Bernaráno da testimonio de que María se le apareció, lo sanó, le dijo lo que pasaba con su sobrino, lo mandó a dar testimonio con el obispo y le dijo el nombre que habría de dársele a ella: la siempre Virgen Santa María de Guadalupe. Los dos, tío y sobrino, van con el Obispo, le dan testimonio y se quedan hospedados con éste mientras construyen la casita de María. Sintamos cómo Dios y María se preocupan por nuestro bien. Testigos tenemos a Juan Diego y a Juan Bernardino que fueron muy bien atendidos en su tiempo por Dios, Dador de vida, y por María, Madre de nuestra esperanza.

Confiemos en Ellos, digamos y sintamos lo que dice san Pablo: «Sé en quién he  confiado». Pidamos por los obispos del mundo para que siempre sepan acoger amor a cualquier persona, especialmente a los indígenas necesitados y marginnados.

Lecturas bíblicas: Rom. 8, 29-39
Salmo: 115 (114)
Canto: Ave Guadalupana

Séptima estación: (212-218). El Obispo trasladó la Imagen-retrato de María a la iglesia mayor para que el pueblo la conociera y la venerara mientras se construía su casita en el Tepeyac. La ciudad se conmueve ante el acontecimiento y todos van a admirarla, a pedirle favores, a comprobar que es un milagro divino.

 Sólo Dios pudo haber hecho esta Maravilla Americana y Mexicana. Démosle
las gracias al que todo lo puede y a todos y en todo nos conforta. Gocemos con los que fueron testigos privilegiados de estos acontecimientos. Alabemos a nuestro Dios con toda la creación y con María misma.

Pidamos especialmente por todos los que no creen, por los que han perdido la esperanza y el deseo de vivir.
Lecturas bíblicas: Lc. 2, 22-38
Salmo: 110 (109)
Canto: No, nunca te alejes.

1. Reflexiones y comentarios sobre lo meditado hoy

Guía: En caso de que no se hubieran hecho comentarios antes procura facilitar que se hagan en este momento, de manera que haya devoción; que los participantes queden muy satisfechos de haber orado este rosario, síntesis de los Acontecimientos Guadalupanos. Podrías leer el texto que está a continuación. El Episcopado Latinoamericano ha proclamado que María es la Madre que
ha acunado a este Continente de la esperanza. Meditemos lo que nos dicen y agradezcámosle a Ella y a Juan Diego su intervención a favor de todos nosotros.

«Confirmando la fe de nuestro pueblo queremos proclamar que la Virgen María, Madre de Cristo y de la Iglesia, es la primera redimida y la primera creyente. María, mujer de fe, ha sido plenamente evangelizada, es la más perfecta discípula y evangelizadora (Cf. Jn. 2,1-12). Es el modelo de todos
los discípulos y evangelizadores por su testimonio de oración, de escucha de la palabra de Dios y de pronta y fiel disponibilidad al servicio del Reino hasta la cruz. Su figura maternal fue decisiva para que los hombres y mujeres de América Latina se reconocieran en su dignidad de hijos de Dios. María es el sello distintivo de la cultura de nuestro Continente.

 Madre y Educadora del naciente pueblo Latinoamericano, en Santa María de Guadalupe, a través del beato Juan Diego, se «ofrece un gran ejemplo de evangelización perfectamente inculturada» (Juan Pablo ll, discurso inaugural, 24). Nos ha precedido en la peregrinación de la fe y en el camino de la gloria, y acompaña a nuestros pueblos que la invocan con amor hasta que nos encontremos definitivamente con su Hijo. Con alegría y agradecimiento acogemos el don inmenso de su maternidad, su ternura y protección, y aspiramos a amarla del mismo modo como Jesucristo la amó. Por eso la invocamos como Estrella de la Primera y de la Nueva evangelización». Doc. Sto. Domingo # 15

1. Oraciones complementarias del rosario

Guía: Si quieren hagan una letanía inventada, devota y breve. Pueden usar también e/ Ramillete de letanías Guadalupanas (página 211) o alguna otra

VII. Oración final — Canto — Acuerdos — Despedida

Nota: Puesto que desde la introducción a esta Pascua les mencioné la necesidad de hacer un último día después del 12 para terminar con calma y hacer una evaluación de toda la experiencia, pónganse de acuerdo en cómo harán la sesión. Yo les ofreceré un rosario especial en honor de
Juan Diego, el mensajero estrella de María. Él es modelo del pueblo fiel y bien vale la pena terminar estos días pensando qué nos toca hacer hoy a nosotros como é/ hizo lo que tenía que hacer en e/ tiempo que le tocó vivir después de estos acontecimientos tan especiales. Como hoy terminaron los 46 días tradicionales ya no habrá mención de la estrella de/ día. Valdría la pena que varios prepararan la sesión para hacerla bien.

Decidan si van a hacer alguna convivencia final para celebrar toda esta vivencia tan rica de tantos días. En este caso toman los acuerdos para que todo salga bien. Habrá que prever otros signos. De cualquier manera, hay que anticiparles que será una sesión larga pero muy provechosa y en un clima sabroso de convivencia y agradecimiento.
Es muy conveniente que asistan muy bien dispuestos y con proposiciones concretas para ver quién quiere organizar después de todos estos días de la Pascua guadalupana algún seguimiento grupal con el fin de no perder el fruto y de seguir viviendo más comunitariamente. Si no han leído el
Evangelio completo, al menos de alguno de los Evangelistas, habrá que iniciar con eso el seguimiento futuro del grupo y ver cómo vivir eso que se va leyendo. El canto final podría ser: Desde el cielo, Reina de la nación u otro que juzguen pertinente para este día tan especial. Nota: Habrá que pedir para la siguiente sesión que se traiga alguna ofrenda; que se piense en algún regalo, estampa o recuerdo de tema Guadalupano. Se podría pensar en preparar un compromiso de todos que se exprese en un escrito que al terminar sea firmado por los que participaron en
toda la Pascua.

Se podrían poner flores según el número de participantes; que tenga cada una el nombre de éstos para que les recuerde que cada uno es una flor de María para los demás: que cada uno debe ser buen olor de Cristo para los otros. Esto llevará a un compromiso y a un buen final de nuestra Pascua. .

1. Ambientación — Recepción — Animación

Nota: Habrá que prever que este día haya signos de gratitud a Dios, a María, a Juan Diego y a los que participaron con nosotros durante esta Pascua Guadalupana. Hay que arreglar la casa o sitio de reunión de manera especial para que se sienta un ambiente muy acogedor tanto para la
evaluación como para la oración y convivencia.

1. 
   Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Nota: Es el último día de esta Pascua Guadalupana que debe de haber dejado bastante fruto entre los participantes. Es la oportunidad de ayudar a todos a que no se quede en lo bonito de las reuniones y del mensaje ni quede en el aire esta larga experiencia de oración y de encuentro grupal o comunitario.

Hay que ayudar a propiciar un clima de asentamiento de toda la experiencia. Valdrá la pena recoger el fruto de toda esta experiencia global personal, grupal y comunitaria.
Tanto el guía, como los anfitriones, en caso de que se haya hecho esta experiencia en la misma casa todo el tiempo, o quien convocó a esta experiencia debe facilitar al grupo de participantes la oportunidad de organizarse de alguna manera para adelante de manera que no se pierda todo
este esfuerzo.

 De aquí puede brotar la experiencia de hacer otro tipo de Rondas Guadalupanas durante el año para que este mismo grupo siga a María y a Jesús sin perder el fruto comunitario ya logrado. Una imagen peregrina de Santa María de Guadalupe puede ser la que los ayude a mantener la unidad y e/ fruto y compromiso de estos días —eso si no lo hicieron ya así anteriormente-. Hoy mismo pueden acordar cuándo se podría iniciar la visita de la imagen entre los participantes. Podría ser desde este día o bien desde los primeros días del año siguiente.

Quizá se podrá iniciar el día primero de Enero porque es la fiesta de Santa María Madre de Dios. Si no comienza esa ronda de visitas desde hoy se podría hacer el sorteo para que los que participan sepan cuál es el recorrido que se va a seguir. Mientras tanto la imagen peregrina la podrán tener los días siguientes quienes cumplan años, tengan algún motivo especial o quien haya organizado esta Pascua Guadalupana.

Recientemente, Buena Prensa me publicó el libro: «Docenario Guadalupano», que puedes ayudarles a renovar su compromiso, cada día 12 de cada mes. La metodología es muy parecida a la de esta Pascua. El tema de hoy será sobre la persona de Juan Diego y lo que é/ nos puede enseñar para vivir como hijos de Dios. Según esté e/ grupo dispuesto o lo hayan preparado desde antes la parte de la evaluación la pueden hacer después de lo que consideraremos sobre Juan Diego o bien antes como lo propongo enseguida. El guía y los promotores de la Pascua decidirán lo mejor una vez que hayan leído juntos la sesión que será larga.

 Adviertan esto a los participantes y escojan bien el día... La oración inicial puede ser breve y ya sin tomar en cuenta la que se proponía al principio de/ la Pascua por haber pasado ya el día de Nuestra Madre del Tepeyac. Después de la oración el guía puede usar las siguientes preguntas de apoyo para iniciar con más profundidad esta sesión y así facilitar que los participantes puedan llegar a acuerdos más concretos.
Solamente les recomiendo que no pase de una hora la evaluación y que traten de ser muy concretos.

Guía: Vamos a preguntarnos algunas cosas para sacar provecho de las experiencias de todos estos días; dejaremos un minuto para pensar después de cada pregunta.

¿Cómo nos sentimos después de estos días tan llenos de la presencia de María, Nuestra Madre? Procuremos no decir vaguedades. Vamos a comentar todos, en lo posible. (tiempo...) ¿Qué fruto espiritual nos ha dejado de esta experiencia compartida? (tiempo ¿Qué tanto nos ha servido esta experiencia para conocer y amar más a Dios y a María? Ojalá algunos nos digan hechos concretos que así lo hagan ver. (tiempo...) ¿Qué tanto ha crecido nuestro amor por las cosas de Dios: sus sacramentos, los ritos, la liturgia de la Iglesia? (tiempo...) ¿Qué tanto más a fondo vivimos estos días los mandamientos y más todavía el mandamiento del amor y de la unidad? (tiempo) ¿Qué necesitamos conocer y vivir más de nuestra fe. ? ¿Hay algunos puntos concretos de interés? (tiempo...) ¿Qué vamos a hacer juntos para hacer crecer nuestra fe y apreciar más
todo lo referente a Dios y a María? (tiempo...) ¿Qué servicios nos estará pidiendo Dios a nosotros en concreto en favor de los más necesitados? ¿Hay algunas otras sugerencias? (tiempo...) ¿Cómo vamos a organizarnos? (tiempo...)

Guía: Procura recoger el fruto global e inicia la oración. Vamos a iniciar el último rato de oración, y a conocer más a Juan Diego quien nos podrá inspirar, acompañar y presidir para inspirarnos en nuestra acción futura.

Nota: Según la posibilidad del grupo se hace esto como rosario, o bien se toman en cuenta los cinco puntos para reflexionar y se deja un rato después de la lectura de cada punto para meditar lo que hacía y vivía Juan Diego, Si algunos no pueden ya rezar el rosario o meditar por el poco tiempo disponible o por alguna otra razón pueden rezar todos un misterio al final. Pero, Io importante de este día, es llegar a conocer más a Juan Diego y a hacer acuerdos concretos para organizarse. En este caso podrían tener más reuniones en adelante para esto mismo los días que elijan.

III: Lectura del Nican Mopohua

Según los acuerdos a que hayan llegado y el tiempo de que dispongan se juzgará si se lee y comenta alguna parte de este relato o si ya no es posible hacerlo. De hecho cada consideración o punto para la meditación incluye varias citas del Nican Mopohua. Podrán hacer alguna de esas lecturas, todas o ninguna; en este caso se quedarán ya sólo con las preguntas de meditación que les ofrezco al final de cada consideración.

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

Juan Diego es un hombre que busca a Dios.

Lector:
Se puede afirmar que Juan Diego es un hombre religioso: probablemente lo había sido desde antes de ser cristiano. Como muchos de su coetáneos habrá dado culto al Dador de vida, al que está cerca y junto, al Creador de los rostros y corazones. En la primera aparición de la Virgen se relata que iba a la casa de Dios (6) y a seguir comprendiendo sus mandatos. Cuando se encuentra rondando ya el ambiente celestial se pregunta si ya está en el cielo (#10); lo mismo afirma cuando
da testimonio ante el obispo (#176). Va a su misa del domingo 10 en la mañana antes de ir por segunda vez con el obispo (#68 y69). Por último estima a los sacerdotes (#97 y 113), es hombre de fe (#6, 68, 97, 113, 169, 175), y ama entrañablemente a Nuestra Señora (#24, 38, 50, 56, 63, 66, 110, 111, 116, 165).

Aprendamos de Juan Diego a vivir en la fe, a amar a Dios y a María; a apreciar todo lo que Dios nos ha dado para ayudarnos a vivir como cristianos: los sacramentos y otros signos, y personas relacionadas con el mundo de la fe. Vivamos el amor a Dios como nos enseña Juan Diego.
Decena del santo rosario si lo deseas. (Así después de cada consideración).
Guía: ¿Para qué nos podría servir a cada uno y a todos como familia, grupo o comunidad lo que acabamos de considerar? ¿a qué nos llama Dios con el ejemplo de Juan Diego?
Nota: Estas mismas preguntas nos las podemos hacer al final de cada consideración.

Segunda consideración

Juan Diego sufrió como cualquiera de nosotros; pero se levantó y se dejó hacer un hombre nuevo por Dios y por María.

Lector:

Juan Diego supo enfrentar los problemas; (#70-73; 95-96-111-114; 147- 151). Se dejó levañtar por la Virgen de la opresión en que estaba (#63-64). Esperó también el trabajo de su muerte con paz como cuenta la historia. Aprendamos de Juan Diego a vencer las dificultades, a poner mucho ros-
tro y mucho corazón —como decían los indígenas- en nuestra vida ante la soledad, las incomprensiones, los temores y miedos, las enfermedades, las faltas de entendimiento, la muerte.
Guía: Pensemos y reflexionemos un poco: de ordinario, ¿cómo le salimos al paso a las dificultades? (tiempo...) ¿Cómo vivimos nuestros dolores y nuestras enfermedades? (tiempo...) Cuando alguien está enfermo de nuestra familia o de nuestros amigos ¿nos ayudamos en la pena y el dolor? ¿Qué hacemos en esas circunstancias? (tiempo...) Cuando otros obstaculizan nuestro trabajo ¿Qué hace-
mos? ¿nos echamos para atrás por cualquier cosa? (tiempo...) ¿Hay algo que podamos hacer juntos para mejorar nuestro ambiente de dolor, pena, angustias, miedos? ¿Qué vamos a hacer? (tiempo.

Tercera consideración

Juan Diego es un hombre que vive con dignidad, esfuerzo y fortaleza la vida divina que Dios nos comunica por el Sacramento del bautismo.

Lector:

Juan Diego es un hombre que hace vida de familia, estima y ama al prójimo (#96, 113); respeta a aquellos con quienes trata (#41 y 147-148 y 151-153): tenía que caminar muchos kilómetros a la ida y de regreso a su casa para ir a las cosas de Dios y para servir a su prójimo (# 6, 47, 68, 95-99; 192-195); hacía con alegría los trabajos y más si se trataba de hacer un favor a alguien (# 17-131-134; 143; 146, 192, 194; 209;210). Aprendamos de Juan Diego cómo vive su vida ordinaria: el amor a Dios y al prójimo y cómo con toda sencillez trabaja y hace los servicios propios de alguien que vive en familia, como Iglesia y dentro de la sociedad.

Guía: Pensemos, reflexionemos y comentemos un poco: ¿cómo vivimos los trabajos ordinarios que tenemos que hacer? ¿vivimos en la queja o el suspiro o ponemos todo lo que está de nuestra parte para que salgan bien? (tiempo...) Cuando nos piden un trabajo que no teníamos planeado y tenemos que hacer un esfuerzo a favor de alguien que nos va a llevar tiempo, esfuerzo, molestias y hasta dinero ¿qué hacemos; cómo respondemos a estos sucesos? (tiempo...) ¿Tomamos la vida con fe como Juan Diego y hacemos nuestros servicios y trabajos de cada día por amor a Dios y al prójimo? (tiempo...) ¿Qué tanto colaboramos con las obras que hay que hacer en la comunidad ambiental: los trabajos de las banquetas, el aseo, el buen cuidado de las cosas, la colaboración con el municipio... ? ¿Se puede decir de nosotros que trabajamos y colaboramos en todo desde la fe y
198 por amor? (tiempo... ) ¿podemos decir que estamos contentos con nosotros mismos por lo que hacemos a favor de otros como el Señor Jesús nos ha enseñado? ¿Llevamos a la práctica lo que el dice: «He venido para que tengan vida y la tengan en abundancia..»? (Jn. 10-10) (tiempo..)

Cuarta consideración

Juan Diego es un hombre que vive su misión y ayuda a que la Iglesia sea campo del Señor, familia de Dios, y a que María sea querida, estimada y servida como Madre nuestra.

Lector:

Juan Diego tenía ya 57 años cuando María le manifiesta su vocación. Fue escogido por Dios para llevar a cabo una misión trascendente y fuerte: ser enlace de Ella con el Obispo para que se le construyera su casa y pudiera atendernos (#3, 4, 39, 63, 65, 70, 73, 80, 81, 125, 131 y 134, 143, 147, 152, 162, 184, 192- 194) el tuvo la gloria de estar al cuidado de la Imagen-retrato de la Señora del cielo y de la tierra durante cerca de 17 años; fue sacristán y catequista de María. A cuántas gentes le habrá contado todo lo que vivió! ¡Cuántas veces más habrá estado con el obispo durante estos años! ¿Cómo habrá ayudado a preparar el traslado de la Imagen-retrato y habrá ayudado a muchos a creer en Dios y en esta Iglesia pobre y pecadora que el Señor Jesús fundó?
Aprendamos de Juan Diego a vivir la misión que Dios nos ha encomendado.
Guía: Pensemos, reflexionemos, compartamos: ¿cómo vivimos nuestra propia misión cada uno. allí donde estamos como hijo, padre de familia, encargado de algo? (tiempo... ) ¿ Qué tanto colaboramos con la parroquia, el párroco y las acciones parroquiales? (tiempo...) ¿Qué podemos hacer para vivir nuestra misión de grupo o comunidad de manera que sea testigo de la fe, del amor y la unidad que pide Cristo? ¿ Cómo apoyamos para poder vivir esta misión que Dios quiere que viva toda su familia, su ¿Podemos hacer algo para mejorar lo bueno que ya estamos viviendo de estos aspectos? (tiempo...)

Quinta consideración

Juan Diego es glorificado por Dios, por María y por la Iglesia.

Lector:
Para gloria de nuestro país y de los indígenas de este Continente Americano Juan Diego fue escogido por Dios para que recibiéramos la gran señal que el ha querido dar a la humanidad en su plan de salvación como inicio de una nueva época. En México se cumple la profecía de la Gran Señal Mariana y eclesial que anuncia el Apocalipsis en el capítulo 12.

Y esa señal, nada menos, se queda en el ayate de Juan Diego. Y el ayate era la prenda más útil y simbólica del varón:
denota la persona. Dios glorifica a Juan Diego a través de su ayate y del supuesto ángel -según la cultura occidental- que está bajo la Imagen-retrato de María de Guadalupe. Pero según la interpretación indígena ese ángel es Juan Diego: un niño-hombre-águila... Niño, porque el rostro es de niño, pero hombre, porque muestra entradas en el cabello de hombre mayor; águila porque Juan Diego se llamaba 199 antes de su bautizo: Cuautlatohua o Cuauht/atoatzin: el que habla como águila. Trae las mejores plumas de entonces —signo indígena del mensajero excelente que une al cielo con la tierra. Tiene también ojos y orejas grandes para significar que ve bien y oye bien lo que Dios y los hombres le hacen ver u oír; es decir, es profeta que sabe interpretar la realidad. Es un atlante —gran cargador del cielo en la mitología indígena- que carga el cielo y habita la tierra.

 Presenta a María y a Jesús como llegando a México —pues María trae a Jesús en su vientre y está pisando la mitad de la luna, nombre mítico del antiguo México: me (meztli) luna; Xic (centro-ombligo) co (desinencia de lugar) el significado de México, según el gran antropólogo Gutierre Tibón (en el centro de la luna, a la mitad de la luna; simbólicamente: en el centro del universo). Todo este lenguaje gráfico que trae la Imagen Mariana Guadalupana es un verdadero códice indígena que supieron leer e interpretar los indígenas antiguos.

 Eso les facilitó acercarse a la fe cristiana. ¿Puede haber mayor glorificación de Dios hacia Juan Diego? ¿Hay algún hombre que haya sido glorificado por Dios así como él en este continente... ? María le había prometido a Juan Diego su glorificación y se la cumple (# 35, 36, 90, 92, 139). Hoy, donde quiera que esté María de Guadalupe está Juan Diego Su águila que habla, otro Juan profeta, como San Juan Evangelista, el  Aguila de Patmos; el que cuidó a María muchos años como después aquí Juan Diego. El está ya con Ella, sirviéndola, sirviéndonos... Y la Iglesia toda, hoy lo venera. Si ya desde los primeros años Juan Diego fue muy venerado; si ya aparece en pinturas y esculturas desde el siglo XVI, hoy además ha sido declarado beato y patrono de los indígenas y catequista de América por el Papa Juan Pablo ll iGlorifiquemos a Dios que hace estas maravillas! Aprendamos de Dios y de María a ser agradecidos.

Guía: Reflexionemos y pensemos ¿Qué tanto esperamos la glorificación de nosotros mismos como nos lo prometió Jesús? ¿ Tenemos esta esperanza? ¿ Pensamos con frecuencia y con alegría en el misterio del amor de Dios? (tiempo. ¿ Qué tanto nos estamos preparando con una vida santa y buena para la segunda venida del Señor y para ser glorificados? ¿Estará Dios contento de nosotros? ¿ Qué dirá María de nuestra vida? ¿Puede decirnos también que en nosotros deposita su confianza; que somos sus embajadores dignos de crédito? ¿ Qué hemos de hacer para ayudarnos a crecer en nuestra santidad personal? (tiempo...) ¿ Qué podemos hacer para que todos seamos santos en la familia de los hijos de Dios? ¿ Cómo podemos ayudarnos en la parroquia, en nuestro grupo o comunidad a vivir esta realidad y perfección evangélica que Dios espera de nosotros? (tiempo...

1. 
   Lecturas bíblicas

(Van incluidas en las oraciones complementarias)

1. 
   Oraciones complementarias

Guía: Según las posibilidades del grupo podrán seguir los pasos que propongo
1. Lean primero el salmo 70 (69) y haz notar cómo Io podría decir Juan Diego perfectamente.
2. Después del salmo pueden rezar las letanías Guadalupanas # 5 0 alguna otra que elijan.
3. Lean después el Magnificat de Juan Diego (Está después de Estrella
Promotora)
4. Canten o lean juntos el Magnificat de la Virgen (LC 1, 46-55)
5. Frase para vivir siempre: «Padre: santificado sea Tu nombre... Venga Tu reino...hágase Tu voluntad...» Mc 6, 9-10
6. Oración final
Guía: Guárdanos en tu corazón Virgen hermosa;
Todos: Danos tus flores gloriosas para dar consolación.
Guía: Rondemos con María nuestra realidad,
Todos: itoda nuestra historia se transformará!
6. Canto: Mexicanos, vivamos alegres (Mexicanos, volad presurosos), o Reina de la nación.

VII. Acuerdos — Convivencia — Despedida

Fin de nuestra Pascua Guadalupana.

Que el Dios de la esperanza nos siga guiando para transformar la historia y seamos así dignos familiares suyos.

Nota: Enseguida tenemos los dos anexos: el de Cristo Rey, para usarlo el Domingo último de nuestro año litúrgico, y la visita a las iglesias, santuarios, o al Tepeyac, que usarán el día que mejor les convenga.

Nota introductoria

Esta sesión es para el Domingo en que cae la fiesta de Cristo Rey que se celebra normalmente los últimos días de Noviembre o los 3 primeros de Diciembre; con la fiesta de este Domingo y su semana respectiva culminan las celebraciones del año litúrgico cristiano. Es muy razonable que nos unamos a la celebración de toda la Iglesia y no nos quedemos únicamente en nuestra propia Pascua Guadalupana por muy importante que sea el Acontecimiento Guadalupano en la historia universal pues está al servicio del que es el Unico Rey y Señor de señores. La Virgen estará muy contenta de que le dediquemos este día a su Hijo de una manera especial y fructuosa. En este caso, la Estrella que contemplaríamos en esta sesión sería a María, Madre de Cristo Rey, que humilde y sencillamente está al servicío del Reino de su Hijo Amado, y del mismo Señor Jesús. El nombre de la estrella suprimida ya no aparecería. Esta nota es para los dos tipos de Pascua Guadalupana que se pueda realizar.

1. Ambientación — Recepción — Animación

Sugiero una imagen o foto de Cristo Rey adornada con flores rojas y quizá alguna foto o imagen de alguno de nuestros Beatos y Santos mártires mexicanos de Cristo Rey: Miguel Agustín Pro, S.J., el P. Maldonado o cualquier otro de los muchos que ya tenemos canonizados.

Podrían preparar porras a Cristo Rey, según el tipo de participantes, pues es más fácil hacer esto con grupos de jóvenes. De hecho, para este día podrían invitar a algunos de ellos si de ordinario no asisten, pues sería un buen modo de celebrar el Reinado de Cristo entre los vecinos del lugar o
con sus amigos y familiares.

1. 
   Ubicación — Oración inicial, ofrecimiento y canto

Vamos a celebrar a Cristo Rey. Es una fiesta muy importante en el calendario católico pues con ella cerramos el año litúrgico. Hoy puede tener un significado especial esta celebración de nuestra Pascua Guadalupana pues podemos ofrecerle al Señor Jesús, Rey universal, todo lo bueno que hemos hecho durante todo este año litúrgico que comenzamos el primer Domingo de Adviento del año pasado. Ojalá haya sido un año fructuoso, lleno de buenas obras a favor de otros y vivido con intensidad en el seguimiento del Señor y para la mayor gloria de Dios.

Dios Padre nos ha enviado a su Hijo como Salvador y como Cabeza de la Iglesia, pero también como Rey universal Ha dispuesto que su Hijo sea el Principio de todo —tanto personas como cosas- y que todo esté sujeto a su reinado universal. Pero ha querido, en el caso de las personas, que aceptemos a su hijo, que lo elijamos libremente como nuestro verdadero rey y señor.

 Esto es muy difícil hacerlo vida todos los días porque vivimos un mundo que nos jala para otras cosas y que quiere reinar sobre nosotros. Las tentaciones que sufrió Jesús durante su vida son las nuestras, pero El, como Maestro y Profeta nos enseñó a superarlas. Como Guía, como Pastor y Rey nos dice cómo reinar a través del servicio.

 Como sacerdotes nos enseña a consagrar todas nuestras relaciones con las personas y las cosas para dedicárselas al Padre en el Espíritu Santo como Él lo hizo. El pues, quiere vivir en cada uno de nosotros su propia experiencia personal para hacer de nosotros un pueblo santo, sacerdotal, entregado a las buenas obras. Ojalá este día nos marque para que amemos más a Cristo Rey y le entreguemos todo lo que somos y tenemos como María, su Madre, Reina y Señora Nuestra. Ella, Madre de Cristo Rey, como Gran Estrella, nos dará a conocer más a su Hijo. Tendremos cambios en la manera de hacer nuestra sesión y oración. Aquí
el guía dice los cambios. Dispongámonos para tomar parte en esta vivencia de nuestra fe, amor y esperanza El canto inicial puede ser: Tú reinarás.

III. Lectura del Nican Mopohua

(Se podría hacer con fruto la lectura de los números 70 a 78. Está en la Estrella Madre de Cristo, de la sesión 18, página 74, pues en el #75 aparece el nombre de Nuestro Señor Jesucristo, la única vez que lo menciona explícitamente este documento).

Guía: Ayúdalos a que se dispongan a entrar en contacto profundo y rico con la Palabra del Señor. Haz un espacio de silencio antes de la lectura y otro al terminarla para que disfruten la experiencia. Después que compartan con las preguntas que propongan o con otras pertinentes.

En cada consideración se harán las mismas preguntas y se darán los mismos pasos. Escuchemos atentos los pasajes que vamos a considerar pues nos ayudarán a conocer y amar más a Cristo, Nuestro Rey y Señor. Participemos todos con alegría y agradecimiento.

1. Hechos o consideraciones para este día

Primera consideración

El Verbo-Palabra de Dios se hace carne en María; es constituido como Señor universal desde ese momento y aparece vivo entre nosotros, (Lc. 1, 26-38 y/0 2, 1-20).
Lector:

Lectura del Evangelio según...
Contemplemos a María; aprendamos de Ella a estar dispuestos para colaborar con Dios y a dar vueltas en nuestro corazón a todo lo que hemos recibido de El para agradecérselo. Mientras rezamos las Ave-Marías vayamos pensando en esto. (gloria, jaculatoria y comentarios...) Jaculatoria Guía: Señor Jesús: Tú que eres nuestro Camino, Verdad y Vida.
Todos: Enséñanos a vivir, a amar y a servir como Tú.

Guía: ¿En dónde descubrimos en esta lectura la realeza de Jesús? ¿Qué fruto podemos sacar de ella? ¿ Qué aprendemos de Jesús y de María? (Comentarios... Una vez terminados los comentarios seguimos. Los pasos son los mismos en cada consideración).

Guía: Vamos a decir un salmo que nos habla de la realeza del Señor; después leeremos otra parte del Nuevo Testamento para reafirmar esta proclamación de nuestra fe.
Otras lecturas: Salmo 67 (66); Hebreos 1, 1-4
Canto: Podría ser alguno de Navidad para considerar a Cristo-Rey-Niño, por ejemplo: Vamos, pastores, vamos, o alguno adecuado.

Segunda consideración

Jesús el Señor vive oculto durante muchos años, sufre tentaciones como nosotros y ejerce su reinado sirviendo a su familia, amigos, vecinos... (Lc. 2, 51- 52; Mt 13, 54-58; Lc. 4, 1-13).
Guía: Escuchemos los textos, nos muestran a Jesús en su vida oculta. Contemplemos cómo vivió entre nosotros y por nosotros.
Lector:
Lectura del Evangelio según...
Guíar Al terminar te diriges a los presentes con las siguientes o parecidas palabras:
Pidámosle al Señor que nos enseñe a vivir como el. Recemos y pensemos mientras tanto para sacar fruto. (Decena, Gloria, jaculatoria, y comentarios...) Lecturas: Salmo 90 (89); Nuevo Testamento: Ef. 2, 14-22
Canto: Amigo.

Tercera consideración

El Señor Jesús vivió su ministerio apostólico en el servicio a su pueblo; lo animó, lo corrigió, lo sanó, lo educó en la fe y el amor y lo fue haciendo su Iglesia con la fuerza del Espíritu para la gloria del Padre,
Guía: Veamos cómo Jesús se hizo servidor de todos voluntariamente. (Mc. 1, 14-45; Mt. 5, 1-12; Jn. 13, 1-17 y 34-35)
Lector:
Lectura del Evangelio según..
Guía: Sintamos cómo Jesús nos ha ido educando, sanando, convirtiendo en nuestra propia historia a cada uno de nosotros. Démosle gracias mientras rezamos la decena por todo el bien que nos ha hecho. (Rezo del Gloria, jaculatoria y comentarios).
Otras lecturas: Salmo: 99(98); Ef. 3, 14-21
Canto: El Pescador (Tú, has venido a la orilla...)

Cuarta consideración

El Señor Jesús padeció y murió para redimirnos y darnos la vida en abundancia; fue entregado por nuestros pecados y glorificado en la cruz; desde ella nos atrae ahora a todos hacia El. (Mc. 15, 15-20; Lc. 23, 26-49; Jn, 19, 25-37)
Guía: Vamos a considerar ahora cómo Cristo el Señor por darnos vida eterna, vida en el gozo e intimidad de la Trinidad, de María, de los ángeles y santos fue a Jerusalén no obstante que sabía que lo matarían. Allí padeció en su carne y en su espíritu lo que nadie; fue dolor auténtico de Dios. Acompañemos a Nuestro Rey y Señor en Su pasión; recordemos los momentos principales y agradezcámosle que con tanto amor y heroísmo haya dado su vida por cada uno de nosotros. Escuchemos la lectura.

Lector:
Lectura del Evangelio según...

Guía: Sintamos en nuestro interior, como si estuviéramos en Jerusalén, la impotencia, el dolor de no poder hacer ya nada por Jesús... Guardemos en el corazón este testimonio de su amor por nosotros. Contemplemos a María, Nuestra Madre, llena de dolor, que junto a la cruz padeció por nosotros. Ella, la Reina humilde, está al pie de la cruz de su Hijo, Rey del universo, en el momento supremo de Su entrega. Démosle gracias a los dos por su entrega total a nosotros. Recemos ahora la Ave-Marías.,.
Otras lecturas: Salmo: 22 (21).
Guía: Oigamos qué bien profetizó el autor de este salmo lo que pasaría con Jesús.
Nuevo testamento: Fil. 2, 6-11 0 Heb. 4, 14-16 y 5, 7-9; Apoc. 5, 9-10 y 12, IOb -12,
Canto: Perdón, oh Dios mío.

Quinta consideración

Jesús es proclamado Señor universal con su resurrección. Es el triunfo definitivo de Dios sobre el mal, el dolor, la muerte, el pecado. Con esto se nos abre a todos la esperanza de llegar a participar de la misma gloria de Jesús con el Padre, el Espíritu Santo, María y todos los Bienaventurados. (Jn. 20, 1-18; Jn. 21 , 1-20; Mt. 28, 16-20),
Guía: Celebremos el triunfo de Cristo resucitado, Señor de la historia. El acontecimiento definitivo de nuestra fe es la resurrección del Señor. A partir de ésta la iglesia va a ser constituida como la prolongadora en el tiempo de la salvación realizada por Cristo. Escuchemos alguno de los relatos de la resurrección.

Lector:

Lectura del Evangelio según...
Guía: Contemplemos al Señor lleno de gloria. Extasiémonos viendo Su cuerpo glorioso, Su mirada triunfadora, Sus manos en actitud de acoger con amor a todos. El es el triunfador definitivo de la historia que nos invita a colaborar con el para hacer un mundo mejor para todos; es el que nos da su Espíritu para que seamos la familia y pueblo de Dios que el Padre quiere que formemos ya en esta tierra Pensemos y Sintamos todo esto mientras vamos rezando las Ave-Marías.
Otras lecturas: Salmo: 44 (43)

Guía: Contemplemos al Rey, y a María, la Reina. Alternemos con devoción este Salmo (ó el 24 (23).
Nuevo testamento: 1 col. 1, 11-20; Apoc. 15, 3b-4, 19, 1-16 y 21, 1-7.

Canto: Tu Reino es vida.

V. Oraciones complementarias

Guía: Anímalos para que inventen una letanía a Cristo Rey, Señor del universo

1. Oración final — Canto — Acuerdos

Guía: Podemos terminar nuestra sesión de este día con el Gloria de la Misa  es una síntesis de lo que vivimos, creemos y proclamamos de Cristo, Señor y Nuestro. Digamos todos: Gloria a Dios...

Guía: Silo consideras oportuno podrías proponerles que digan juntos la oración de San Ignacio a Cristo como culminación y ofrecimiento de este día. Toma, Señor y recibe toda mi libertad, mi memoria, mi entendimiento, mi voluntad; todo lo que soy y tengo, Tú me lo diste, a Ti te lo devuelvo; todo es Tuyo, dispón conforme a Tu voluntad, a mí dame Tu amor y gracia que
esto me basta.

Nota: Según la fecha en que caiga esta celebración seguirán con el día que toca de Nuestra Pascua. Tendrán cuidado en tener claro cuál es la estrella a considerar la siguiente reunión pues es imposible decirlo aquí. Por eso no pongo cuál es la estrella correspondiente; eso le toca ver a
cada grupo participante. Sería conveniente hacer una pequeña evaluación de este día para ver qué
les dejó de fruto. Se les podría preguntar si les gustaron los textos bíblicos, si fueron demasiados, si les parecieron apropiados...

El canto final podría ser: Pueblo de reyes.

De piel morena
(Canción)
Camino a Tlatelolco iba Juan Diego;
su fe inquebrantable su motor...
El viento trajo música del cielo,
visión maravillosa, anuncio del amor.
Andante de mi pueblo, fiel testigo,
mensajero de un kerigma salvador...
Revuelo de campanas en el corazón,
Presencia majestuosa, la Madre del Señor.
De piel morena apareció,
Amor materno de rosas y de color...
Camino del cerrillo María se mostró;
zenzontles de mi tierra en oración.
De piel morena su corazón,
Preñada del Mesías, de mi Redentor,
Vestida de mi tierra,
Cubierta por el sol,
Manos morenas en acto de oración...
Cubierto de un ayate por el frío,
¡llevando entre sus brazos el amor..!
Corriendo con las rosas del milagro,
un gran portento: ila Imagen se grabó!
María de Guadalupe, Virgen Madre,
iAmor que con nosotros se quedó!
Imagen que a la gente le recuerda
que para Dios no importa el color.
De piel morena apareció..
Tú el más pequeño...
iVirgen de Guadalupe,
Reina de mi nación!
De piel morena...
Nota: autor: César Miranda.- Grupo: Claret México, D.F.- canta: Verónica Bravo.

Es muy frecuente que los grupos deseen ir a algún lugar en donde puedan ofrecer su amor a la Virgen María, donde se le alabe, y también, en donde se le hagan peticiones. Es muy lógico, que, tratándose de Nuestra Amada Morenita Guadalupana, y dentro o después de una experiencia tan larga en común, los grupos se organicen para ir a venerarla a un lugar dedicado a Ella.

 Es muy importante organizarse con tiempo y que en el lugar elegido hagan la sesión correspondiente al día que hagan la visita. A nivel práctico les recomendaría que nombraran a quienes vayan a coordinar la visita; que no se olviden de llevarle flores a Nuestra Madre, y de prepararse espiritualmente con anticipación, y con cuidado sobre todo si el lugar al que van a ir no está cerca del lugar en que viven. No olviden su libro de cantos, pancartas alusivas a María, Estrella Nuestra, y otros elementos que juzguen convenientes.

Es muy lógico, dado el compromiso que se va generando, que inviten a familiares y amigos para que sea una pequeña peregrinación llena de contenido con muchos frutos.

 Al inicio de la experiencia podrán recordar que Jesús, María y José también peregrinaron hacia Jerusalén para hacer la visita acostumbrada cada año.

Como Ellos, también multitud de Santos hicieron peregrinaciones a Tierra Santa, a Roma y a muchos otros lugares de veneración dedicados a la Reina y Señora del cielo y de la tierra. Aquí, en México, son famosos, además del Tepeyac, San Juan de los Lagos, Zapopan, Izamal, Los Remedios, Juquila y tantos más. Ya no se diga a nivel internacional con miles de capillas, iglesias, santuarios y basílicas dedicados a Nuestra Santa Madre.

El guía podrá recordar la procesión que hicieron Fray Juan de Zumárraga, Juan Diego, Juan Bernardino y miles más en el traslado de la Imagen-retrato de Santa María de Guadalupe desde el centro de la Ciudad de México al Tepeyac el 26 de Diciembre de 1531 ; iésa sí que habrá sido una procesión digna de recordar toda la historia!

Si el grupo lo desea, podrían emplear algunas lecturas adecuadas al momento escogidas de la Sagrada Escritura. Pueden apoyarse en mi folleto: «De Peregrinación a la Basílica de Guadalupe» editado por esta misma Editorial. Les doy algunas citas bíblicas que les podrán ayudar: 2 Sam, 6, 1-5; 12b-15 y del 17 al 19; Is 35, 1-10; Lc 2, 41-52.

«Dichosos los que encuentran en Ti la fuerza al preparar su peregrinación.» Salmo 84

Guía: Llévalos a los pies de Nuestra Madre y sugiéreles que platiquen en silencio con la Virgen; que la contemplen con el corazón, que le ofrezcan su vida, sus preocupaciones.

Para terminar, pueden utilizar el Ramillete de las letanías Guadalupanas que les ofrezco enseguida.

Ramillete de letanías Guadalupanas
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Santa María
Santa Madre de Dios
Hija predilecta del Padre.
Madre del Hijo unigénito de Dios
Consuelo del Espíritu Santo.
Templo del Verdaderísimo Dios por quien se vive.
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Ruega por nosotros Madre del Dios único de todos los hombres y pueblos.
Madre del Dios de la alianza.
Madre de Dios siempre cercana a todos.
Reveladora de Jesús en el Tepeyac.
Portadora de salud y vida.
Alegría de nuestra tierra.
Felicidad de Méxiéo.
Río de la luz de nuestro pueblo.
Arrullo de nuestra tierra.
Manantial de esperanza.
Estrella de la evangelización.
Mujer flor.
Mujer vestida de sol.
Camino predilecto para llegar a Cristo.
Cumbre y monte de nuestra alegría.
Portadora de un mundo nuevo.
Aurora de nuestro caminar.
Madre y Profeta Reveladora del triunfo de tu Hijo y de su Iglesia.
Flor y canto de América.
Reina de toda la creación
Enséñanos a vivir
María, la de la palabra suave, dulce, que acaricia.
María, la que nos das al Dador de vida.
María, la que tienes en ti el Corazón del cielo.
María, la que nos traes al Sol de la Verdad y de la Luz.
María, la que nos entregas la Flor de la gran verdad.
María, la que realizas en nuestra tierra la alianza de Dios con nosotros.
María, Jovencita Hermosa, modelo de todas las jóvenes.
María, la que haces florecer y das vida al Tepeyac.
María, la que nos pides tu casita sagrada para atendernos.
María, la que te nos haces solidaria con la suerte de nuestro pueblo.
María, la que promocionas al pobre desamparado.
María, la que ayudas a promover y dignificar a los humildes de la tierra.
María, la que nos aquietas el corazón.
María, la que nos atraes y nos pones en tu regazo.
María, la que nos acercas más y más a Jesús y a nuestros hermanos.
María, la que conviertes a los poderosos en servidores de los demás.
María, la que haces la comunión en uno de tantas razas y pueblos dispersos.
Enséñanos a amar
Madre que conoces nuestros andares y pesares.
Madre que nos acoges y arrullas con cantos celestiales.
Madre que apaciguas nuestras violencias.
Madre que nos llamas a vivir reconciliados y amigos.
Madre, Modelo y Guía de todas nuestras Madres.
Madre, Protectora Bondadosa de todas nuestras familias.
Madre, la más Hermosa y Gloriosa Mujer de toda la creación.
Madre, síntesis de todo lo perfecto.
Tú, Vida, Dulzura y Esperanza nuestra.
Tú, Canto y Victoria de Dios desde nuestra tierra.
Tú, Santa María de Guadalupe, Río de amor y consuelo para todo el mundo: intercede ante tu Hijo para que el Padre nos dé su Espíritu para construir, todos juntos, la Civilización del amor.
Amén.

Comentarios y reflexiones sobre lo vivido y meditado hoy.

El coordinador o coordinadora de la visita pueden colocar esta evaluación al final de la experiencia o para otro día en que tengan más posibilidades de hacerlo. Se podrían preguntar qué les pareció visitar a María en comunidad con los apoyos aquí ofrecidos y con los que cada grupo puso de su cosecha.

Oración final, canto y despedida.